8. Casa

1K 80 2
                                    

CAPÍTULO 8: CASA

POV HERMIONE

Salgo de casa con mi padre a las tres y veinte. Hace frío porque lo que decidí vestirme con botas negras, un pantalón de jean ajustado gris, una blusa larga blanca, un suéter plateado brillante y una campera abrigada negra. Llevo dinero en mi mochila, mezclado entre los billetes muggles y las monedas del mundo mágico. Severus Snape le dejó una gran cantidad de monedas a mi padre y él la guardó en la caja fuerte para que yo le pidiera cuando necesitara.

−¿Así que voy a conocer a tu nuevo amigo? ¿O debería decir tu primer amigo mago? Ese tal Draco. ¿Vive en Londres? ¿Tiene una familia como nosotros cuatro?

Pregunta mi padre, mirándome divertido mientras esperamos sentados en los unos bancos del enorme patio delantero. Y me ruborizo un poco por tantas preguntas y bajo la mirada al césped.

−Papá, no lo pongas incómodo –le pido casi en un ruego.

−No lo haré, estoy bromeando. Mientras te trate bien, tendrá todo mi respeto.

Mi padre acomoda algunos mechones de mi cabello fuera de lugar.

−Igual siento que creces tan rápido que me asusta y ahora que sabemos que eres bruja y no te veré tan seguido por estas en el colegio internado, sentiré aún más cada cambio. ¿A quién me vas presentar a continuación? ¿A tu novio?

−No tengo novio, papá. Sabes que nunca me interese en ningún niño.

−Sí, porque eran inmaduros, muy diferentes a ti y no te entendían. Pero ahora...

−¿Ahora qué?

−Ahora estarás rodeada de un montón de hechiceros que son como tú, incluso de ese chico y puede pasar cualquier cosa.

−¿Estás celoso? –pregunto sorprendida.

−Tal vez, porque no te quiero perder tan pronto y tampoco quiero que te lastimen. Aún eres muy pequeña para eso, mi niña. Cuando tengas tus propios hijos lo entenderás.

−Ningún chico que conozca podrá reemplazarte, papá.

Él me sonríe, me abraza y besa mi coronilla con cariño. Es raro decirlo, pero en estos días nos hemos acercado aún más si eso es posible. Me he sentido más apoyada y comprendida por mi padre, que por mi madre.

A las tres y media justas, un auto con casi el doble de tamaño del habitual se detiene frente a la entrada de la casa. Mi padre me suelta y se pone de pie listo para recibir a los invitados. Abre la puerta dorada que está a un costado del portón, justo en el momento que Narcissa y Draco salen del auto, vestidos casi informalmente, pero elegantes al mismo tiempo. Narcissa lleva un vestido verde esmeralda con mangas abiertas y Draco con ropa casi igual a la mía, con colores oscuros. Ellos se detienen en la puerta un segundo.

−Buenas días, señor Granger –saluda Narcissa con una sonrisa tranquilizadora en su rostro.

−Buenos días, señora Malfoy. Usted debe ser Narcissa. Mi hija me habló bastante de ustedes, en especial de su hijo.

Mi padre baja la mirada al niño rubio parado en una postura relajada pero que impone confianza, y una sonrisa amable en su rostro.

−Hola, Draco –dice con aire sereno.

−Hola, señor Granger –responde a su vez.

−Es un placer conocerlos al fin. Puedes pasar si quieres, Draco. Quiero hablar con tu madre unos minutos.

Mi padre hace un espacio para que Draco ingrese a saludarme y luego la deja pasar a la madre, con quien se pone a hablar dando una pequeña caminata por el jardín. Solo que tan pronto como veo a mi nuevo amigo caminando hacia mí, dejo de prestarles atención.

Luz Verde [Dramione]Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin