Capítulo 16. Una grieta en el espacio

8 2 7
                                    

Con su hermana herida, Ryan no tenía paciencia suficiente para explicarle a Mark lo que había visto. Ismael se sentía culpable e intentó ayudar pero, el olor de la sangre, no le permitía concentrarse. 

     —¡No! —dijo Ryan— No te acerques —No los culpaba pero, no podía arriesgarse de nuevo—. Deberían irse, los tres.

     —Ryan —suplicó Ismael—, yo, lo siento.

     Y es que, no había mucho que decir, la escena hablaba por si sola.

     —De aquí no se va nadie hasta que no me expliquen, ¿qué fue todo esto? —exigió Mark, aún con el arma en sus manos y sus rubios rizos pegados a la frente, por el sudor .

     —Yo te lo explicaré —Ariel se puso frente a él, ocupando toda su atención—, pero debes dejarlos ir, a todos.

     El oficial tenía la boca de su arma justo entre los ojos de su amigo.

     —Vi lo que hiciste hace un rato —hizo una pausa y acomodó su dedo en el gatillo—. ¿Cómo sé que puedo confiar en ti?

     —Porque una vez me preguntaste lo mismo —respondió confiado— y te lo demostré. Ahora, seré yo quien necesite confiar en ti.

     Mark lo consultó con su instinto y, de un súbito movimiento, guardó su arma.

     —Max —se volteó Ariel, hacia sus compañeros—, lleva a Ismael a mi apartamento y espérenme ahí. Yo iré con Mark y me reuniré con ustedes antes del amanecer.

     A pesar de que la herida en su cuello no parecía de gravedad, Darys estaba muy débil. La mordida de un vampiro tenía ese efecto en sus víctimas, con el fin de hacerlas más vulnerables. Ryan logró que se sostuviera de él, con la ayuda de Elena. Jenny estaba herida en su brazo y dorso pero, podía valerse por ella misma. No debían ir al hospital si querían evitar las explicaciones, así que, fueron directo a casa.

     Eran horas de la madrugada cuando, Elena abría la puerta notando un silencio totalmente inesperado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

     Eran horas de la madrugada cuando, Elena abría la puerta notando un silencio totalmente inesperado.

     —¡Gabita, Mell! —gritó Ryan— Necesitamos ayuda.

     —¡Lay! —agregó Jenny— ¿Dónde están?

     Para su sorpresa, la casa estaba totalmente vacía; y más aún, ante sus ojos, podían ver señales de lucha. La mesa del comedor estaba totalmente quebrada y el vidrio resultante, estaba esparcido por dos tercios de la sala. Jenny, además, encontró restos de sangre cerca de la cocina y eso, realmente los alarmó.

     —Fue una trampa —susurró Ryan entre dientes—. ¡Fue una puta trampa!

     —No lo puedo creer —reflexionaba Jenny entre tragos de dolor—. ¿Cómo no lo vimos venir?

     —Tengo que volver —concretó mientras limpiaba la herida de su hermana—. Lo voy a matar.

     En ese instante, Darys levantó, lentamente, su mirada hasta encontrar los ojos de su amado hermano.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Dec 11, 2023 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

El nigromante y el vampiroWhere stories live. Discover now