Al revés - sookai

chapter 20. confort

Era una mañana muy tranquila para ambos amantes, el castaño se encontraba cómodamente entre los brazos de su alfa mientras esté repartía besos sobre su cabeza y acariciaba sus lacios cabellos, disfrutando ambos de la cercanía del otro, su celo finalmente había pasado, sin embargo todavía querían estar cerca del otro, no se dejaban el uno al otro, pues era el lazo, el lazo que los unía el uno al otro.

— Soobin — habló el omega con sus ojitos aún cerrados debido a la tranquilidad que sentía entre los brazos de su alfa.

— ¿Si, pingüinito? — respondió esté sin parar con las caricias.

— ¿Qué haremos ahora que la marca nos une? Digo, pasamos por muchas cosas desde el cambio y antes del cambio para llegar aquí  — preguntó el omega acomodándose en el pecho de su alfa.

— mmm, no lo había pensado, simplemente vi esto como la unión entre nosotros, creo que seguiremos haciendo lo de siempre juntos, aún vamos a terminar la universidad y pasarán nuevas cosas y tendremos nuevos recuerdos ahora, es emocionante —

Kai sonrió, levantándose para quedar sentado frente al alfa.

— Quiero hacerlos — respondió esté — hemos estado juntos desde preparatoria, por su puesto que quiero nuevos recuerdos, los hemos hecho desde... Desde siempre —

Soobin sonrió, se acercó al rostro de su omega y besó con cariño sus labios.

— Cada día hay un nuevo recuerdo —

Kai suspiró feliz, estaba muy enamorado de su alfa, él es todo lo que siempre quiso, desde siempre y agradecía siempre haber topado con él en su vida, pues le dió un giro (literalmente) inesperado.

Mientras tanto Soobin estaba igual de agradecido de tener a aquél chico en su vida, pues jamás se imagino que este podía ser suyo, su novio, su omega y muy seguro su futuro esposo. Y pensar que algún día odio tanto a los alfas, hasta que conoció a Kai y entonces se volvió uno de la noche a la mañana, pero es que su novio era tan diferente a los demás alfas, y él trataba de ser mejor alfa para su omega, ambos ya eran independientes y aquel pequeño departamento sería su hogar temporal en lo que terminaban sus carreras y ganaban dinero suficiente para comprar una casa más grande en el futuro, todo era seguro, incluso el amor que existía entre ellos dos, ya nada podía separlos pues las dificultades ya las habían pasado, ahora les tocaba ser felices.

Ser felices porque lo merecen, porqué durante toda su vida buscaron aquello que les completara, hasta el día que dieron con ellos mismos y decidieron estar juntos, porque son dos personas que están destinados a estar juntos.

— Salgamos un rato — habló el omega.

El alfa asintió, ambos se levantaron de su cama y buscaron algo de ropa ya que se encontraban aún en pijamas, era un día soleado y la luz del sol mañanera no era tan calurosa a esa hora, tampoco dañina, así que estaba bien si salían un rato a caminar y después llegarían a casa a preparar su desayuno, era día domingo así que podían hacer las cosas con tranquilidad.

Ambos ya cambiados y listos con los zapatos puestos, salieron de su habitación para tomar las llaves.

— Olvidé una cosa, ahora vuelvo — avisó el alfa regresando a la habitación.

Kai tenía un poco de sed así que se acercó a tomar algo de agua en la cocina, la sirvió en un vaso y comenzó a tomarla, miró fijamente al calendario de la cocina, dándose cuenta de que pronto sería su cuarto aniversario juntos, ¿Ya habían pasado cuatro años? Fue demasiado rápido el tiempo que nunca lo sintió.

Debería prepar algo para ese día, tenía una cosa en mente, sólo esperaba que Soobin aceptará, igual durante la salida podría decírselo.

𓏲𓂃ᵒᵐᵉᵍᵃ|ᵃˡᶠᵃ»𝘴𝘬🌱𓂃

La pareja caminaba tranquilamente por el parque, el día no era ni caluroso ni fresco, por lo que el clima no les molestaba en absoluto, era bastante cómodo para ambos para ser sinceros, Soobin usaba unos pantalones holgados y largos junto con sus converse blancas y una sudadera color negro, mientras que Kai usaba unos shorts largos con sus vans negras y una sudadera con capucha.

Ambos tomaban leche de plátano tranquilamente y sus manos estaban enlazadas, ninguno decía palabra alguna, puesto tenían los audífonos puestos, uno en la oreja del otro mientras compartían sus canciones favoritas.

Sin duda eso sería una de sus cosas favoritas siempre, pues disfrutaban de la compañía del otro, les daba mucho confort. No había nada mejor que eso.

Ambos al aire libre, con leche de plátano para acompañar el momento y porque sus gargantas exigían algo de líquido al verse cantando hace unos minutos atrás, cosa que llamaba la atención de las pocas personas que andaban por ahí, algunos los miraban con ternura, pues una pareja de alfa y omega juntos pasando de un buen rato y otros como extrañesa al verlos cantar con una mala pronunciación en inglés, al menos por parte de Soobin.

— Soo — interrumpió el omega el momento de de silencio llamando la atención de su alfa.

— ¿Pasa algo pingüinito? — dijo este mirándolo fijamente.

— Nuestro aniversario será pronto — mencionó — Y se me ocurría algo —

— Por su puesto, dime —

— Quiero que recreemos el día cuando descubrimos que somos destinados, con la misma vestimenta o bueno... Similar, ya que no nos quedará esa ropa — dijo con una risita.

Sus cuerpos cambiaron mucho desde el cambio y desde ese día, hablamos de hace cuatro años, seguro esa ropa tampoco existía ya.

— es una excelente idea — mencionó Soobin con una sonrisa — buscaré en esa tienda otra pijama de conejos... Rosas — ambos rieron por lo gracioso que sería ver al alfa con ese estilo, estilo que cambió mucho desde entonces.

— ¿Tienes algún traje? — preguntó el omega.

— Sí, en casa con mis mamás, sólo lo usé una vez, hace como dos años, seguro te queda muy bien —

— perfecto —

El omega sonrió, amaba a su alfa, siempre lo apoyaba en cada una de sus ideas por más locas que fueran, siempre fue así, amaba tanto a ese hombre por cualquier detalle, aún si fuera la cosa más pequeña que hiciera lo amaba.

Eso era seguro, su amor lo es.

El alfa atrajó a su cuerpo al omega, abrazándolo con cariño, no era nada nuevo que de repente le abrazara, pues sabía lo mucho que su omega disfruta del contacto físico y más si se trata de él, simplemente sentía necesitarlo, era el momento perfecto para hacerlo, un momento aún más de confort.

Sus lobos ronroneaban por ese momento, desde la marca habían estado más cariñosos que de costumbre y sus aromas no podían estar más combinados, era una agradable combinación de chocolate, como si de una tienda de chocolates de tratara.

Ambos se separaron y tomaron sus manos de nuevo para regresar a casa, seguramente a dormir de nuevo o posiblemente a preparar algo de comer pues sus estómagos exigían comida.

— ¿Te parece si hago unos panqueques? — preguntó el alfa.

— Bien, pero que lleven chocolate extra — respondió el omega mientras comenzaba a balancear sus manos.

— Está bien, sólo lo haré porque me lo pides tú —

Ambos sonrieron y siguieron su camino a casa.

𓏲𓂃ᵒᵐᵉᵍᵃ|ᵃˡᶠᵃ»𝘴𝘬🌱𓂃

Holaaa! Después de mucho tiempo regresé.

Han pasado muchas cosas desde mi última actualización, iniciando con varios proyectos de la escuela, exámenes, trabajos y tarea. Contando que ya estoy empezando a prepararme para mí examen de admisión a la universidad (que realmente espero si pasar o me doy de baja).

Espero que les haya gustado ^^

Nos leemos pronto (o dentro de un mes si no me pierdo otra vez JAJA).

Bais.

- Madi Soo