v e i n t i c u a t r o (²|²)

21.7K 2.4K 1.3K
                                    

Dos días pasaron y como lo supuse él no me había dado ninguna respuesta, debía acostumbrarme a eso.

Habíamos vuelto a su departamento, afortunadamente mi fobia parecía estar disminuyendo gracias a que pude arreglar las cosas con Rubén, tomar aviones ya no sonaba a un infierno para mí

Estaba en la sala mirando algunos vídeos y clips de Quackity, quería conocerlo también dentro de su ambiente. El timbre sonó haciendo que saliera de mis pensamientos

—Kiki ¿puedes abrir?.— escuché a Quackity —Estoy arreglando mi computador, no prende y quería prender directo hoy.—

—¡Voy!.— respondí elevando un poco la voz para que pudiera escucharme

Me dirigí hasta la puerta, abrí y lo primero que ví fué a un chico con un hermoso cabello castaño parado frente a mí

—Hola.— saludó amablemente y yo solo dí dos pasos hacia atrás —¿Estás bien? Parece que viste un fantasma.—

Sentí un pequeño cosquilleo recorrerme, no era tan fuerte pero aún así era una sensación incómoda

—Espera.— pidió viendo como yo seguía retrocediendo

Frené y él se acercó, tomó mi mejilla haciendo que mi respiración se agitara

—Tienes unos ojos realmente hermosos.— halagó sonriendo —Muchos dicen que los ojos son la ventana del alma, es irónico si lo piensas.—

—Tus ojos también son lindos.— intenté no tartamudear y él de inmediato se alejó para cerrar la puerta

—Descubrí que no eres muda ¿podemos iniciar de nuevo?.— preguntó manteniendo esa sonrisa bastante linda

Escuché pasos acercarse, sabía que era Quackity

—¡Karl!.— corrió a saludarlo —¿Qué haces aquí?.—

Así que este chico era el famoso Karl, debía admitir que me lo había imaginado totalmente diferente

—Vine a charlar contigo.— respondió dándole un corto abrazo a Quackity —¿Ella es Kiki?.—

Al parecer ya le había contado sobre mí, Quackity asintió sonriendo

—Es bonita y creo que es agradable.— dijo aunque yo prácticamente no había hablado con él —Es un gusto Kiki.—

Se acercó nuevamente a mí y me abrazó, yo quedé inmóvil, me sentía bien y eso era raro

—¡Ey, basta!.— exclamó Alex separandolo de mí —No está acostumbrada a tanto contacto.—

No podía parar de mirar a Karl, parecía que había tomado confianza tan rápido pero por alguna razón ya no me sentía incómoda

—Está bien.— aclaré y Quackity me miró con sorpresa —No pasa nada.—

—¿A qué te refieres con que no pasa nada?.— preguntó Quackity sin entender

—Creo que puedo tocarlo.— dije con una pequeña sonrisa —Karl, ¿me prestas tus manos?.—

Aquel chico parecía intrigado pero estiró sus manos, yo las tomé y ya no sentía comezón, que extraño

—No pasa nada.— mi sonrisa se hizo cada vez más grande, estaba emocionada

—No puedes ser inmune a él también, no lo veo lógico.— exclamó Quackity

—No sé que está pasando pero me parece fascinante.— se limitó a decir Karl mientras veía como yo agarraba y soltaba sus manos para asegurarme de no sufrir alguna reacción

Sentía ilusión, tal vez el método de Quackity estaba funcionando y mi fobia poco a poco se estaba curando

—Muy bien, todo muy lindo pero necesito hablar contigo a solas.— dijo Alex jalandome para alejarme del otro chico —Karl puede esperar sentado en el sofá ¿no?.—

—De hecho el sofá me gusta mucho.— se limitó a responder mientras se iba a sentar

Quackity tomó mi mano y me jaló hasta su habitación, yo no entendía que estaba pasando

—¿Cómo es posible que seas inmune?.— cuestionó —Pensé que solo podías ser inmune a las personas en las que confiaras.—

—Ni yo misma sé porque parece que soy inmune a Karl también.— respondí —No suelo confiar en desconocidos, incluso para confiar en tí tuve que charlar un rato contigo.—

Él parecía estarlo pensando, parecía no poder creerlo

—"Los ojos son la ventana del alma".— repetí algo que aquel castaño me había dicho

—¿Qué?.— preguntó sin entender

—Karl dijo eso y después miró mis ojos.— conté —Yo también miré los suyos y sin duda son lindos, quizás estoy relacionando que tiene un alma linda por sus ojos o algo por el estilo.—

—No tiene sentido Kikiriki.— exclamó —Como sea, evita tener contacto con él mientras descubrimos que está pasando.—

—Le estás dando mucha importancia.— reí —Puedo acercarme a él y es raro que pueda acercarme a los chicos, no me pidas que no lo haga.—

—Solo quiero cuidarte.— suspiró mientras se sentaba en la cama, yo lo miré con una pequeña mueca —Kiki, tú me gustas.—

Me quedé estática un momento, ¿Qué se supone que debería hacer ahora? había conseguido la información que quería pero no sabía que hacer con ella

—No te digo esto para que me hagas caso.— avisó rápidamente —Puedes acercarte a Karl pero hazlo con cuidado ¿si?, quédate atenta a las señales, si te hace sentír incómoda toma tu distancia.—

Me acerqué para besar su mejilla y me senté a su lado, él sonrió un poco

—Puedes ir a charlar con tu amigo.— dije —Vino a verte y lo primero que hicimos fué confundirlo con cosas de mi fobia que seguramente no entiende.—

—Él sabe sobre tu fobia.— aseguró mirándome —Le conté algunas cosas, espero que eso no te moleste.—

—Por supuesto que no me molesta.— exclamé algo feliz —Pensé que no le contarías a tus amigos sobre la fobia extraña de la chica rara que vive contigo.—

—¿Por qué no les contaría?.— rió sin entender

—Quizas te avergonzaba.— teoricé riendo también

—Ahora que Rubius sabe sobre nosotros tengo la libertad de contarle a todos sobre la fantástica chica que conocí.— sonrió —Y tu fobia es parte de tí por ahora, si lo pensamos un poco es como un superpoder.—

—¿Qué clase de superpoder sería temerle a los chicos?.— pregunté burlona

—Los chicos por naturaleza son mentirosos y algo crueles, no acercarte a ellos debe ser una bendición para tí.— aseguró riendo de nuevo

—Tú jamás me mentirías ¿no?.— pregunté y su risa se detuvo —"Los chicos son mentirosos por naturaleza" pero tú no ¿verdad?.—

Quackity despeinó mi cabello, yo eso lo quise entender como una respuesta positiva, él no me mentiría.

—No quiero interrumpir nada pero me estoy aburriendo.— entró Karl

—Yo los dejaré solos para que hablen de lo que tenían que hablar.— avisé levantándome —Estaré en mi habitación.—

Ambos chicos me sonrieron y salí de ahí.

Entré a mi habitación y dí algunos saltos de alegría, ¡me dijo que le gustaba! sabía que si quería una relación con él tenía que poner todas mis fuerzas en intentar curar mi fobia

𝐊𝐈𝐊𝐈-𝐑𝐈𝐊𝐈 [Quackity X Tú]✓Where stories live. Discover now