Dulce Tentación ➳ ChanBaek

Final

Entre ser o no un cobarde, BaekHyun prefería serlo, ¿por qué? Porque al ser un cobarde no tienes que enfrentarte a lo que temes y BaekHyun estaba bien con ello.

Debido a esa actitud desde pequeño su madre le recriminaba esa actitud no propia de un niño, pero a él no le interesaba, solo veía por una vida cómoda y si estaba en él que no hubieran cambios, pues mejor. Era un cobarde para varias cosas, pudo perfectamente haberse hecho un examen de sangre para comprobar si era un doncel cuando muchos de su clase lo hicieron e incluso lo invitaron, pero fue tan cobarde para siquiera hacerlo hasta que se vio obligado para su trabajo como niñero. No se atrevió a dar el primer paso con ChanYeol por más que este le gustara y tuviera el presentimiento de que le gustaba, ChanYeol hizo todo básicamente y si él le correspondió fue porque el alcohol le dio el valor que necesitaba, aunque al final terminó huyendo de ChanYeol y de sus sentimientos, finalmente, SeoHyun tuvo que intervenir y literalmente empujarlo para que fuera tras de ChanYeol, porque él no tenía intenciones de hacerlo.

Sí, era todo un cobarde desde que tenía memoria, pero no se avergonzaba de ello, era parte de él.

Pero a diferencia de él, ChanYeol no era un cobarde para nada, así que terminó insistiendo en conocer a su madre y para ese punto a BaekHyun se le habían acabado las excusas. No sabía cómo decirle que él no era una persona grata para su madre.

Esto tenía tantas maneras de salir mal que simplemente se rindió y aceptó a regañadientes. Entonces aquí se encontraban, ChanYeol estaba sinceramente emocionado a su tras mientras él se hacía el tonto con las llaves para alargar lo inevitable. Supo que estaban perdidos cuando fueron recibidos por su madre que al notar a ChanYeol a su lado, a pesar de este haber dado una perfecta reverencia de noventa grados, ella hizo una mueca y seguía sin lucir del todo convencida.

BaekHyun rezó para que no fuera grosera, porque ChanYeol era amable, pero tampoco era la paciencia hecha persona.

—¿Eres ChanYeol? —preguntó en un tono frío diferente a su usual calidez al hablar. El menor supo que esta era su señal de retirada, pero lo haría en el momento indicado.

BaekHyun rápidamente hizo señas para que su madre tuviera la decencia de disimular, era su invitado y pareja, después de todo. Su relación estaba en el mejor momento y no quería que su relación fuera cuesta abajo por su madre.

—Lo soy, un gusto conocerla finalmente, señora. BaekHyun habla mucho de usted.

Hubo un silencio incómodo, porque su madre no lo invitó a pasar ni a sentarse, solo lo observó de pies a cabeza, evaluándolo. BaekHyun maldijo en su mente cuando su madre notó sus prendas de lujo y una mueca apareció en su rostro. No es como si ChanYeol fuera su sugar daddy, pero fácilmente podría malinterpretarse como si lo fuera y él quería morirse ahí mismo, más cuando su madre le dio la mirada.

Lo mejor era buscar una excusa y sacarlo de allí. Se afianzó del brazo del mayor para ser el cobarde de siempre, incluso si su pareja le hubiera expresado sus deseos de compartir una comida con quien era su suegra, ChanYeol no sabía que no era bienvenido, literalmente. BaekHyun se sintió mal, así que cuando lo iba a jalar con él, recibió una llamada que tuvo que contestar al ver que era el tonto de Choi, ese tipo que era un enfermo de la responsabilidad y anda tú a decirle que se espere, te bota de los trabajos en grupo, era mejor atenerse a él.

Suspiró y se disculpó, tenía que irse, pero cuando pensó que ChanYeol lo seguiría, este le sonrió y le dijo que fuera con cuidado.

Lo que le faltaba, su madre y ChanYeol a solas.

Rezó para que todo fuera bien, pero no pudo dejar de pensar en ello en toda la bendita reunión en la que sí bien no recibió más que una reprimenda de Choi por no andar concentrado, no dejaba de pensar en los miles de escenarios entre su madre y ChanYeol, ninguno favorable ni para él ni para ChanYeol. Habían miles de posibilidades.