Lecciones de una nerd [LDUN #1]

9. Decisiones importante

Capítulo dedicado a FabianaMoncadaGutier  que fue la primera en pedirlo :) espero que disfrutes el capítulo 💕

Maldito sea quien haya inventado las clases de educación física. Estoy corriendo alrededor de la cancha con el pelo alborotado y sudoroso, mi respiración completamente descontrolada, mis mejillas rojas como tomate y mi pulso tan saltón que estoy segura que podría tener un ataque en cualquier minuto.

Estoy hecha un asco. ¿Es legal maltratarme así?

Me detengo en alguna parte, sosteniéndome de las rodillas porque necesito respirar, si sigo corriendo a este ritmo vomitaré un pulmón y no será bonito para nadie.

—¡Vamos señorita Hale! ¡No se quede atrás!

Asiento. Me llevo la mano al pecho, no estoy exagerando, pero quiero que la profesora vea que esto es grave, voy a morir en cualquier segundo. ¿Por qué tuve que nacer así de vaga?

Mis compañeras pasan al lado mío como si nada, están todos como frescas lechugas, como si todos se hubieran puesto de acuerdo para humillarme. Desde ahora en adelante, seré la niña que vomitó un pulmón.

Qué vergüenza.

No aguanto más de pie y me dejo caer en el frío y húmedo pasto. Necesito reposar un poco y este lugar es perfecto para descansar mi acalorado cuerpo.

—¡Vamos Summer!

Miro hacia las bancas donde proviene el grito, la pelirroja cabellera de mi amiga resalta en todos lados, aun cuando está sentada en las gradas con una bolsa de hielo sobre su mentón. La muy boba se cayó al suelo por estar corriendo detrás de Jesse, literalmente, corriendo detrás de él. Estaba tan pendiente de perseguir los talones que no se dio cuenta que sus agujetas estaban desabrochadas y todos pudimos ver el instante justo cuando cayó de boca la piso.

Todos nos reímos, tengo que admitir que fue gracioso.

Pero ahora en vez de seguir corriendo está recuperándose de la caída.

—¿Ya se siente mejor señorita Kenneth? Le pregunto porque como puede gritar a su compañera, de seguro es porque se siente bien.

Ante la llamada de atención de la profesora, mi amiga baja la cabeza. Al igual que yo, April odia hacer ejercicio, creo que lo único que la motiva es que Jesse también está en esta clase, pero si pudiera, también la evitaría. Quizás yo debí caerme también para que me dejaran sin hacer la clase.

—Ya señorita Hale, a seguir corriendo.

—Solo unos minutos más, profe —le suplico, con mis manos juntas y la mirada de cachorro.

—Solo dos minutos.

Le sonrío tan grande, porque a pesar de hacerme sufrir esta profesora siempre me dejaba salir con la mía. No era siempre, pero bueno, al menos si cuando me veía que estaba a punto de ahogarme en mi saliva.