[🥠]- Navidad.

78 16 3
                                    


Corea del Norte se encontraba asomándose por la ventana de su casa en su capital, totalmente desanimado, ¿por qué?

Cada navidad tenía que viajar a su país, y aparte de eso, no podría tener contacto con nadie y además, la navidad no se celebraba allí, era como un día normal como todos. Corea solamente suspiro mientras veía los pequeños copos de nieve caer.

No tiene problema en pasar navidad solo, ya que está acostumbrado, pero simplemente no puede evitar el deseo de estar con su pareja en esas fechas, de cierta forma siempre encontraban algo que hacer y todo terminaba en un terrible desastre de nieve, resfriados, etc. China también se la tenía que pasar en su capital, totalmente amarrado a sus reglas, teniendo que supervisar cada cosa de lo que pasa hoy en su país.

No se porqué deseo estar con ese asiático de mierda en estas fechas... — Susurró para si mismo, luego levantarse e ir a su cama, esperando que pueda dormirse.

Mientras tanto, un China se encontraba escapando de varios guardias de seguridad debido a que dejó su puesto, el simplemente se harto de estar encerrado allí supervisando todo como un robot.

No puede ser que literalmente a ciudades todavía lo estuvieran persiguiendo, si bien, estaba rompiendo reglas de su país al manejar a altas velocidades, pero no le importa, el tenía un objetivo en mente.

Llegó a un pequeño pueblo situado justamente a la frontera que tenía con el país coreano, de allí, una nueva idea surgió en su mente, sería peligroso ya que lo pueden ver como un intruso a lo lejos, pero eso no le molestó en lo absoluto; China bajo del auto, a tan solo un paso de cruzar la frontera, con una expresión en su rostro totalmente desinteresada.

Señor República Popular de China, tiene que volver a la capital o de lo contrario... ¡No, espere! — Entró en pánico cuando vio al país alzar un pie, con intenciones de cruzar la línea.

¡No cruze, por favor!

Oh... Es una lástima que no pueda escucharlos... — Habló, antes de que pudieran dispararle un analgésico, dio un paso firme, entrando ya a territorio norcoreano.

China se reía a sus adentros, ver la cara de pánico de sus agentes simplemente le causaba risa, pero ahora debía ser rápido antes de que se den cuenta que en realidad paso la línea, así que fue escondiéndose en varios árboles.

Corea estaba apunto de quedarse dormido, de no ser por un sonido molesto tocando su puerta, rápidamente se levantó con un palo en manos, era demasiado tarde y las reglas consistían en no salir tarde de sus hogares, como un toque de queda.

— Quién eres y que... — Se quedó totalmente quieto cuando vio al chino en su entrada, extrañamente sudando pero cubierto de nieve, no alcanzo a darle paso cuando ya estaba adentro.

¿Que haces aquí imbecil? ¿No ves que te pueden hacer algo cuando regreses? O mucho peor, ¿Puede suceder algo en tu ausencia? — Le dio un puño no tan fuerte en el brazo, mientras le pasaba un trapo.

— ¿Y a mí me afecta en? — Le respondió, mientras empezaba a quitarse la nieve del cabello.

... ¿Que es lo que quieres? Pudieron hacerte algo cruzando la frontera, dudo mucho que hayas venido en avión... — Le habló, mientras se sentaba en el suelo.

¿Y me importa que me hagan algo? Sabes que no será más que unos balazos, y solo quise venir aquí para pasar la navidad contigo. — Su tono de voz en lo último era como si nada fuese pasado, algo que a Corea le dio algo de vergüenza.

Deja tus asquerosas cursilerías para otro momento, ¿Dónde están los niños? ¿Con quién los dejaste? — Si bien, le agradaba el hecho de que China estuviera con el pero no significaba que no se siguiera preocupando, especialmente por sus hijos.

Están en buenas manos... — Le dijo, después de quitarse toda la nieve del cabello, lo sacudió.

Pareces un perro sacudiendote así, deja de hacer eso. — Agarró el trapo que anteriormente fue utilizado para quitar nieve, pero un fuerte apretón de manos detuvo su camino hacia el lugar donde iba el objeto.

Sueltame, ahora. — Habló, mirándolo serio.

¿Por qué debería? —

... China, no estoy para tus juegos ahora, sueltame. — Intento liberarse del agarre, pero no pudo.

No me recibes ni con un saludo más que con un insulto preguntándome porque estoy en Pionyang ahora, ¿No crees que merezco algo debido a tu mala educación? — Habló, algo coqueto.

China, sabes que no puedo ahora, hay micrófonos. — Su tono de voz era impaciente.

Tampoco es como si fuéramos a hacer ruido, ¿Acaso haremos ruido cocinando unas simples galletas? — Corea lo miró, aún más impaciente.

Si, lo suficiente para que quede grabado. — Fue jalado bruscamente, mientras daba un beso al más alto.

Rápidamente se separó, haciendo un pequeño sonido, su expresión era de enojo y ligero pánico, pero la que sobresalía más era vergüenza.

Eres un imbecil, no esperes que por estar aquí te trataré diferente, fuiste demasiado idiota para llegar hasta aquí y extrañamente sin ningún tipo de rasguño, vas a dormir afuera porque no te voy a dar ni mierda de espacio en mi tapete de dormir. — Habló totalmente enojado mientras daba la espalda al gigante asiático.

Como digas, tampoco es como si me fuera a quedar aquí, y tú tampoco... —










































































¿Adivinen quién no va a viajar porque se levantó tarde y su familia lo dejo en casa? Exacto, yo.

¿Adivinen quién hizo una estupidez que lo dejó traumado? Exacto, yo de nuevo.

Y es que, lo que pasa es que el señorito que está escribiendo esto, tuvo un sueño lucido, y se le ocurrió preguntar la hora en el sueño.

Ahora tengo una gran duda si puedo estar endemoniado y yo sin darme cuenta o no, además ahora ya ni puedo dormir porque literalmente soy tremendo cobarde.

Además, cambiando de tema, tenía que traerles un corto (largo) por mi desaparición durante una semana (creo)

Sin más que decir, adiós.

-[🥠]

𝑻𝒆 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 // 𝑪𝒉𝒊𝒏𝒂 𝒙 𝑵𝒐𝒓𝒄𝒐𝒓𝒆𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora