La Huida (2da parte)

79 6 2
                                    

No supo en que momento su arena de combate ardía en llamas, a su alrededor habia algunos desafortunados guardias que no lograron escapar. Solo recuerda esa silueta fantasmal y el rugido que lanzo....

MOMENTOS ANTES...

- ESTA VEZ NO PERDERE

Para sorpresa de todos, el Susanoo de Indra comenzo a cambiar de forma, fuera del palacio

- ¿Qué es eso?

- ¿Un monstruo?

La gente observaba asustada dicha figura, mientras los guardias estaban alertas. Los hermanos de Kouen estaban boqui abiertos, sin saber que comentar. Juba por su parte, se aferraba a Judal quien solo le daba leves masajes en su espalda, pero los de Al-Thamen

- Señora – viéndola con una sonrisa

- Que emoción... sin duda alguna – sus ojos cambiaron de color – ese poder debe ser mío

- Esa bruja... - viendo salir rukh negro

Los pensamientos de Judal se vieron interrumpidos al ver a Juba a punto de llorar, pero notando que escondía sus manitas de las avecillas negras, asustándose al sentir que el sello de su pequeño pronto se terminaría

- Esa mujer – Matatabi la veia atenta – puedo sentir un peligroso chakra emerger de su cuerpo, mas oscuro que el de... - sintiendo uno más debil – este es... – notando al pequeño bebé – ya veo... te ayudare

Judal alzo su rostro al sentir la mirada del felino quien asintio, el magi le devolvió el gesto para nuevamente colocar el sello en su bebé

- Calma Juba, ya no las veras – acariciando su cabello – mamá no dejara que te hagan daño

Juba alzo sus ojitos llorosos, viendo la cálida sonrisa que su madre le daba. El pequeño deshizo sus puños aferrándose a la ropa de Judal, al ya no ver las avecillas negras, el bebé sonrio

- Ese es mi niño... a buena hora tuviste que irte... Sinbad

En Sindria, una copa de vino yacía derramada en el piso, mientras el que la sostenía se apoyaba en su escritorio con una mano cubriendo su rostro

- Sinbad, ¿estas bien?

Pero el peli morado no respondio, solo comenzo a caminar tambaleándose e ignorando a sus generales. Ya fuera de la oficina

- ¿Qué fue eso que sentí?, alguien esta a un paso de caer en la depravación... y ese otro... aunque fue breve, es muy poderoso... - viendo al cielo - Judal, Juba, espero que estén bien.

En otra parte, Hagoromo se encontraba meditando, tratando de encontrar a Matatabi, fuera del recinto, Ashura iba de aquí a allá bajo la atenta mirada de Hana y Taizo.

- Ashura, cálmate

- No puedo, desde que volvimos no puedo... primero mi hermano debe quedarse con ese sujeto y ahora uno de los bijuus desaparece

- Ashura, ¿no crees que haya una posible relacion?

- ¿Qué quieres decir Hana?

- Es una corazonada, pero...

- Hana tiene razon – aparecio Hagoromo

- Padre, ¿encontraste a Matatabi?

- Solo sentí su chakra por un momento y nuevamente aparecio ese imperio en mi visión

- Entonces ese sujeto no cumplió con su palabra

- No – interrumpio Hagoromo – puede que todo esto haya pasado por algo

Te Amo a Mí ManeraWhere stories live. Discover now