Los Juegos del Streamer -2- (fanfic)

CAPITULO 5

Lamentablemente, pero acorde a lo que había predicho, la segunda prueba del evento había sido cambiada en perjuicio de mi credibilidad frente al resto del grupo, aunque había una buena noticia detrás de este cambio de reglas.

Para esta segunda instancia nos separaríamos en ocho grupos de dos personas, lo que significaba que posiblemente solo la última pareja en cruzar la línea de meta sería la eliminada. La ventaja esta vez, es que cada uno elegía con quién participar del juego.

Yo sabía de antemano que posiblemente sería la última opción de cualquiera de los que se encontraban allí, y temía que los equipos (a diferencia de lo que había sucedido en mi visión) fueran demasiado fuertes debido a que solo los más preparados habían aceptado concursar esta vez.

Thegrefg y Ampeter no lo dudaron ni por un segundo en emparejarse, al igual que Axozer y Karchez. Arigameplays por su parte, se formó junto a Rivers dejando a Auron y Biyín como tercer pareja. Cristinini y Gemita claramente competirían en grupo. Y casi por descarte, Ibai acudió a Zorman para que fuera su compañero de equipo, luego de que Jagger y Elxocas confirmaran su unión.

—Bueno, al parecer tenías razón —me dijo Úrsula al verse obligada a juntarse conmigo—. Tenemos que estar unidos.

Solté una risa amarga mientras tomábamos nuestro lugar sobre la plataforma con el número ocho. Frente a nosotros, una pista de obstáculos bastante más simple que la que yo recordaba se extendía por más de trescientos metros, y junto a la plataforma sobre la cual esperábamos las instrucciones, una caja cerrada.

La pantalla en medio del predio se encendió, descubriendo nuevamente la imagen del enmascarado que procedería a explicar el segundo evento.

—Damos, y caballeras —dijo con el tono suave de siempre oculto tras una distorsión exagerada—. Espero que tengáis buenos recuerdos de vuestra infancia, porque hoy la recordaremos a través de este maravilloso juego —hizo una pausa—. Como habréis notado, les he dejado una caja a cada equipo, podéis abrirla en este momento.

Todos obedecimos rápidamente y sacamos de dentro uno de esos antifaces que tapan los ojos para dormir.

—Así es... hoy jugaremos a la gallina ciega. Uno de los dos miembros del equipo deberá atravesar esta pista de obstáculos hasta la meta mientras que el otro lo guía solo con sus palabras, con esto quiero decir que no está permitido bajo ninguna circunstancia el contacto físico.

—Yo lo hago —me dijo Úrsula con confianza—. Tú guíame.

Asentí con seguridad, pues sabía que el estado físico de mi compañera era inmejorable.

—Sin embargo, como ya les he permido elegir vuestras parejas, seré yo quien elija el rol que les tocará cumplir —Ni siquiera me atreví a mirar a Úrsula luego de escuchar aquella noticia—. La gallina ciega será el miembro con el calzado más grande —soltó acercándose levemente a la cámara—. Una vez listos, la alarma sonará para dar inicio a la carrera. Buena suerte.

Úrsula y yo nos miramos indignados, y comparamos rápidamente nuestros pies, comprobando lo que a primer vistazo era evidente.

—Tendré que cegarme yo —dije con tono amargo.

—Lo harás bien, tranquilo —contestó ella para darme ánimos.

Cuando ya tuve el antifaz puesto correctamente, me puse de pie donde la misma Úrsula me indicó, esperando a que el sonido de la alarma diera inicio al juego. Tomé aire y tragué saliva al sentir que las voces de los otros participantes comenzaban a callar, y justo en ese momento, la alarma sonó.