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Dedicado a Ale_tulipanes25 en su cumpleaños, desde tempranito actualizando porque te lo mereces💕 pásalo muy bonito hoy, te mereces lo mejor de esta vida🫂

Se fueron separando poco a poco hasta que sus ojos se encontraron. Ara fue retirando lentamente sus manos del cuello de Draco, sus dedos rozando suavemente su piel antes de soltarse por completo. Draco, con la mirada aún fija en ella, retiró su mano de su mejilla, dejándola caer a su costado. Ambos estaban consternados por la situación y las emociones que se arremolinaban a su alrededor.

—Hay que... entrar... —dijo Draco, tropezando con las palabras, aún con la respiración agitada. Se pasó una mano por el cabello, un gesto de nerviosismo que rara vez mostraba.

—No —dijo Ara, su voz firme pero llena de tensión.

—¿No? —Draco frunció el ceño, claramente confundido.

—No.

—¿No qué? —preguntó, tratando de entender.

—No puedes besarme y luego actuar como si nada —reclamó Ara, cruzando los brazos sobre el pecho en un intento de protegerse de la vulnerabilidad que sentía. Draco suspiró, su mirada suavizándose un poco.

—¿Cómo quieres que actúe? —preguntó, dando un paso hacia ella.

—Solamente quiero que me digas... —hizo una pausa, su voz temblando mientras buscaba las palabras adecuadas— ¿Por qué lo haces? ¿Por qué me besas?

Draco suspiró de nuevo, desviando la mirada hacia el suelo, incapaz de enfrentar sus propios sentimientos.

—¿Por qué me dices esas cosas y me besas? ¿Por qué? —insistió Ara, su voz elevándose ligeramente, cargada de desesperación.

Y no respondía. Draco permaneció en silencio, su mirada perdida en el horizonte.

—Dime —exigió Ara, pero en un susurro, acercándose un poco más a él.

Draco solo miraba a un horizonte perdido, claramente consternado.

—No me hagas preguntas a las cuales no tengo respuesta —susurró, su voz apenas audible—. Trato de buscarle una respuesta a todo, pero no lo sé —se encogió de hombros, visiblemente frustrado, sus manos apretándose en puños a sus costados.

—¿Y bueno? ¿Qué se puede hacer? —dijo Ara, su tono reflejando la confusión y desesperación que sentía.

—Tú puedes hacer una cosa —dijo Draco, su voz cargada de una súplica silenciosa mientras levantaba la mirada para encontrar sus ojos.

—¿Qué? —Ara frunció el ceño, su corazón latiendo rápidamente.

—No me dejes —respondió Draco, dando un paso más hacia ella y tomando sus manos con las suyas, sus dedos entrelazándose con los de ella.

Ara sintió un escalofrío al escuchar esas palabras, lo miró, tratando de entender la profundidad de sus palabras. Había algo en su tono, en su mirada, que la hizo dudar de todo lo que pensaba hasta ese momento. La vulnerabilidad de Draco era palpable, y por primera vez, Ara vio más allá del hombre seguro y orgulloso que siempre había conocido.

—No comprendo —dijo finalmente Ara, su voz apenas un susurro.

Draco suspiró profundamente, buscando las palabras adecuadas.

—Si me dejas y te alejas de mí, no podré responder tus preguntas ya que es lo que siento —explicó, su voz llena de frustración y sinceridad.

—¿Qué sientes? —preguntó Ara una vez más, su confusión evidente en su rostro.

LA NIÑERA | Draco MalfoyWhere stories live. Discover now