Capítulo 31

498 72 2
                                    


Primer Acto || Parte Treinta y uno

"Estás de vuelta"


Al caer la noche se dirigieron hasta la vieja mansión Hale, debían tomar un traslador para aparecer a las afueras de la madriguera. 

—Todos atentos, el traslador se activará en un minuto—les comunica Regulus.

—Tomémonos de las manos—pide Ariadna.

El traslador se activo en cuanto terminaron de tomarse de las manos, el remolino los envolvió provocando que giraran.

—¡Suéltense!—exclama Regulus.

Ariadna abrazo a Stiles para protegerlo de la caída, a excepción de los especialistas en viajes por traslador el resto cayo en el frío pasto.

—Debieron avisarnos—se queja Scott levantándose.

—Agradezco que me salvarás de tan fea caída—dice Stiles.

—Bienvenidos a la madriguera—Ariadna mueve sus manos a sus lados dando un efecto dramático.

Observan una construcción dispareja siendo alumbrada por los primeros rayos del sol, sus ojos brillan en curiosidad al tratar de descubrir cómo aquella construcción no se derrumbaba. Se percatan de la presencia de un hombre mayor pelirrojo en la entrada él cual los saluda con la mano.

—¡Abuelo Arthur!—Ariadna corre a su encuentro. 

—Vamos—dice Klaus siguiendo los pasos de la menor.

—Sean bienvenidos, soy Arthur Weasley—saluda a todos con un apretón de manos sin dejar de lado su sonrisa. 

—¿Dónde está la abuela?

—Ella está...—no puede terminar su frase al verse interrumpido por su esposa.

—¡Ariadna!—Molly abraza con fuerza a la chica—. Me alegra tenerlos aquí, no se queden ahí parados he preparado de comer, deben estar hambrientos.

—Charlie y Bill están poniendo la mesa, desayunaremos afuera—les comunica el patriarca Weasley—. ¿Dormirán aquí?—pregunta viendo a Klaus y Peter.

—Nos quedaremos en la mansión Black, pero no duden que nos tendrán todo el día aquí metidos.

—Me parece perfecto—acepta Molly.

La vista de todos se posa en las escaleras al escuchar como descendían pisadas rápidas por ellas.

—¡Ariadna!—tres adolescentes se lanzan sobre ella provocando que terminaran en el suelo.

Los cuatro ríen divertidos en medio de un abrazo de cuatro.

—Suficiente niños, dejen a su primar respirar—pide un hombre castaño con lentes.

—Harry—Peter y Klaus se acercan a saludar.

—Es bueno verte Peter, aunque los cuatro tenemos una conversación pendiente.

—Lo sé, Klaus me lo ha dejado claro.

—Mucho gusto, Harry Potter—saluda con un asentimiento de cabeza—. Estos revoltosos de aquí son mis hijos, James y Albus—los apunta—. Y este muchacho es mi ahijado Teddy Lupin.

Los adolescentes saludan con un movimiento de manos. 

—Hay alguien que deben ver, a vuelto con nosotros después de mucho tiempo—Ariadna toma la mano de Regulus colocándolo a su lado para que lo vean.

Los ojos de Molly se cristalizan al ver al muchacho, es la primera en abrazarlo.

—Has vuelto, no puedo creer que te tenga frente a mi.

—Cuanto has crecido Regulus, eres un joven tan apuesto—Arthur lo envuelve entre sus brazos. 

Harry se acerco a él envolviéndolo entre sus brazos.

—Jamás creí las palabras de Talia, sabía que no podrías estar muerto. Estas de vuelta, el peligro que te alejo de nosotros a desaparecido—dice lo último después de colocar un hechizo silenciador, no quería que Derek escuchara la clara indirecta sobre el alivio que le causaba que Talia este muerta.

Después de varias presentaciones se dirigieron a comer.

—Su atención por favor—pide Klaus golpeando un vaso con un cuchillo—. Como saben estamos aquí reunidos para celebrar el cumpleaños número catorce de Ariadna, como cada año festejaremos primero con los Weasley con juegos y muy deliciosa comida preparada por Molly—le guiña un ojo a la matriarca—. Y el día especial de nuestra princesa lo celebraremos en la mansión Malfoy, portaremos nuestras más finas ropas y festejaremos con un baile de la alta sociedad. 

Le cede la palabra a Harry.

—Este año es especial, porque contamos con la presencia de Peter y Regulus. 

—Brindemos y disfrutemos, festejemos hasta el fin de los tiempos la vida de nuestra princesa—levanta su vaso—. Por Ariadna.

—Por Ariadna—brindan todos.

Mi dulce hibrida || kol mikaelsonWhere stories live. Discover now