Parte I de la bilogía "Amores reales".
-Vamos, Serem, ¿qué salió? -Grita su mejor amiga Aria desde el otro lado de la puerta, está más que ansiosa.
Toma un respiro y abre los ojos, toma despacio la prueba de embarazo y mira de una el resultado.
-Car...
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Serem veía con tristeza a sus hijas, no quería dejarlas. Sin embargo, también quería pasar un tiempo a solas con Alexandri.
—Preciosa, solo será un fin de semana. No es como si nos despidiéramos para siempre —abraza el pelinegro por la espalda dejando caer su barbilla en el hombro de Sem.
—Lo sé, pero aún así me siento mal de dejarlas solitas —hace un puchero poniendo sus manos sobre las del ojiazul.
—No estarán solas, mi madre, tu abuela, Aria e incluso Simon estarán al pendiente de que no les pase ni le falte nada durante nuestro pequeño viaje —besa ligeramente su cuello.
—Bueno, mejor vámonos. Porque si me quedo un momento más no podré irme después —se voltea hacia Alex y deja un corto beso sobre sus labios.
Ambos miran por última vez a las gemelas, quienes duerme plácidamente en sus respectivas cunas.
Unos leves toques les avisa que la chica que se encarga de la limpieza de la habitación de las bebés ha llegado. Ella las cuidará mientras los demás se despides.
—Por favor, cuídalas bien. No tardaremos mucho. —Pide la castaña.
—No se preocupe, majestad. Las cuidaré muy bien. —Le ofrece una sonrisa.
—Eso espero, que haga bien su trabajo —Alexandri se comporta muy frío con la chica.
—Delo por hecho. —Hace una reverencia y toma asiento en uno de los sofás que se encuentra en la habitación. El cual, da directamente a las cunas.
La pareja sale de la habitación tomados de las manos, su equipaje ya estaba cargado en una de las camionetas. Solo quedaba despedirse.
Al terminar de bajar las escaleras, toda la familia se encontraba reunida en la sala de estar.
—Por favor cuídense mucho. Nos veremos el lunes. —Se despide Carlota dándole un abrazo a cada uno.
—Cariño, cuídate, aún no es recomendable otro embarazo —le susurra al oído Gianna a su nieta.
—No te preocupes, no quiero volverte abuela otra vez tan pronto —sonríe y abrazan.
—Buen viaje, Sem. Disfrútalo que te lo mereces. —Se acerca Aria en compañía de Simon.
—Que les vaya bien. —Sonríe el rubio.
—Tía Sem, diviértete. Tío Alex, cuídala. —Le advierte mirándolo "seriamente".
—Prometido pequeño. —Levanta su mano como señal de promesa.
—Diviértanse mucho. —Habla Ellorie emocionada.
—Anda, ternura, vamos. —Le toma la mano y ambos levanta su mano despidiéndose. —. Nos vemos en unos días.
Salen y suben a una de las camionetas. Otras dos vienen tras ellos, irán al aeropuerto, claramente ellos viajarán en jet, por seguridad no es recomendable que lo hagan en un vuelo normal.
