My emergency.

Luna llena ¡Espeluznante!

La noche de luna llena, noche en donde los seres humanos se vuelven más idiotas e irracionales. Mucho mas de lo normal, una noche en donde las cosas raras se vuelven aún más raras. La gente enloquece con la luna llena y hace cosas que superan toda lógica. Hace cuatro y medio miles de millones de años un cuerpo celeste del tamaño de Marte se impacto contra la tierra, los escombros se desprendieron de nuestro planeta quedaron varados en la gravedad y formaron nuestra luna, así es. La luna no es mas que una parte de la tierra separada eternamente, siempre atraída hacia nosotros, ansiando reconectarse.

Se cree que aumenta la fertilidad, desata el caos y provoca que la gente haga cosas que normalmente nunca harían, nadie sabe porque las cosas se ponen tan raras cuando la luna esta llena, porque la gente actúa como loca, lo único que se es que en este trabajo, la única noche en la que debes estar preparado para cualquier cosa, es la noche en la que hay luna llena. Los Ángeles es una zona de guerra cada que algo así ocurre. Buck había sido dado de alta después de su pequeño inconveniente con Abby, ya estaba listo para seguir trabajando y estaba tan bien como si nunca nada malo hubiera pasado. Y claro yo lo estaba molestando constantemente aprovechando la cantidad de bromas que tenía preparadas para él y continuaría burlándome de el por un largo tiempo hasta que ya me quedará sin ideas y eso no pasará en un buen tiempo.

— Entonces ¿La vas a invitar a salir de nuevo?

— He pensado en eso, pero...

— Pero después del ridículo que hiciste seguramente no querrás quedar como bestia de nuevo.

— Si... - Negué un poco mientras avanzábamos por la feria hasta nuestra emergencia.

— Vamos, le gustas. Seguramente esta esperando a que la llames para salir.

— Aja... muy bien amigos, vamos a pasar. Bomberos de Los Ángeles. – Curve mis labios en una sonrisa al ver a la pequeña dentro de la caja. –

— Hola ¿Qué haces ahí? Ahora voy a tener que sacarte si estas de acuerdo. -La pequeña solo asintió. – bien Buck el taladro es tuyo. – Le entregue la herramienta y no paso mucho para poder sacar a la niña junto con su premio. Tomamos nuestras cosas para regresar al carro. – llámala, se hombre, se Buck. – Le di una palmada en la espalda antes de continuar mi camino. Antes de subir tome mi teléfono para contestar la llamada. – teniente Parker a que debo el honor de su llamada.

— ¿Cómo va su turno bombero Dunkan?

— De maravilla, nada extraño ni sobrenatural aún. Espero que los lobos comiencen a aullar pronto.

— ¿Nos veremos esta noche?

— No puedo, tengo que cubrir el turno del idiota de Joe porque pidió libre y Bobby me pidió hacerlo. Tendré trabajo doble.

— Te llevaré algo delicioso a la estación mas tarde amor.

— Eres el mejor, te amo.

— Yo a ti, suerte lobita. – Comencé a reír ante ese apodo.