Summer // Rafe Cameron

17. Blood Water - Grandson

Apóyenme en tik tok o tomo de rehén los próximos capítulos y no los subo we. 

Poco a poco, el abuso que Emily sufría en el colegio fue escalando. Jasmine se había enterado de que JJ había estado en la isla, por una foto que la rubia había subido a Instagram, el hecho de que su novio no la hubiese ido a ver, había ocasionado mucha furia en la morocha. Emily se había defendido un par de veces, pero últimamente se dedicaba a básicamente huir. 

Había comenzado a hacer al menos tres copias de sus reportes del colegio, por si los mojaban, los rompían o le quitaban la mochila. Todo era impermeable, comenzó a meter sus libros en bolsas Ziploc. Le cortaron un mechón de cabello y desde entonces suele llevarlo recogido en un rodete, así será mas dificil cortarlo, o alcanzarlo para jalarla de el. Todo su cuerpo está en modo supervivencia. Y tiene demasiados moretones, la semana pasada le dolía incluso respirar.

Últimamente, las palabras "hazlo parecer un accidente" se repiten mucho cerca de Emily. Jasmine ha estado pasando el rato con Jeff nuevamente y ambos la miran y se ríen y la rubia no puede dejar de perseguirse. La van a matar y harán que parezca un accidente. 

Tomó sus cosas y pidió permiso para ir al baño como de costumbre, subiría hasta el tercer piso del colegio, luego bajaría por las escaleras de incendios y caminaría en dirección contraria a su casa. Así es como hacia las cosas últimamente. Siempre elegía una ruta distinta para ir a casa, de esa forma no podían esperarla. A veces ni siquiera iba a casa, se turnaba para ir a lo de Barry o John B. Los kooks la seguían hasta el borde del Corte, pero nunca entraban más allá del límite. Ese día cuando salió del aula, Jeff y Sam la estaban esperando, comenzaron a caminar lentamente en su dirección y Emily apresuró el paso. 

—No corras —Le ordenó Jeff, en un tono somnoliento y tranquilo. 

—Aunque si corres solo será más divertido para nosotros —Agregó Sam. 

Emily no les hizo caso, apresuró el paso aún más y los chicos también. Antes de que la alcanzaran, la rubia abrió una puerta y entró en el despacho del consejero escolar. 

—Señorita Ross —El hombre la miró de arriba a bajo—. ¿Estás bien? 

—No —Negó ella, mientras temblaba—. Me están siguiendo, quieren lastimarme. 

—¿Quién quiere lastimarte, Emily? —El hombre se paró de su silla y rodeó el escritorio para abrir la puerta del despacho y observar el pasillo vacío, volvió a entrar en la oficina y observó a Emily—. ¿Que esta pasando? 

—Sam Carlson y Jeffrey North me estaban siguiendo para herirme —Explicó la rubia—. Estaban justo ahí afuera ¿No me cree? 

—Toma un poco de agua, tranquilízate —El hombre le tendió un vaso con agua—. Emily, el pasillo estaba vacío. 

—Probablemente están escondidos, si usted va a sus salones se dará cuenta de que no están allí —Sollozó la rubia—. Por favor, ayúdeme. Jeff, Sam y Kelce me violaron el año pasado. 

A veces, las cosas que menos queremos contar son las que mas necesitan ser contadas. Se amontonan en la garganta y terminan saliendo todas juntas, desordenadas. A veces, las personas correctas nos escuchan. A veces, nuestras palabras son ignoradas. A veces, personas que no saben escuchar, están ocupando lugares para personas que si deberían saber escuchar y eso... eso causa desastres. 

Emily comenzó a llorar desconsoladamente, porque las palabras habían salido de su boca y ella ni siquiera había querido que eso ocurriese. El hombre le acercó una caja con pañuelos, Emily se sintió desprotegida. No era lo mismo llorar con ese hombre, que llorar en presencia de Barry o John B. Barry o John B sabían escuchar. Ese hombre estaba mirando el reloj, preguntándose cuanto faltaba para la hora del almuerzo.