Capítulo 19

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La llegada de Narkissa no se hizo esperar mucho, a finales de esa misma semana la mujer estaba llamando a la puerta de la casa de la pareja. Hunter le dio una habitación a pesar de que se sintiera incómodo teniéndola en casa, pero la prefería en su casa que en la de Carter. Narkissa quedó fascinada con Elliot, sobre todo porque a pesar de estar de pocas semanas, el hechizo ya mostraba la actividad del feto dentro del vampiro. Con la confirmación por parte de la vampira, ambos pudieron relajarse del todo, aunque esa noticia vino con una condición pero que la pareja negó con rotundidad.

- En serio, debéis ir a casa.- Dijo Narkissa mientras tiraba a la chica a los pies de Elliot para que se alimentara de ella. Hunter resopló hastiado mientras bebía de su bolsa.- La magia de nuestra casa facilitara el embarazo de Elliot.- Dijo furiosa mientras bebía con desagrado la bolsa que le había dado Hunter.

- Kissa no insistas más, no volveremos a esa casa del demonio.- Dijo Hunter harto de esa situación.- Como mucho iremos el último mes para que le ayudes con el parto.- Dijo totalmente seguro, viendo como Elliot asintió de acuerdo con lo dicho por su pareja. La vampira resopló furiosa, nadie le llevaba la contraria de forma tan intensa como su hermano pequeño.

- Condenaras a Elliot a un embarazo doloroso.- Dijo con un tono serio que consiguió que Hunter se tensara mirándola.- ¿Y qué vas a hacer para alimentarlo? ¿Volverás a cazar tú para él?- Preguntó con inri la mujer, Hunter hizo una mueca incómoda viendo como Elliot dejaba seca a la mujer.

- Tenemos a Walter.- Dijo sin más ganándose una risa de Narkissa, está cruzó sus piernas mientras miraba fijamente a su hermano.

- Misha, Walter es una rata de cloaca, que a la que pueda os dará la espalda y os venderá al mejor postor.- Dijo tan segura que Hunter supo que no mentía. Él también pensaba lo mismo de Carter, pero mientras pudieran aprovecharse de él, no desaprovecharían esa oportunidad.

- Vaya, qué palabras más dulces me dedicas querida.- Dijo Walter entrando a la casa, su mirada fue a Elliot que estaba dejando el cadáver a un lado para poder incluirse en la conversación sin tener el cuerpo por medio.- Veo que no ha disminuido su hambre.- Comentó antes de sentarse al lado de Hunter, este se separó un poco antes de resoplar. Le incomodaba mucho la presencia del vampiro tan cerca.

- Las que te mereces.- Dijo con una sonrisa amable la mujer tirando la bolsa de sangre encima de la mesa. Elliot pasó por delante de Walter y se dejó caer en el regazo del castaño para que Carter no pudiera hacerle nada a su pareja.- Ni lo hará.- Dijo mirando a Hunter, este rodó sus ojos abrazando la cintura con fuerza, él más joven acarició la cabeza de este para calmarlo.

- ¿Y a qué se debe?- Preguntó curioso Walter, Kissa miró a Hunter y este negó con una mirada dura, esta resopló cruzando sus brazos enfadada, quería presumir su gran obra.

- No te importa.- Dijo Hunter de mala manera.- ¿Cariño, no debes ir con Darcan?- El rubio lo miró con el ceño fruncido antes de mirar a Walter que sonreía divertido. Volvió a mirar dispuesto a negar, pero Hunter lo miró de manera suplicante. Se acercó a él y dejó un beso en su mejilla antes de acercarse a la oreja de este.- Después hablamos.- Susurró separándose y mirándolo serio. Elliot resopló antes de agarrar la barbilla de Hunter y besarlo, dejándole claro al otro vampiro que el castaño era únicamente suyo.

Se separó de Hunter con una sonrisa y se levantó pisando, "accidentalmente", los pies de Walter. Salió de la casa con una sonrisa enorme al escuchar las quejas de este, al salir no tardó mucho en localizar al lobo, así que apareció a su lado asustando un poco.

- Joder Elliot.- Dijo en un susurro mientras acababa de llenar los comederos de las gallinas.- No hagas eso, todos estamos nerviosos por la presencia de la nueva vampira.- Elliot se rio antes de negar con suavidad, apoyándose en la cerca.- ¿Por qué motivo ha venido la hermana de tu novio?- Elliot sonrió más antes de morder su labio irradiando felicidad.

- La necesitábamos para confirmar mi embarazo.- Darcan se detuvo y se giró levemente mirando sorprendido a Elliot.- Estoy embarazado.- Dijo riendo antes de que Darcan abriera la boca sorprendido y la volviera a cerrar. El lobo se acercó a él y lo abrazó con fuerza antes de bajar su mirada al vientre y centrar sus sentidos en esa parte, intentando captar algo.

- Pero no se oye ningún corazón.- Elliot lo miró obvio antes de rodar los ojos divertidos.

- Darcan, es hijo de dos vampiros, su corazón no va a latir.- El lobo se rio, sintiéndose un poco avergonzado, pero aun así llevó su mano al vientre de este y lo acarició con una sonrisa suave.

- Me alegro mucho por vosotros.- Dijo el lobo antes de apoyar la mano en el hombro de este y darle un apretón suave.- ¿Y esa vampira se va a quedar mucho tiempo?- Preguntó el lobo tenso mientras caminaba hacia el corral de los cerdos.

- Pues no lo sé, porque quiere que volvamos a casa de los Romanov.- Dijo con cansancio apoyándose en la cerca de los gorrinos.- Dice que la magia de allí le hará un favor a mi embarazo o algo así, pero nosotros no queremos ir para allí.- Dijo triste mientras negaba, Elliot sintió la mano de Darcan acariciar su mejilla antes de que este le obligará a mirarlo a los ojos.

- Solo vosotros debéis decidir que es lo mejor para vuestro hijo.- Dijo serio el lobo, Elliot sonrió antes de sentir disfrutando un poco el calor que transmitía el lobo.

- No sabía que Elliot era un domador de perros.- Dijo una voz a su espalda, Elliot resopló enfadado girándose para ver a Hunter y a Narkissa mirándolos.

- No soy domador de nada, solo trato bien a las personas.- Dijo este con rabia ganándose una risa de la vampira, esta se iba a acercar a Elliot, pero el agarre de Hunter en su brazo, la detuvo.

- Tienes suerte de estar incubando un heredero Romanov, si no hace tiempo que habías caído en mi mesa de experimentación, y no para algo beneficioso para ti.- Elliot se rio divertido, siendo solapado por los gruñidos furiosos de Darcan y Hunter.

- Si de verdad piensas eso me das un poco de pena.- Dijo Elliot acercándose a ella y quedando cara a cara, aunque ella fuera más alta que él.- Yo no soy un vampiro que puedas tratar como la mierda, antes de que experimentes sin mi consentimiento conmigo te arranco la garganta con mis colmillos.- Narkissa sonrió de forma siniestra antes de tomar la barbilla de este y levantar más su cabeza.

- Muy osado por tu parte, contando que ya eres uno de mis experimentos y mi garganta sigue intacta.- Susurró contra su oído antes de reírse suavemente.- Tendrás que volver a nuestra casa, y te puedo asegurar que tu hijo será bienvenido, tú no.- Elliot sonrió antes de mirar de reojo a la vampira y agarra su pelo con agresividad tirando de él.

- Te lo voy a decir despacio para que lo entiendas.- Dijo este en tono amenazante.- No necesito ser bienvenido en tu casa, porque voy a formar mi propia familia, una rama Romanov con mucho más prestigio y poder que tu casa.- Dijo empujándola levemente para separarla mientras tiraba al suelo los pelos que habían quedado en su mano.- Además, tengo pensado tener una conversación con Drystan, si yo fuera tú tendría miedo.- Dijo antes de mirar a su pareja que sonreía orgulloso.

Hunter no podía mentir, Elliot era todo lo que había buscado en esa vida tan larga. Alguien que, sin importar lo mierda que fuera su familia, no tuviera miedo de plantarles cara por su relación. Alguien en quien confiar y al que cuidar. Era cierto que nunca se había planteado tener hijos, pero Elliot había cambiado ese pensamiento, ahora deseaba crear una estirpe tan fuerte como la de su padre.

- No iremos a casa, al menos no hasta el parto.- Dijo Hunter ganándose la atención de su hermana, que estaba totalmente indignada.- Así que por favor, vete lo antes posible de nuestra casa.- Dijo Hunter serio, Narkissa negó mientras se iba murmurando insultos en ruso. Hunter resopló antes de reírse recibiendo el abrazo de Elliot. El vampiro dejó un beso en la cabeza de este antes de mirar al lobo, que se había mantenido cerca de Elliot para protegerlo.- Tú, si quieres, vendrás con nosotros.- Dijo consiguiendo que Darcan lo mirara sorprendido.- Eres al único que le confiaría la vida de Elliot.- Dijo de forma rotunda, Darcan asintió antes de mirar al rubio que lo miraba emocionado.

- Me lo pensaré, tengo a una manada que cuidar también.- Hunter asintió antes de dejar otro beso en la cabeza de su novio e irse a secuestrar humanos para que comiera Elliot durante los próximos días.

El lobo y el vampiro se miraron antes de reírse, nunca se hubieran esperado escuchar esas palabras de Hunter, pero eso había relajado a Elliot. Sobre todo porque él se sentía mucho más tranquilo al saber que la opinión de Hunter sobre Darcan había cambiado tanto en ese tiempo.

Bring BackWhere stories live. Discover now