027.

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Quedé helada con lo que me había dicho, no sabía que hacer ni que decir, simplemente no me lo esperaba de esta manera y mucho menos este día.

—Me hubieras dicho, Joshua.

—No podía Amanda. Cabrona ya, necesito sentirte, te extrañe con cojone'... Fueron tres años.

—Cabron tú.

Dio un paso y ya estaba al frente de mi con la cabeza un poco hacia abajo mirándome, soy enana, mido 5'1 y el 6'2, hay diferencias. Se quedo mirándome fijamente, ese contacto visual me causaba escalofríos pero me gustaba, su mano fue hacia mi cuello apretándolo levemente.

—Ahora nada ni nadie nos va a separar Ortiz, te lo juro. —sonrió.

—Espero que sea así, Medina.

Unos pasitos se escuchaban por el pasillo de arriba corriendo hacia mi cuarto, era Sebas huyendo de su tía Miko. Al entrar se quedó tiesa, analizando lo que estaba viendo.

—Ay cabron... Ay cabron. —repitió sin creerlo, reímos— Yo vengo ahorita. —huyó.

Reí un poco y Sebastian se puso entre medio de los dos y miró a Omar, le sonrió y alzó sus brazos para que lo cargara.

—Hola papi. —Omar se sorprendió al escuchar al nene.

—Le hablé de ti y le enseñaba fotos tuyas, tenia que saber quien es su papá.

—Hola mi rey. —su alegría era otra cosa, se sentó con Sebas en la orilla de la cama y empezaron a jugar.

Mire aquella escena emotiva y no pude evitar sonreír tiernamente, mi familia.

Omar Courtz

Estuve más de dos horas jugando con mi hijo y esas horas no las cambio por nada, después de tanto tiempo pude volver a estar con la mujer mía y con mi hijo. Le debía más explicaciones a Amanda pero llegará el momento de hablar de ello, ahora mismo está limpiando el patio con los muchachos y dudo que quiera hablar ahora.

Fui al closet a ver si aún estaba mi ropa y efectivamente aún seguía ahí, todo estaba como la última vez, todo limpio y ordenado, nuestras fotos en marco, mis gorras en una fila. No había cambiado nada.

—¿Que haces? —sobresalté al escuchar a Amanda.

—Viendo mi ropa. —dije obvio.

—Si se, bobo.

Tome unas cartas que estaban encima de la caja de un perfume que Amanda me había regalado, la mire de reojo y sus nervios se empezaron a notar, mire por encima las cartas y sonreí. Una me llamo la atención así que la abrí y empecé a leerla.

"Joshua, hoy se cumple un año desde tu partida y siento como si fuera sido ayer. No ha sido fácil, el nene, que por cierto es igual a ti, se me ha complicado la cosa pero es algo que puedo sobrellevar. Quisiera que todo esto fuera un sueño y pode despertar y que estuvieras en la cama durmiendo pero no, es la realidad."

Fue lo que pude leer ya que me quito el bonche' de cartas que tenía en la mano, me miró y negó.

—Hey, la estaba leyendo.

—I don't give a fuck, no las vas a leer. —musitó seria.

Extrañaba verla así.

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Friends |Omar CourtzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora