Charm | Pablo Gavi

32: Quiero ser esa persona

Narra Pablo

Después de que me dijera esas palabras se levantó sin dejarme responder y sin palabras, se metió en la ducha.

Me mataba no saber como actuar, no saber que estaba pasando de verdad entre ella y Javier. No saber que le pasaba a ella por la cabeza ni que le hacía seguir teniendo al lado a una persona así.

Y estaba realmente asombrado de que ella le permitiese ese tipo de comportamientos, sentía que Alicia estaba completamente anulada.

Al poco salió con la ropa de Balde ya puesta y con el pelo medio seco. Sabía que había llorado pero tenía una expresión más relajada.

El móvil de Alicia enchufado en la mesilla comienza a vibrar, ella se acerca y cuando lee el identificador se queda pálida.

-Joder es él - maldice en alto- me está preguntando que qué hago en esta urbanización y no para de llamarme.

- Ah que tiene tu ubicación también - digo flipando. Ella me ignora, escribe en su teléfono y sin mirarme me contesta.

- La tiene por mi trabajo, se preocupa de que llegue bien a casa - lo dice como para auto convencerse , me acerco a ella lentamente, no me mira a la cara por lo que delicadamente levanto su barbilla y consigo que aquellos dos faros azules me prestaran atención.

- ¿Y por qué la esta usando ahora para saber dónde estás? - le pregunto en un tono de voz dulce, no quería que se sintiese ni juzgada ni atacada.

- Se habrá preocupado - lo dice de tal forma que aunque intente aguantar las formas acabo alterándome.
- ¿De que se preocupa? ¿Que no te pase nada después de dejarte como un perro tirada en la calle? - le pregunto ya cabreado, como podía estar tan ciega.

Se va de la habitación dejándome con la palabra en la boca de nuevo, bajo detrás de ella. Los chicos estaban en el salón de Balde jugando al uno.

Justo suena el timbre. Alicia se gira al final de las escaleras para observar mi reacción, a la vez puedo ver su expresión, de como si hubiera visto un fantasma.

- Quien coño será- dice Balde. No pierdo el tiempo, bajo las escaleras de dos en dos pasando por el lado de ella sin importarme sus palabras de que no abriese.
- Ya abro yo - yo sabía perfectamente quien era. Alicia se queda de pie sin hacer nada.

- Hombre- dice Balde sarcástico una vez que abro la puerta, se acerca a mi lado.- Veo que le tienes un chip como un perro también. - suelto una gran carcajada.

Javi respiraba fuerte, estaba despeinado, parecía un puto psicópata. Quería darle una paliza ahí mismo por haberla echado de su casa y dejarla a su suerte, pero sabía que eso a Alicia le afectaría.

- Donde esta mi novia- miro por encima del hombro detrás mía y puedo ver como Alicia se hace pequeña ya sentada en el sofa, Daniel me observa preocupado y también se pone de pie.

- Está durmiendo- miento sin más.- ¿En algún lugar tenía que dormir que no fuese la calle no? - iba a cerrar la puerta pero él me lo impide.
- Pues la despierto, viene conmigo, no se va a quedar aquí - intenta hacerse paso pero mi mano en su pecho le hace retroceder.

Era más alto que yo pero me daba igual, Balde también actúa de barrera.
- Primero la echas y luego pretendes venir a llevártela, sin preguntarle a ella en ninguna de las dos veces sin su opinión- dice Balde.

Javi estira la cabeza por encima nuestra, parece que hace contacto visual con ella ya que nos empuja a Balde y a mi entrando en casa, pero Daniel estaba de pie enfrente del sofá donde estaba Alicia.