Naruto y Cthulhu Mythos

63

Capítulo 63 Lo que está en juego

Cuando Naruto llegó a asimilar mentalmente lo que acababa de suceder, se dio cuenta de que su madre lo estaba cargando mientras su padre luchaba contra Xel, quien acababa de fusionarse con Samehada y se había convertido en el Profundo parecido a un tiburón. Las cadenas de la espalda de su madre atacaron a Xel, pero una burbuja psiónica les hizo imposible agarrarlas.

"¿Qué diablos está pasando aquí?", preguntó Kushina mientras miraba al Profundo.

"Suelta a mi señor moza, o siente la ira de los Profundos", dijo Xel mientras todavía luchaba contra Minato.

Lo cual era una perspectiva bastante difícil ya que nunca ocupaba el mismo espacio durante más de dos segundos.

"Señor", susurró Kushina para sí misma.

Miró a Naruto, cuyos ojos no sólo eran diferentes, sino también su edad. Naruto la miró. No pasó mucho tiempo hasta que todos estuvieron en la sala viendo la pelea entre Xel y Minato, o mirando a un Naruto sorprendido y sin palabras. Konohamaru fue el primero en suspirar. Se volvió hacia Herbert.

"¿Qué está pasando aquí?" preguntó Konohamaru.

Herbert no dijo nada. Una vez fue un clon de Naruto y luego obtendría los recuerdos de Menma. Estaba tan sin palabras como Naruto en ese momento. Konohamaru pasó a los congelados Sasuke y Sakura para ir con Kushina. Al instante encontró su Katana apuntando a su garganta. Dejó de moverse, pero por lo demás no se vio afectado.

"A pesar de lo interesante que es este evento, ¿podrías dejar a Naruto para que podamos descubrir qué está pasando?", dijo Konohamaru.

Kushina tenía una expresión de confusión en su rostro antes de mirar a Naruto nuevamente.

"Naruto, ¿por qué lo llamaste Naruto?", preguntó Kushina.

Su Katana nunca salió de la garganta de Konohamaru.

"Ese es su nombre, calmémonos y hablemos como seres inteligentes razonables", dijo Konohamaru.

Ella bajó su espada.

"X-Xel, detente", dijo Naruto débilmente, eran las primeras palabras que decía desde que ocurrió el evento.

Xel dejó de pelear, lo que a su vez provocó que Minato apareciera junto a Kushina.

"Ahora que estamos todos tranquilos, intentemos descubrir exactamente qué está pasando por aquí", dijo Konohamaru.

Los condujo a una habitación donde podían hablar libremente. Los ojos de Naruto nunca abandonaron a Minato y Kushina mientras lo llevaban a la habitación. Kushina lo abrazó como si fuera un bebé. Él no lo rechazó.

Una vez que llegaron a las habitaciones, todos se sentaron. La sala estaba formada por Konohamaru, Xel, Herbert, Sakura, Sasuke, Naruto, Minato y Kushina. Kushina meció a Naruto de un lado a otro por un rato antes de que él, de mala gana, se soltara de su alcance para tomar asiento.

"¿Estás bien Menma?", preguntó Kushina.

Naruto no dijo nada mientras la miraba a la cara. Sonrió mientras lágrimas negras rodaban por su rostro. Los ojos de Kushina se abrieron ante su color.

"Como dije su nombre es Naruto. Actualmente estás en otro universo. Uno donde moriste el día que nació Naruto. Para él, es la primera vez que te ve, tendrás que disculparlo", dijo Konohamaru.

Se quedaron mirando a Naruto, que todavía estaba absorto simplemente mirándolos. Konohamaru se reclinó.

"Me temo que tu presencia puede hacer más daño que bien", dijo Konohamaru.