𝐌𝐎𝐓𝐇𝐄𝐑 𝐍𝐀𝐓𝐔𝐑𝐄 ☑𝐂𝐑𝐄𝐏Ú𝐒𝐂𝐔𝐋𝐎 𝐅𝐀𝐍𝐅𝐈𝐂

𝐓𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘 𝐓𝐇𝐑𝐄𝐄

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Capítulo largo
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El caminar de todos se podía escuchar perfectamente sincronizado, el como crujía la nieve debajo de sus pies, la nivelada capa de nieve no era tan profunda, pero llegaba a cierto punto en donde le helaba la piel.

Lórien iba tomado de su mano, apretándola levemente, mientras que Jasper iba del otro lado, tomando la otra mano del pequeño.

Yeonjun y Atlas iban detrás de ellos, cuidando sus espaldas siempre.

Tenía miedo, no podía negarlo, no sabía que tipo de respuestas tendrían aquel día ni el resultado de lo que pasaría en unos cuantos minutos, pero realmente la chica deseaba que no pasase nada malo.

Llegaron al punto de reunión, todos esperando a que los vulturis llegasen al encuentro, la nieve caía lentamente, como si supiera que en aquel momento pasaría algo importante.

El claro donde quedaron en reunirse era perfecto, en otras circunstancias lo sería más claro estaba, pero disfrutaba de la vista, el pequeño a su lado jaló de su suéter, y ella al instante dirigió su mirada al menor.— ¿Qué sucede?.

El menor hizo un puchero pequeño, abrazando su pierna.— Tengo miedo.— expresó con voz temblorosa.

La mujer acarició su cabello, tratando de darle tranquilidad.— No dejaré que te toquen ni un cabello, lo prometo.

Compartió una pequeña mirada con el rubio, quien le dedicó una sonrisa despreocupada, tratando de darle calma a ella igual, regresó la sonrisa, y se preparó para la llegada.

La nieve debajo de ellos comenzó a temblar levemente, los árboles crujían y los pájaros volaban, y sin esperarlo, los reyes, la guardia real y los testigos de Aro hicieron acto de presencia en aquel campo de batalla.

Su respiración se cortó levemente, el nerviosismo creció dentro de ella, y con ello surgieron nuevamente las inseguridades que tuvo días antes, sintió una ola de calma, e inmediatamente miró de reojo al causante de ello, tranquilizandose.

—Aro está buscando a Alice.— informó Edward, quien leyó su mente.

Pero tal parecía que su mirada se centró en la joven de cabellos rubios, a quien le sonrió al mirarla entre las personas que compadecían a los Cullen.

Se detuvieron a unos cuantos metros, no por que quisieran, si no que al aparecer ellos, los aullidos de los lobos provenientes de las manadas Uley y Black no se hicieron esperar, los lobos rápidamente tomaron posición entre los vampiros, Jacob acercándose a Renesmee, quedando a su lado como protector.

Carlisle, siendo el patriarca de aquel clan, se encaminó hacia el centro, sin quitar la mirada de los reyes que alguna vez fueron sus amigos más cercanos.— Aro, hablemos como solíamos hacerlo, de una manera civilizada y tranquila.— habló demostrando calma, sin exagerarla de alguna manera.

—Palabras justas, Carlisle, pero considerando el batallón que has reunido contra nosotros, no puedo tomar en cuenta tus palabras.— respondió el vampiro de ojos rojizos, que sonreía de una manera siniestra.

—Te doy mi palabra, no se ha quebrantado ninguna ley.— aseguró.

—Vemos a la niña, no te atrevas a burlarte de nosotros.— habló el rey rubio, Caius, de manera agresiva.

—¡No es una niña inmortal!.— alzó la voz, siendo la misma retumbada por todo el bosque.— todos ellos lo atestiguan, mira su rostro, ve la sangre que corre por sus mejillas.