。☬ Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 3 ☬。

149 29 6
                                    

。☬。☬。
SᴇᴏᴋJɪɴ
°°°

Después de la fiesta organizada por Jeol, hijo del senador Lee. Jackson y yo habíamos dormido menos de dos horas la mañana siguiente cuando nuestro padre nos levantó de la cama y nos ordenó que fuéramos a desayunar. Pero primero, quería unas palabras a solas conmigo. Eso nunca era algo bueno.

—¿Qué crees que quiera el viejo? —preguntó Jackson mientras nos dirigíamos hacia la oficina de nuestro padre.

—¿Quién sabe?

Toqué.

—Adelante —dijo papá después de hacernos esperar casi cinco minutos.

—Buena suerte con el viejo —dijo Jackson con una sonrisa torcida. Lo ignoré y me dirigí a la habitación. Odiaba tener que venir corriendo cada vez que me llamaba. Él sabía que era la única persona que podía darme órdenes, y maldita sea, lo disfrutaba. Se sentaba detrás de su escritorio con esa sonrisa narcisista que detestaba más que nada.

—Me llamaste, padre —dije, intentando sonar como si no me importara una mierda.

Su sonrisa se ensanchó.

—Buenas noticias. Te hemos encontrado un buen partido para el matrimonio, SeokJin.

Levanté una ceja. Sabía que él y La Organización de Gwangju habían estado discutiendo una posible unión durante meses, pero mi padre nunca había sido muy abierto con la información. Él jodidamente amaba tener ese poder sobre mí.

—¿De La Organización?

—Por supuesto que sí —respondió, tamborileando sus dedos contra el escritorio y observándome. Quería que le preguntara quién era, quería prolongar esto, quería verme retorcerme. Que se joda. Metí mis manos en mis bolsillos, encontrándome directamente con su mirada. Y su expresión se oscureció.

—Es la persona más hermosa que La Organización tiene para ofrecer. Un partido con una verdadera belleza impactante. Un ángel en la tierra, como dijo Suk. —Algo difícil de creer para mí. Me había follado a tantas mujeres hermosas, y solo la noche anterior me había follado a Ji Eun en todas las superficies de su habitación. ¿En serio pensaba que me asombraría porque me había encontrado un bonito partido? Si fuera por mí, no me casaría ahora ni pronto—. Espero que disfrutes rompiendo sus alas —agregó mi padre.

Esperé el "pero". Él se veía demasiado complacido consigo mismo, como si estuviera ocultando algo que sabía que odiaría. No dije nada.

—Tal vez has oído hablar de él. Es Park TaeHyung. El hijo del Consigliere, y cumplió quince años hace unos meses.

No fui lo suficientemente rápido como para ocultar mi sorpresa de sus palabras. ¿Él? ¿Quince? Maldita sea, ¿estaba bromeando?

—¿Él? ¿En serio, padre? ¿El 'bonito partido' no es una chica? ¿Quién puede ser mejor que ellas?

—Tiene la misma funcionalidad de una. Puede abrir las piernas y darte hijos. Eso es todo lo que importa.

Maldita sea, no me iban los chicos, el de gustos variados era Jackson. Yo no. ¿En qué mierda estaba pensando mi padre? Por supuesto, cabrearme era uno de sus hobbies. Pero no le daría el gusto. Buscaría a Jackson y llegaría a un acuerdo con él. Tal vez estaría feliz de tomar mi lugar en la cama...

권-ᴇ¹Where stories live. Discover now