This is my home

Capítulo 9 - No hablo con traidores

El oficial O'Conner apenas entraba a las oficinas de su trabajo, mientras toda la gente que estaba por ahí, es decir los policías, lo miraban al ver como después de lo de anoche se había decidido presentar, pero a este ni siquiera le importo que lo mirarán o que susurran a sus espaldas y fue directo a la oficina de su jefe.

—Mas vale que tengas una buena explicación— le regaño su jefe. —Desobedeciste una órden directa— hizo una pequeña pausa y miro al rubio. —¿Y la mercancía?

—A salvo.

—¿A salvo?

—A ver, podemos usar la mercancía para desfilar frente a la prensa y eliminar varios kilos de las calles, pero Braga traerá más en una semana— explico el rubio. —Y en otras dos, hay que usar está mercancía atraer a Braga y decapitar un cartel multimillonario.

—¿Y tienes idea de cómo hacer eso?— cuestionó su jefe.

—Con un encuentro directo con Braga.

—No se presentará— hablo Stacyak que llevaba rato sin hablar y solo escuchando la conversación de O'Conner y su jefe.

—No tiene opción, irá.

Su jefe se levantó de su asiento y comenzó a caminar por la oficina meditando las opciones que tenía.

—¿Tienes un plan?

—Hay un precio— su jefe presto aún más atención a sus palabras. —Si atrapó a Braga dejan ir a los dos Toretto y a su amigo Jackson.

Stacyak negó con la cabeza sutilmente para darle a entender a Brian que probablemente su jefe no lo aceptaría y luego lo miro en su dirección.

—Ya veremos, no me decepciones O'Conner— hablo su jefe aún dudando de si decisión. —No me decepciones otra vez.

Brian asintió en respuesta y se retiró del lugar y así como todos lo miraron en cuanto entró hicieron lo mismo en cuanto salió.

[....]

El teléfono de Gisele sonaba por lo que lo tomo y contesto la llamada. —¿Si?

—Habla Dom.

—Estaba pensando en ti, cuando te di mi número pensé que llamarías, pero en estas circunstancias jamás.

—¿Qué circunstancias? ¿Qué todavía estoy vivo?— cuestionó el Toretto, mientras su hermana y nuevo amigo, Mack, discutían y el rubio arreglaba un auto.

—Solo son negocios no es personal— aclaró la chica.

—Yo también tengo negocios que hacer— hizo una pequeña pausa. —Con Campos.

Los tres chicos que estaban muy concentrados en lo suyo, discutiendo y otro viendo un auto, miraron a Dom en cuanto oyeron que dijo Campos, sabían el plan, pero aún así les llamo la atención. Por otro lado Gisele en cuanto oyó el nombre de Campos fue a buscarlo y le entrego el teléfono.

—Son ellos— le dijo Gisele a Campos a lo que acepto el teléfono y la chica se sentó en uno de los sillones que había por ahí para que él pudiera hablar con Toretto.

—¿Aja?— respondió Campos esperando que Dom le dijera lo que quería.

—Así es como Braga inspira lealtad, matando a sus conductores.

—Siempre habrá más conductores, es lo más práctico.

—Quiero negociar.

—Braga no negocia— le respondió Campos.