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𝐁𝐀𝐂𝐊 𝐓𝐎 𝐘𝐎𝐔 capítulo 3
—¿A quién dices que puedes ganar? —preguntó Ace mientras saltaba hacia el Merry conmigo en sus hombros.
El chico con pecas me soltó y me senté en la barandilla mientras él se quedaba de pie encima de esta mirándome con media sonrisa. Joder como había echado de menos esa puta sonrisa de canalla que tenía.
—Ace, esta es mi tripulación —dijo Luffy que estaba sentado en el suelo mirando hacia nosotros dos.
—Gracias por cuidar de mi hermano —inclinó ligeramente la cabeza y sonrió con ganas hacia todos—. Sé que a veces puede ser difícil de llevar, pero estoy contento de que haya encontrado amigos.
Crucé los brazos y las piernas mientras veía el numerito que hacía Ace con mis compañeros. Le encantaba hacerse el hermano mayor protector y por las caras de la tripulación, ninguno podía realmente creerse lo que estaba viendo. Estoy segura de que había maravillado a todos mis compañeros con esas palabras.
—Cuando Luffy dijo que tenía un hermano, pensé que sería tan imprudente como él —comentó Usopp al borde de la emoción.
—Este hombre tan sensato, no puede ser tu hermano Luffy, estás mintiendo —dijo Nami llevando sus manos al pecho.
Una carcajada salió de mi y llamó la atención de todos los que estaban ahí, que me miraron fijamente.
—Si decís que Ace es sensato, es porque os está engañando —pisé la cubierta del barco y apoyé mi espalda justo donde había estado sentada—. Yo diría que es el más temeroso e irracional de los tres, el peor sin dudas —mordí mi labio inferior y le dediqué una sonrisa pícara.
—Lizzie, tú si que eres la peor —protestó Luffy mientras se levantaba del suelo.
—Vuelve a decirme eso y te enteras, mocoso —gruñí mientras le enseñaba mi puño, a modo amenazante.
—No habéis cambiado lo más mínimo —dijo Ace con una gran sonrisa—. ¿Dejaréis de pelearos en algún momento?
—Pero no lo entiendo... Liz-schwann, ¿también conoces a Ace? —preguntó el cocinero soltando el humo de su cigarro.
—¿Nunca os lo dijimos? —El capitán se quedó mirando hacia la tripulación y ladeó ligeramente la cabeza, confundido—. Liz y yo somos hermanos.
—¡¿QUÉEEEEEEEEEEEE?!
Mis amigos paseaban su mirada entre nosotros tres, todos menos Zoro, que se quedó mirando hacia mi con la ceja alzada, asintiendo con su cabeza. Por fin le estaba poniendo cara al famoso Ace, y sin duda estaba disfrutando de ese momento. Estoy segura que si me despistaba, aprovecharía el momento para sonsacarle a Ace todo sobre mis momentos embarazosos.
