Wonder Dad and Super Daddy

¡Hora de la acción!

El salón era frio, los colores eran grises, pero irónicamente sus paredes estaban llenas de mensajes positivos.

—Por lo que escucho, parece que estás pasando por un momento realmente malo, ¿te sientes como en aquel entonces, cuando empezaste a venir? —Preguntó la mujer castaña frente a su cliente, quien solo ocultaba su rostro.

—Yo no tenía nada sabes, estaba arriba del mundo sintiéndome el peor supervillano, pero cuando Mysterion desapareció... fue horrible.

—Lo sé, fue difícil para ti pasar por todas las etapas del duelo.

—Si, pero ahora es diferente, para mi ellos eran mi familia, eran mi vida, yo estaba en paz. Ahora que Kenny lo sabe y me ha alejado siento mi mundo desmoronarse como la primera vez, incluso peor.

—¿Realmente amas a esos niños? ¿Podría ser que sin querer creaste una realidad donde sentías que eras co-padre con Kenny y no un amigo que lo quería ayudar? —Esa pregunta hizo que el rubio alzara la vista, sorprendido.

—No lo había visto de esa manera—Se sobó los nudillos—durante mucho tiempo ya no sentía la necesidad de confesarme, puede que me haya sentido muy cómodo así, como si fuéramos una pequeña familia feliz. —Se entristeció por sus propios sentimientos.

—Has hecho mucho por ellos, ¿esperabas algo a cambio?

—No, seguramente era eso lo que quería a cambio, la sensación de ser una pequeña familia—Sonrió triste. —Kenny tiene razón, realmente yo tenía dobles intenciones.

—Ey, no necesitas sentirte necesariamente mal por ello, tomaste decisiones inconscientes que te llevaron a una consecuencia que no deseabas. Lo importante ahora es que afrontes tu realidad y avances. —Lo calmó la mujer.

—¿Y qué debería hacer ahora? —Pregunta afligido.

—Esa respuesta solo la puedes dar tú, pero lo que decidas debe darte tiempo para sanar, para reflexionar y, sobre todo, debes aprender a llevar una vida sin Kenny como tu principal fuente de felicidad. —Butters se quedó pensando un momento.

—Tienes razón Heidi, me alegro de que hayas aceptado ser mi psicóloga a pesar de que seas la ex esposa de uno de mis viejos amigos. —La castaña suspiró.

—Eso está en el pasado y lo sabes, hemos tenido una buena terapia por hoy. Solo te volveré a pedir el mismo favor de siempre.

—Tranquila, nunca le diría a nadie de Coon y amigos sobre ti. Recuerda, se supone que yo era el villano y ellos los héroes—Ambos rieron.

—Gracias, profesor Chaos.

...

Por las heladas calles de South Park, entre los numerosos arbustos del vecindario un grupo de niños se escondían con sus trajes puestos, pues hoy era su debut, hoy sería el día que el mundo conocería a los Neighborhood Friends (si, un nombre de mierda para un grupo de mierda) quienes estaban atentos, esperando la llegada de la maldad.

—Blue, ¿nada por tu calle? —Pregunta Fire Girl desde un árbol.

—Nada, ¿qué hay de Race boy? —Pregunta.

—N-n-nada chicos... pero si e-en media hora no pasa nada me voy, d-d-debo visitar a mi papá en el hospital.

—Vale, ¿Aleteo?

—Si, aquí parece que un drogadicto intenta entrar en la casa de Ike Broflovski, el profe canadiense.

—¡Parece un robo, todos vamos hacía la dirección! —Comunica y todos responden afirmativamente.