El regreso de un heroe

Pedido (+18)

POV: TESSIA ERALITH

Salí del baño envuelto firmemente en mi toalla, el vapor de la ducha caliente que acababa de tomar salía cuando entré en la habitación que comparto con Art. Estaba acostado de lado, varios documentos esparcidos por nuestra cama compartida que trataban una variedad de cosas diferentes, desde números y posiciones de tropas hasta solicitudes de recursos. Levantó la vista de sus diversos documentos mientras me miraba a los ojos, dándome un saludo silencioso con una sonrisa encantadora.

Me senté frente al tocador, me quité la toalla que me envolvía la cabeza y me sequé el cabello con una toalla. Mirando a Arthur a través del espejo, me di cuenta de que mientras trataba de concentrarse en su trabajo, seguía lanzando miradas furtivas en mi dirección, admirándome mientras pensaba que yo no me daría cuenta. Sonreí para mis adentros por esto, pero no le dije nada.

Una vez que mi cabello estuvo seco, retiré la toalla que cubría mi cuerpo y saqué una camiseta y algo de ropa interior para ponerme. En este punto, Arthur se había olvidado por completo de su trabajo, mientras observaba todos mis movimientos mientras admiraba mi cuerpo. Llevaba una sonrisa estúpida mientras un fuerte sonrojo se formaba en su rostro.

Todavía medio desnuda en este punto, me reí y me acerqué a su lado de la cama y le di un beso profundo y amoroso. "Estás actuando como si fuera la primera vez que me ves desnuda", le digo en broma.

Él se pone nervioso y mira hacia otro lado avergonzado antes de responder: "¡Deja de burlarte de mí! No puedo evitarlo, eres demasiado hermosa".

Un ligero rubor se forma en mi rostro mientras lo miro a los ojos antes de darle otro beso. Mi corazón latía más rápido mientras miraba sus ojos suaves, hermosos y fascinantes. Sus labios eran como una droga con la que estaba completamente obsesionada. Uno del que no me cansaba.

Me deslicé hasta su regazo, pasando mis delicadas puntas de los dedos debajo de su barbilla y alineándolas con su mandíbula. Sonreí, antes de susurrarle al oído, "Bebé..."

Se derritió un poco por mi tono suave y sus músculos se debilitaron por segundos en mi agarre.

"¿Estás bien?", le dije mientras me levantaba de su regazo. Él no respondió, simplemente mirándome a los ojos soñadoramente.

"¿Estás bien?", repetí, pinchando a Art, cuya mente parecía estar en el espacio.

"¿Eh? Lo siento, Tess", negó con la cabeza antes de sonreír y darme toda su atención. Acaricié su mejilla sonrojada con mi mano.

Me reí suavemente antes de continuar. "Está bien, Art. Solo iba a decir que saldría a trabajar un rato. ¿Quieres que compre algo~?", le di unas palmaditas en la pierna, levantándome del sofá. Miró hacia el techo y colocó su mano en su mejilla, sintiendo la pérdida de mi toque. "Hmm, veamos...", se detuvo, pensando. "... ¡Oh!", sus ojos brillaron con un brillo travieso y una sonrisa apareció en su bonito rostro.

Se puso de pie y caminó hacia mí, colocando sus manos en mis caderas, su agarre amenazaba con acercarme a su cuerpo mientras se alzaba sobre mí. "Quiero que... consigas la cosa más sexy que puedas imaginar", susurró en voz baja en mi oído, rozando suavemente sus labios contra ellos. Su madera baja me produjo escalofríos en la espalda.

Se aleja de mi oído para estudiar mi reacción, y su sonrisa se convirtió en una amplia sonrisa al ver mi rostro completamente enrojecido.

Luego besó mi sien y levantó mi pequeña barbilla, besando mis labios apasionadamente. "¿Qué te pasa?", murmuré, pasando mis delgados dedos por su suave cabello. "Ahh~", dijo en voz baja mientras se separaba, su nariz a solo centímetros de la mía.