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- No quiero que te mueras...por favor. No soportaría otra muerte. Primero Odi... ¿Y ahora tú?.- murmuraba cerca de mi fiel amigo.
Mi linda ave.
Si, tal vez les suene ridículo para algunos pero cuando tienes apego emocional en animales y no en personas, te cuesta un poco más similar la situación. Verán, esta amistad que formamos mi amigo y yo (y si, le digo amigo porque eso es lo que es. No es un simple animal o mascota, el es mi amigo). Faltaba un mes para que el cumpliera los cinco años y por desgracia al parecer no llegará a ese día.
Coco, se llama Coco.
Llegó a nuestras vidas un mes de Marzo y hasta ahora hemos sido los más felices con su presencia en la familia. Es de pocas palabras como yo pero aún así aprendió a decir "Te quiero te quiero".
El fue el único amigo que tuve cuando nadie más quería serlo. Desde que engo memoria he sufrido de bullying (por suerte esto cambió en la preparatoria) pero aún mi amigo preferido es Coco.
Por desgracia hace unos meses (en Noviembre exactamente) murió nuestro querido perro, se llamaba Odi. Y su partida le afectó tanto a mí mamá como a los demás.
Ahora, yo iba a salir la más afectada que los demás.
- Escucha, si te quedas conmigo... Comeré mejor.- traté de sonreír.- Dejaré de morderme las uñas y ya no haré ninguna tontería. ¿Qué te parece?.- mis labios temblaron al hablar.
Me refería a tontería como al día que traté de quitarme la vida. Y repito, aunque vuelva a sonarles ridículo, mi amigo impidió eso con su canto.
¿Quién lo molestaría en forma de juego?. ¿Quién le daría de comer?. ¿Quién lo sacaría a pasear?. ¿Quién lo ayudaría a escaparse a la tienda para ir a comer dulces o Sabritas hasta gastarse el cambio?.
Esos fueron los pensamientos de aquel día que evitaron aquella tragedia.
COCO IMPIDIÓ MI SUICIDO.
Suena cruel y sin tacto, pero esas son las únicas palabras que puedo dar.
- Si te vas...¿Cómo podré sobrevivir sin tí?. Dime.- pedí acariciando su ala mientras el por suerte comía un poco más.
Al parecer se iba recuperando ya en el segundo día desde que le mordió aquel ratón (o al menos eso pensamos hasta el momento). Pero aún así, este sentimiento de que algo malo iba a pasar, no se alejaba de mi cabeza.
