Prefacio

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Narra Yuji Itadori

Hay riquezas que no se pueden conquistar con el dinero y saberes que no se ganan con méritos.

En mis primeros años de existencia juraba que en la vida se podía ser tan feliz y alegre como se quisiera; la clave estaba en visualizar exactamente lo que se quería. Sin embargo, con el tiempo me di cuenta de lo equivocado que estaba... la muerte de mis padres fue la cúspide de esta realidad que nadie suele contar; aquella en la que incluso la felicidad parece finita.

A nadie le gusta hablar sobre las decisiones difíciles que se deben tomar en la vida, sobre la miseria y las desavenencias que se yerguen en el mundo sin falta y sin descanso. Es preferible hablar sobre las cosas positivas; las que, de cierto modo, son más congruentes con los deseos en general de las personas y protegen contra la devastación que trae las realidades adversas.

Y, sin embargo, como humanos solemos dirigirnos a lo que consideramos como bueno para nosotros. Mas si soy sincero, me parece que esta aseveración es muy relativa; el bien y el mal son conceptos que encarnan vidas en las acciones de cada individuo... son como los tesoros que se esconden de otros, pues tiene una pertenencia íntima con su dueño. El bien y el mal es todo lo que se hace según la perspectiva de las cosas, por lo que carecen de una sustancia verdadera.

Me parece irónico pensar ahora de esta manera, tan seguro de lo que digo, tan vivaz, cuando de lo único que estoy seguro es que nadie merece sufrir lo que no le corresponde...

Nadie merece morir en la soledad de una existencia vacía.

Soy Yuji Itadori y me propuse a investigar cómo superar la horrible sensación de estar en medio del vacío existencialista. Quizá algo que le llene sea la respuesta...

Algo como el infinito.

Infinito || GoYuuWhere stories live. Discover now