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𝐃𝐈𝐀𝐑𝐈𝐎 𝐃𝐄 𝐀𝐂𝐄 parte 2
Hoy es un día complicado y no sabes lo que me jode no poder estar contigo.
Me siento un completo idiota, porque es la primera vez que pasamos este día separados, y estoy seguro de que Luffy no tiene el tacto suficiente como para ayudarte o consolarte si lo necesitas... Así que sólo me queda imaginar que has bajado al pueblo y que Makino esté contigo ahora mismo. Aunque con el paso del tiempo, has conseguido que este día esté lleno de alegría y no tristeza.
Seguro que ya tienes las flores listas para llevárselas por su cumpleaños. Es algo así como tu tradición. Llevas haciéndolo desde que pasó aquello y yo te he acompañado todos estos años. Así que, en cuanto acabe de escribir esto, intentaré conseguir alguna flor y la tiraré al mar en su memoria. Por el hermano que ambos perdimos y que todavía recordamos.
Hay días en los que me despierto y siento que está a mi lado, ¿suena raro?
Aquel día le dije a Luffy que nunca me iba a morir y los tres hicimos el pacto de vivir nuestra vida al máximo, y todo por Sabo. Y es que siempre lo vamos a llevar en nuestra memoria, porque nadie muere si es recordado y nosotros lo adorábamos.
En días como hoy me gustaría poder hablar con él, porque siempre fue el que daba los mejores consejos y sé que tendría las palabras adecuadas para mí.
Y es que si hay algo que quiero hacer, es conocer el sentido de mi vida. Saber que viví por algo y que removí la vida de las personas que tenía a mi alrededor.
Ya que estoy siendo sentimental, debo decirte que me gustaría poder demostrarle a la gente que no soy lo que ellos consideran. Se piensan que soy un demonio por ser el hijo de Roger, el criminal más grande de todos los tiempos y no puedo dejar de pensar que se equivocan. Y eso es por tu culpa.
Llegaste a ver la parte buena que había en mí y me hiciste creer que merecía vivir, incluso cuando yo pensaba que un demonio debía morir. Por eso siempre fui así de imprudente, estaba seguro que nadie me lloraría el día de mi muerte, pero luego me di cuenta de que no podía dejar solos en el mundo a las dos personas que más quiero.
Me hiciste creer que podía merecer amor y eso me hizo odiarte muchas veces. Nunca entendí que veían tus ojos cuando me miraban, pero todo lo que sentías lo transmitías con esos ojos verdes. Joder.
Te dije que no sabía el momento en el que me enamoré de ti, pero pensándolo mucho, creo que ya sé cual fue ese instante en el que todo cambió, aunque esa es una historia para otro momento. Quizás si soy lo suficientemente valiente sea capaz de decírtelo a la cara y si no me animo, posiblemente esté entre estas páginas que te escribo.
Me doy cuenta de que contigo, la vida está llena de quizás y necesito ser capaz de cambiar eso, porque no quiero que queden deudas pendientes entre nosotros y quiero ser capaz de decirte todo lo que siento por ti.
Te pido perdón de antemano, si me cuesta un poco, pero sabes que los sentimientos a veces se me hacen grandes y más todos los que tienen que ver contigo.
Y a veces me vuelvo gilipollas.
Pero te diré que te quiero y que estoy enamorado de ti, eso lo tengo más que claro.
