Lecciones de una nerd [LDUN #1]

24. Dos cuerpos distintos, una misma alma

—Bueno, si que les tomó tiempo.

Es lo primero que dice Thomas cuando nos ve llegar, los tres sentados en la banca cada uno con una bolsa de papel entre sus piernas.

—Summer no se decidía nunca —bufa April

—Y bien, ¿las bellezas consiguieron algo?

Jesse se acerca a nosotras arrastrando su enorme bolsa con él, intenta mirar dentro de la bolsa de April pero ella lo aleja de un manotazo. Mis ojos viajan hasta Jake, quien está observando con mucha felicidad a su amigo, hasta que se gira a verme. Le devuelvo la sonrisa.

—Por supuesto que sí, pero no puedes verlo todavía.

«Summer consiguió algo para Jake» ¡No!

—¿Entonces ya podremos irnos a casa? —dice Thomas con un tono cansado. No llevamos mucho tiempo dando vuelta, pero luego de la fiesta de anoche todos estamos igual de agotados.

—¡No! —exclama April, ofendida por escuchar que irse es siquiera una opción—. Aun tenemos que ir por las máscaras...

—Estoy cansado —gruñe TomTom.

—Es lo más divertido, vamos Thomas, no seas amargado.

La pelirroja agarra el brazo de nuestro amigo y lo hace caminar con ella hacia las escaleras mecánicas, todos nosotros los seguimos por detrás. Jesse está haciendo algún tipo de broma con respecto a que él nunca se dejaría mangonear por una chica, alardeando sobre eso, hasta que April le da una mirada por sobre su hombro.

Suelto una risotada.

Una vez llegado al segundo piso, April nos guía a todos hacia una tienda de cotillones. Estoy a punto de dar un paso cuando siento que alguien tira de mí hacia atrás, deteniendo completamente mis pasos.

—¿Qué compraste?

Inmediatamente me sonrojo, la voz de Jake sonando demasiado —demasiado— cerca de mi oído. Veo como los demás entran a la tienda sin siquiera darse cuenta de que nos quedamos atrás.

La conversación con Zoey regresa a mi cabeza y en un brusco movimiento me alejo de él, no creo que sea correcto estar tan cerca, al menos no hasta que las aguas se calmen.

A pesar de lo incómoda que me puse, Jake no se ve ni un poco afectado, más bien se ve risueño.

—Un vestido, duh —bufo—. ¿Qué más compraría?

Jake ladea una sonrisa. Y eso es algo para lo que no estaba preparada, así que en vez de quedarme ahí esperando mi transformación a tomate, comienzo a caminar hacia donde nuestros amigos se fueron.

—¿Es bonito? Porque le prometí a tu mamá que haría que te comprarás un vestido bonito.

—Supongo...

—¿Me lo muestras? —vuelve a acercarse.

No sé si es la forma que lo dice o algo similar, pero me saca una sonrisa y me dan ganas de seguirle el rollo juguetón que tiene.

—No... es una sorpresa, y lo verás el día de la fiesta.

Le doy una mirada a Jake por sobre mi hombro y lo dejo ahí pensando en lo que dije, mientras que yo entro a ver que están comprando los demás. Mis mejillas ardiendo porque no fingiré que no acabo de coquetearle a Jake.

Busco a April y la veo con los demás en el mostrador.

—¿Todos quieren máscaras?

El hombre mayor que nos atiende nos mira por encima de sus gafas con un gesto confundido en el rostro. Probablemente no esté acostumbrado a que en esta época del año la gente compre máscaras, halloween ya pasó, aún no es navidad y falta poco más de un mes para año nuevo.