Obliviate

Capítulo 16 Profecía

Hermione acababa de llegar a su oficina, en su escritorio encontró una nota.

Muñeca:

Ven a mi casa en cuanto leas esta nota, es para tratar un asunto de Samantha, el ministro ya sabe.

DLM

Bueno que este hurón no sabe más que dar ordenes, pensó la chica arruga la nota y la tiro. 2 horas después alguien tocaba a su puerta.

-toc toc toc – adelante -- informo ella.

-ya toco por que luego hay cada escena que prefiero ahorrarme jejeje – Harry iba entrando a la oficina de su amiga , y esta por su comentario le aventó un lapicero el cual esquivo – huy alguien amaneció de mal humor – le deposito un beso en la mejilla y se sentó a lado de ella sobre el escritorio de esta.

-dijiste que llegarías tarde, mas no que no llegarías – le dijo para cambiar el tema la chica

-bueno digamos que yo si pase buena noche – dijo muy risueño el chico.

-Samantha? – pregunto la castaña

-así es, si la hubiera conocido en otras circunstancias apuesto a que ya estaría enamorado de ella – dijo con una sonrisa en su rostro.

La castaña solo levanto las cejas en respuesta de sorpresa – Ginny vino a noche a la casa y lucia muy molesta, exigía hablar contigo – no dijo nada de que la ataco por la espalda.

Harry se acerco al oído de la castaña para decirlo algo de Ginny que no quería que nadie escuchara y en ese momento ingreso a la oficina Draco Malfoy.

-Interrumpo algo – dijo lleno de reproche, la castaña solo rodo los ojos, ya veía la escena que se avecinaba.

-mira quien es ahora el mal educado – contesto Harry.

-no tengo que pedir permiso para entrar a la oficina de mi n... -- se detuvo antes de acabar de hablar, como se le había salido eso, guardo la compostura y prosiguió – No viste mi nota, es urgente, vamos. – hablo en dirección de la castaña.

Harry volteo a ver a Hermione ¿acaso el hurón había estado a punto de decir "mi novia"?, Hermione tenia el mismo pensamiento en la cabeza, pero lo descarto rápidamente – no estoy a tu servicio Malfoy, tenia que firmar unos papeles primero – le indico.

-¿Podemos irnos? – pidió el rubio, intentaba no hacer una escena de celos.

La chica suspiro y se despidió de Harry de beso, cosa que molesto aun mas al rubio, claro si es que era posible. Lo tomo de la mano y desaparecieron, llegaron a la sala de la mansión Malfoy, el rubio le indico con la cabeza que la siguiera, entraron al despacho. Y para su sorpresa ahí estaba Samantha sentada sobre un sofá con las piernas cruzadas, llevaba un vestido larguísimo, pero abierto de la pierna derecha, por lo cual ahí cruzada de piernas dejaba mostrar su pierna superior.

Hermione dio media vuelta dispuesta a salir de ahí, pero Draco la atrajo con sus manos, la coloco frente a el y le acomodo un riso rebelde tras su oreja – por favor – le pidió el chico a ella, al ver que no cedía agrego – me debes una.

La castaña rodo los ojos y fue a sentarse a un sillón cerca de Samantha.

-Las dejare a solas – espero que no se maten pensó el rubio y se retiro del salón.

Las chicas se miraron por un rato, ninguna rompía el silencio, Samantha nunca lo admitiría, pero estaba impresionada con esa chica, en lo que ella y Draco la habían estado esperando, 2 horas por cierto, Draco le explico que era el ministerio y que papeles desenvolvía cada uno, como estaban separados el mundo mágico y el mundo muggle y sobre todo le explico todo referente al trio de oro, además se dio cuenta que cada vez que Draco decía algo de Hermione lo hacia con mucho orgullo, ya se había dado cuenta lo que ocurría entre estos dos. Admitía que la chica era muy hermosa y se vestía muy elegante.