02 - ¡Tranquilos todos!

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📢 : Así diferenciaremos a los personajes.

Wei Yingpasado.
Wei Wuxianfuturo.
Jian Cheng pasado.
Jiang Wanyinfuturo.

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Se miraron entre sí y miraron la escena frente suyo repetidas veces, Wei Wuxian se tallo los ojos y Jiang Wanyin se daba pequeñas cachetadas tratando de creer que solo estaba alucinando.

Esto no era verdad, era su imaginación. ¡Producto del estrés!

— Oye, ¿qué estás viendo?  — un mini Wei Ying estaba observando enojado al Jin.

Y Jin Zixuan creía que los hermanos del clan Jiang ya le habían lanzado alguna especie de maldición para que no se acercara a su Jiang Yanli.

— ¡T-tu, porque... El-ellos...

¿Cómo era posible?

— ¿Y a este qué le pasa? — por otro lado, un mini Jiang Cheng lo miraba como si fuera un bicho raro. — Tsk, pobre de mi Jiejie. Le tocan los más raros...

Y miro hacia donde veía el Jin.

Oh...

— ¿Jiang Cheng?, ¿Qué están viendo...

— Wei-xiong, Jiang-xiong. — un mini Nie Huaisang llegaba feliz a donde se encontraban los demás reunidos. — Oh, joven maestro Jin. ¿Qué es lo que...¡Ahhh!

Mierda.

— ¡Ahhh!

Todos gritaban pasándose la regla número 6: No hacer ruido, por la raja.

— ¡¿Qué mierda, qué mierda?!

Salieron corriendo.

— ¡Esto no me puede estar pasando! — gritaba Wei Wuxian. — ¡Se que me salve de la muerte una vez, no me pueden llevar ahora!

Jiang Wanyin se detuvo en seco jalando a Wei Wuxian del brazo evitando que siga corriendo.

— ¡Haber idiota, no estás muerto! — el Jiang sangoloteaba a su hermano. — ¡No juegues con eso! —se detuvo. — ¡Estamos... Estamos...

Devolvieron su vista a los 4 jóvenes de gritaban espantados.

—... en un viaje por el tiempo!

Sus cuerpos producieron escalofríos.

Y recordaron.

— ¡Nos vieron Jiang Cheng, nos vieron!

— ¡Todo este tiempo tuve mi trenza del moño mal hecha!

— "..."

— ¿Qué?

— Estamos atrapados en el tiempo.

— ¿Y, qué hago?

Estaban perdidos.

Wei Wuxian empezó a entrar en pánico, en estos momentos era donde su esposo aparecía y le decía que todo estaba bien.

¡No había un Lan Zhan!

Bueno.

Mejor dicho, ¡no había un esposo, no había Hanguang-Jun!

— Inhala, exhala. — se repetía. — Inhala, exhala.

— Qué exagerado. Y pensar que este era el Wei Wuxian que muchos temían.

Un viaje en el tiempo © MDZSTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang