𝐄𝐍𝐂𝐇𝐀𝐍𝐓𝐄𝐃 || s.reid

✧ diecinueve; durante la oscuridad

Ya habían pasado siete días desde que Leigh había salido del hospital y se encontraba descansando en su departamento. Había sido complicado para ella el acceder a volver a aquel lugar, mas sabiendo que Aidan no fue capturado y ya conocía aquella dirección, por lo que Adam tuvo que buscar con algunos de sus contactos un lugar nuevo para que Leigh-Anne pudiera mudarse lo mas pronto posible.

Durante esos días, Ayla se había quedado a su lado para cuidarla y apoyarla en cualquier cosa que llegara a necesitar, ya que si bien Leigh se la pasaba repitiendo que estaba bien y que no necesitaba de nadie, su hermana mayor se negaba a creer eso y dejar sola a su pequeña hermana.

Ayla quería proteger a su hermana, hacerla sentir segura y cuidada. Pero no sabía cómo hacerlo. ¿Cómo podía ayudar a Leigh-Anne a recuperarse y volver a ser la persona alegre y segura de sí misma que solía ser?

Se preguntaba si debía hablar con ella directamente, pero temía que Leigh-Anne pudiera sentirse invadida. Además, Ayla no quería añadir más presión a la vida de su hermana. Sabía que Leigh-Anne estaba lidiando con muchos problemas emocionales, y no quería añadir más carga a sus hombros.

Finalmente, decidió que lo mejor sería simplemente estar allí para ella, siempre que lo necesitara. Ayla estaría ahí para escucharla y apoyarla, sin juzgarla ni presionarla.

También decidió que buscaría recursos para ayudar a su hermana. Podía investigar sobre terapeutas o grupos de apoyo, o buscar actividades que pudieran ayudar a Leigh-Anne a desestresarse y recuperarse.

Ayla sabía que no podía resolver todos los problemas de su hermana, pero quería hacer lo que pudiera para ayudarla. Quería protegerla y hacerla sentir segura en un mundo que parecía estar derrumbándose a su alrededor. Sabía que no podía resolver todos los problemas de su hermana de la noche a la mañana, pero estaba dispuesta a hacer lo que fuera necesario para ayudarla a recuperarse.

Los días tampoco habían sido sencillos para Leigh, quien pese a repetir que estaba bien, aún solía tener pesadillas en donde Aidan volvía para hacerle daño o simplemente en donde revivía las torturas que había recibido en su tiempo capturada.