Te encontré por casualidad ♢Yaoi/Gay♢

Capítulo 22

Mmm... que canción más rara, ese idioma se me hace conocido...quizás ...aún tengo el recuerdo de ciertas canciones, pero no creo que las den por allí...se siente raro estar sentado aquí o sólo sentarse en el suelo que tiene alfombra...creo que lo es, es demasiado suave y limpia, el lugar tiene unas luces altas y tenues dependiendo del cuarto...hay unas cuantas además de esta... quisiera verlas, le voy a preguntar a Alex...

Colin miraba el piso distraído hasta oír la puerta del baño abrirse y ver a Alexander salir sin polera y sólo en ropa interior, Colin se sonrojo al verlo, que fue respondida por una mirada divertida.

- ¿tienes hambre? – él asintió dando un leve sonido como un "sí", Alexander camino hasta su cuarto, saco una polera y unos pantalones, se vistió en sólo unos segundos y salió del cuarto, pero Colin lo miro extrañado en la parte baja de su cuerpo.

- ¿por qué te pones pantalones? –

-... ¿te molesta? – preguntó con cierta picardía en su tono de voz.

-n-no, s-sólo lo preguntaba...- Alexander le revolvió el cabello y camino hacia la cocina, Colin lentamente fue hacia el mirando el lugar.

-ven –dijo Alexander – ¿qué quieres de comer? –

-esos...eh sanwish sandish –

- ¿sándwich? –

-sí –dijo alegre, Alexander río con él y empezó a cocinar siendo observado hasta terminar de preparar el pedido.

- ¿quieres Café, té o leche? –

Colin miro confundido, así que Alexander decidió por ambos –ah Alex –hablo de la nada recordando lo que deseaba –¿puedes mostrarme el lugar? – Alexander sonrió por la delicadeza de las palabras que seleccionó, mientras calentaba el agua para las tazas, le mostró todas las habitaciones y que podía hacer en cada una.

Luego llevó las dos tazas y la comida a la sala y comenzaron a comer. Ambos miraban la tele en un silencio cómodo y tranquilo, aquella cálida temperatura en el ambiente, la buena comida, era perfecto para ambos.

Terminaron de comer y Colin miraba a Alexander, ¿qué me pasa?, se preguntaba a sí mismo, ¿por qué me cuesta pedir algo?

-Alex puedo...eh... ¿podemos acomodarnos como en mi antiguo hogar cuando dormimos juntos? –

-claro—es demasiado lindo y amable. No creí que fuera tan inocente...tan dulce, aun su voz me hipnotiza, su mirada... su cuerpo...b-bueno no voy a ... vamos, con suerte lo conozco solo quiero protegerlo y cuidarlo, darle todo lo que quiera y querrá, pensó mientras Colin se acomodaba en su regazo y una vez relajado, le acarició la cabeza.

-no sabía que ronroneabas...-dijo riendo y sólo recibió un quejido molesto por parte del albino.

Alexander observó ciertos canales de televisión, luego de unos minutos sin decidir qué programa era el menos aburrido, el sueño comenzó a ganar al aburrimiento, pero una canción empezó a sonar.

Clásico de película de terror, aquellas canciones infantiles antiguas... vaya quien podría escucharlas sin tener un mal presentimiento, pensó Alexander reposando su mano en la espalda del otro.

De repente sintió como Colin giraba su cabeza hacia el televisor.

- ¿sucede algo Coly? –

-la canción...la conozco, mi madre la cantaba...y en el laboratorio solía recordarla intentando no perder la cordura-dijo mirando la tele, perdiendo la concentración del mundo exterior y guiándola a sus propios recuerdos.

Alex se calló y empezó a escuchar el tarareo de la canción por parte del albino

- ¿te relaja? –

- ¿te asusta? –pregunto Colin con una sonrisa, lo abrazo deseando calmar la tensión que se apoderó de su torso y su vista quedo en la ventana por culpa de una luz que provenía de ahí.

Alexander no entendía por qué seguía mirando hacia atrás, deseando saber la respuesta dirigió también, la mirada hacia el mismo lugar era la ventana.

-el viernes saldremos a pasear por la ciudad ¿quieres? –

-eh...pero...mi aspecto –recordó asustado tocando su propio rostro, recordando la inseguridad que había desaparecido por un largo tiempo por Alexander.

- ¿te preocupa mucho? –

-n-no, bueno, un poco... – intentó mentir y decir que no, pero dejo salir la verdad, Alexander daba tanta seguridad para admitir sus temores.

-podría comprarte una peluca de color negro y unos lentes de contacto, así nadie te verá extraño – dijo alegremente pensando en lo lindo que se vería con esos colores y su tono natural de piel.

-...b-bien – susurro modesto.

-Coly ¿por qué te cuesta hablar? –

- ¿eh? No lo sé... – dijo asustado de mostrar el temor que sentía de las experiencias que deseaba Alexander para él.

-recuerda ya no estás sólo, yo te protegeré y te querré-

- ¿querer? –dijo mirando a la cara a Alexander, volvió a sonrojarse y se acomodó nuevamente a dormir, evitando seguir hablando, permitiendo a Alexander continuar viendo la película hasta su término, miro a Colin y lo tomo cuidadosamente para llevarlo a la cama, apagó las luces y se acostó a su lado con el cuidado de no molestar su descanso.

De repente Colin comenzó a moverse intentado sentir a Alexander, este notando sus intenciones se acercó y lo abrazo con cuidad de brindar libertad para que se acomodara por sí mismo.

-Alex... –

- ¿sí? –

- ¿qué fue lo que paso en la entrada? – Alexander lo miro confundido, sin saber cómo responder causando cierta preocupación en Colin quien busco su mirada y la fijo en sus ojos – Cuando entramos y nos acercamos eso... ¿cómo se llama? –

-pues... nos besamos – respondió incomodo por la fija mirada que tenía encima.

-ah "besar" es la palabra –

- ¿te gustó? –preguntó sin pensar, recibiendo el sonrojo de Colin, quien bajo la mirada hacia sus manos apoyadas en el pecho marcado del otro.

-s-sí –dijo con un hilo de voz –¿y a ti? –

-también me gustó- habló entablando un contacto visual nuevamente aunque él se mantenía con la mirada baja.

-Alex...-dijo Colin mirándolo cuando él lo tomo del mentón e intentó aguantar aquel deseo de volver a besar esos labios, pero Colin se acercó más terminando el espacio entre ellos, unieron sus labios, primero un roce y luego un jugueteo entre sus labios.

Fue minutos de besos placenteros para ambos, las manos de Alexander paseaban en la cintura de Colin y este jugaba con el pelo del otro, hasta que acabo el beso con satisfacción por esa noche, se separó y volvió a acomodarse en el pecho de Alexander, dio un bostezo y se empezó a dormir y Alexander por su parte también fue derrotado por el sueño.