"Mistake" [O'Hara-Parker] Omegaverse A'u ||Hiatus||

|| Capítulo 3 ||

"Todos los Spiderman's son alfas."

Aquella frase quedó grabada en su cabeza en el mismo momento en que Miguel la mencionó, como un recordatorio constante de su baja posición dentro de aquel sistema regido por los mismos. Y su sonrisa se borró.

Si todas aquellas versiones de Spiderman eran alfas, estaba en peligro, jamás había sido marcado, y ello le asustaba mucho, como si de un pequeño conejo entre lobos de tratase, le miraban con desdén, o al menos así lo percibía. Una mujer en particular le miraba con curiosidad, llevaba lentes y el pelo afro la hizo destacar entre los demás arácnidos, además claro, de su vientre abultado.

Se dirigían al lugar de trabajo de Miguel, aquel edificio era simplemente magnífico y pensar que aquello lo había construido él solo.

-¿Es el nuevo?- mencionó una voz en cuanto entraron al despacho de O'hara, el lugar era oscuro, completamente podría decirse.
-Asi es, Lyla, te presento al de la 701.

Peter esperaba ver a alguien salir de la oscuridad, una mujer, por la voz que había escuchado, pero en lugar de ello, el lugar resplandeció en luz naranja y una pequeña chispa se materializó frente a él, dando lugar a una pequeña mujer que usaba unos bonitos lentes en forma de corazón.

-¿Es un holograma?- pregunta Peter que aún que obvio le causa intriga
-Es una inteligencia artificial, algo así como mi asistencia dentro de esto del multiverso, su nombre es Lyla.
-Hola, Lyla.- Peter estira una mano, para luego darse cuenta de que la pequeña mujer es del tamaño de su mano, entonces extiende un dedo en un ademán de saludo formal.
-Peter B. Parker, tierra 701, - la pequeña ha comenzado a analizar al pobre hombre que se quedó con la mano estirada -Oh, un Spider Man Omega, que sorpresa, generalmente son alfas. -Lyla lo analiza de todos los ángulos posibles, la curiosidad de un omega macho la mata- ¿Estas en cinta o solo es algo de peso extra? Nuestros Spiderman's están en buena forma, supongo eres la excepción.

Peter se encoge en un gesto de vergüenza.

-No te preocupes por ella, usualmente no es tan impertinente, ¿Verdad, Lyla?- Miguel sigue junto a ellos, yace cruzado de brazos, esperando que su asistente de disculpe y retire por el momento, entonces Lyla lo hace.

Por el momento no ha sido para nada incómodo hablar con Miguel de sus castas, creía que le miraría mal y que lo echaría del lugar, pero por el contrario se interesó mucho más en el, el de la 1016, que era idéntico a él, también era un alfa, Hobbie, Pavitr , Bite, o Sun , Jessica que era la única omega entre ellos,-y que estaba esperando un cachorro -sabía a qué se refería Peter al tener ese temor en su interior, pero Miguel creía que por ser mujer era justificable. Aún no entendía del todo como funcionaban los omega masculinos.

Sin embargo, no tuvo ganas de hecharle, por el contrario, quería que se quedase y no solo en la base, quería que se quedará con él.
Como una especie de deseó egoísta que crecía en su pecho, queria que Peter se mantuviera a su lado, un sentimiento que jamás había sentido, se encendió cuál mecha en el y aquel sentimiento era cálido, tanto como la mano que le ofreció luego de escucharlo.

Miguel sonrió por primera vez en mucho tiempo al mirar como ese hombre trataba de entender lo que había pasado allí, y cuando se dio cuenta de ello, de inmediato se detuvo. Ahora entendía porque jamás había sentido que tenía un destinado, creía que aquello no era más que un cuento primitivo, lo creyó hasta esa mañana cuando encontró a Peter sobre aquel techo del edificio.

Porque para Miguel ahora no existía otra prioridad que no fuera él.

Su visita fue fugaz, rápida para su gusto.

Ese lugar era un refugio para muchos, dónde podían ser ellos sin poner en riesgo su identidad o a sus seres queridos,- para los que su evento canónico había llegado no podían decir lo mismo- llevar la máscara era un arduo trabajo de todos los días.

Peter se despidió con una sonrisa, llevando ya en la muñeca un reloj como el de Miguel o cualquiera de sus otras versiones.

Miguel solo pudo atinar a pensar en lo que había pasado, no dejaba de darle vueltas al asunto y a esa punzada en el pecho.

-¿Qué buscas exactamente, Miguel?- aquella voz no era otra si no la de Jessica de la 616, la mujer estaba esperando un cachorro y muy a su pesar era una de las pocas versiones de spider man en la pondría su confianza entera.
-No hay nada de mi interés, Drew. -comento cruzándose de brazos, la mujer lo mira con un ligero gesto de desaprobación.
-Solo piensa en que también tiene sentimientos, todos los tenemos sin importar la casta, O'hara.

Jessica se retira no sin antes entregarle un par de expedientes en los que había estado trabajando.

O'hara piensa brevemente en lo que la mujer le ha dicho incluso estando en casa.

¿A qué se habrá referido exactamente?.
No planeaba herir a nadie ni mucho menos.

Pero las mujeres siempre tendrán ese sexto sentido.

Y hay que confiar en ellas.