EN BUSCA DE CONSEJO [CAP]

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Había comenzado a llover en la pequeña ciudad, noche fría y con vientos fuertes azotaban las calles, aunque eso no era mucho problema para cierto par que por lo visto estaban tranquilos dentro de una casa.

Esos dos eran ni más ni menos que Izuku y por otro lado Rumi, el chico se encontraba cocinando un par de cosas en la cocina para poder comer mientras veían algo en la tele mientras que por otro lado, la mujer se estaba encargando de encontrar ese entretenimiento en la tele.

MIRKO: Oye Izuku, sé que no es muy común que diga estás palabras, pero gracias por dejarme pasar la noche aquí - Habló con calma, algo muy poco común en ella, el pelinegro por su parte suspiró un poco en la cocina sacando los platos y llevándolos al salón dejándolos en la mesa para que ambos comenzasen a comer.

IZUKU: Últimamente estoy en una temporada amable, aprovecha eso antes de que esta versión de mi desaparezca para siempre - Respondió con calma pero sin muchas ganas a su vez provocando que la mujer riese ligeramente por el comentario y dándole un leve codazo en el lateral a este.

MIRKO: No seas exagerado, en el fondo eres alguien amable y cariñoso, lo que pasa es que está muy ... muy ... MUY hondo esa amabilidad, además, así sacas material con el que molestarte, seguro que con lo poco que te gustan las muestras de afecto y demás, recordarte momentos como estos te molestan aún más - La mujer no dudó en poner un tono burlesco a esto mientras miraba con una sonrisa divertida al pelinegro, quien gruñó notoriamente irritado por el comentario y le devolvió el codazo a la mujer haciendo que ella se riera una vez más.

MIRKO: Has visto? Esto de visitar tu casa me empieza a gustar, tal vez me tengas aquí más a menudo - La mujer se tumbo hacia un lado del sofá poniendo su plato cerca suyo y posando sus piernas sobre el regazo de Izuku invadiendo así su espacio personal.

IZUKU: Eso es lo que tú te piensas, pero como se te ocurra aparecer mañana delante de mi puerta de nuevo para lo mismo ... te abriré ... pero con una olla llena de agua hirviendo ... adivina qué haré con ella - Contestó gruñendo un poco y poniendo la base de su plato sobre las piernas de Mirko provocando que esta las apartase rápidamente por haberse quemado un poco con el plato aún caliente.

MIRKO: Me prepararás tallarines con el agua hirviendo? Que servicial de tu parte, me alegra que estés tan atento como para saber que iré allí para comer - Mantuvo su burla en una posición más recta ya que se vió obligada a ponerse sentada de nuevo al haberse quemado con la base del plato de Izuku.

Izuku chasqueó la lengua irritado y rodando los ojos dando a entender que empezaba a rendirse en la conversación, la mujer por su lado rió abiertamente dándole un par de palmadas en la espalda a Izuku con fuerza, obviamente, molestando más al pelinegro.

IZUKU: Estás perdiendo cada vez más puntos, te recuerdo que en cuanto lleguen a cero te hecho de mi casa - Le gruñó con un poco de cansancio claro en su voz, la mujer por otro lado rodó los ojos, pensó por unos instantes y una sonrisa burlona apareció en su rostro.

MIRKO: Y ... hay alguna forma de que pueda conseguir más ? ~ El tono coqueto y el claro acercamiento al rostro del peliverde se hicieron presentes en la escena, la mujer cambió su mirada entre los labios del pelinegro y sus ojos dejando clara sus intenciones.

IZUKU: De verdad crees que vas a conseguir algo de mí intentando seducirme? - El pelinegro alzó una ceja con duda sin necesidad de tener que apartarse del acercamiento de la mujer sabiendo que ella no se atrevería a ir más lejos con él.

MIRKO: Oye, quién sabe? Es mejor intentar y tener probabilidades de conseguir algo ... que simplemente rendirse, no? - La mujer se apartó de él para darle su espacio con un tono divertido y agarrando el primer bocado de su plato, parecía que por esta vez, el pelinegro habia preparado pescado.

SOLO TUVISTE MALA SUERTEWhere stories live. Discover now