Un viaje en el tiempo © MDZS

05 - ¡Detengan a la bestia!

No sabía cómo apareció ahí. Según él, estaba durmiendo en la cabaña que le habían dado.

¡Pero también le habían dado sonrisa del emperador, así que no había de que preocuparse!

Al menos ya tenía en claro que habían dos cosas por hacer.

Dos misiones:

1. Encontrar una solución para mejorar el futuro de todos después de la guerra.

2. Encontrar la matriz para volver a su tiempo.

¡Pero agreguemos a esa lista una tercera idea!

3. Encontrarle un amor a Jiang Wanyin.

Y Lan Xichen se ofrece como tributo.

— No esperaba esto. — espectó Wei Wuxian. — Bueno, sí pero no. — vaciló.

No sabía que decir exactamente. Hace unos minutos acababa de ser despertado por Zewu-Jun, por no decir raptado. Lan Xichen solo empezó a darle charlas de las cuales solo escucho tres palabras:

Quiero a Wanyin.

Wei Wuxian solo recordaba que en su línea temporal, Lan Xichen y Jiang Wanyin no eran mas que conocidos forzados por su unión con Lan Zhan. Y si se reunían solo hablaban de arreglos para las sectas, no habían conversaciones fuera de eso. Al menos eso es lo que recuerda y lo que le decía su lindo esposo.

Y aunque le pareciera raro las múltiples visitas tanto de Jiang Wanyin a Gusu o Lan Xichen a Yunmeng, no diría nada. Después de todo creía que era cosas de líderes.

— Entonces, ¿Acepta?

— ¡Claro que sí!

— Es un gusto hacer tratos contigo.

— Lo mismo digo, cuñado.

A Lan Xichen casi se le sale el corazón por ser llamado así, solo mostró una gran sonrisa. ¡Aquel Wei Wuxian ya lo estaba aceptando!

Por otro lado, el Wei Wuxian del futuro casi se corta la lengua por haber dicho eso más por lo que veía, no parecía afectarle a ese Zewu-Jun. Aún recordaba lo molesto que se había puesto La Xichen por no notar el amor que le tenía Lan Zhan.

Todo estaba bien.

¡Todo estaba mal!

— ¿Wei-xiong? — un confundido Nie Huaisang entraba al comedor. — ¿Ocurrió algo? — esta vez se dirigió a Jiang Cheng. — Se ve...— tragó en seco. — enojado.

— Es porque lo está.

¡¿Y cómo no lo iba a estar?!

— Va a romper los palillos. — comentó Nie Huaisang mientras se sentada al lado de Jiang Cheng. — ...o el plato... — agarró con temor de sus utensilios. — ...o la mesa.

De hecho, no solo Nie Huaisang y Jiang Cheng habían notado aquel cambio de humor tan abrupto. Todos en aquel comedor presenciaron aquel cambio de humor, todo porque el aroma dulce que poseía el omega cambio a uno amargo que expresaba furia. Y daba miedo, mucho miedo.

Demasiado miedo.

— No sean cobardes, solo siéntense ni que los vaya a morder. — expresó Jiang Cheng al ver un grupo de Lan's arrinconarse con sus platos a una esquina de la gran mesa. —... o eso creo.

Incluso para él, aquel aroma le daba incomodidad.

Pero nadie sabía porque estaba así. Wei Ying solo estaba apretando fuertemente sus palillos mientras metía con brusquedad las verduras a su boca, su mirada concentrada en su plato mientras murmuraba cosas en voz baja.