Never Underestimate A Blonde «Muke»

Capítulo 21: Cuestionario

Miraba a mi amigo caminando de un lado a otro. Si no me golpeaba en tres segundos yo estaría sorprendido. Las sábanas estaban cubriendo mi cuerpo, que estaba vestido de la cabeza a los pies y me importaba muy poco estar ensuciando la ropa de cama.

—A ver—comenzó Calum, soltando resoplidos—, ¿me estás diciendo que terminaste con Luke porque lo ibas a lastimar?

Miré hacia el techo de mi habitación y fruncí los labios. Llevaba rato repitiendo la misma frase sin siquiera esperar a que yo le respondiera.

—Técnicamente nunca estuvimos juntos, así que no lo dejé—conseguí decir antes de que él comenzara a hablar de nuevo.

Calum paró de caminar y se acercó hasta mí. Con una mirada de reprobación tiró de las sábanas, destapando mi cuerpo, a lo que respondí con un quejido y un juramento. Arrollé mis piernas para darme algo de calor. En realidad no hacía frío, no estaba seguro de qué era lo que me pasaba.

—¡Michael!

—¡¿Qué?!

—¿Qué clase de película de quinta has visto?

Giré los ojos en sus órbitas y le di la espalda.

—No entenderías así que no sé porqué me gasté en contarte.

—¿Sabes porqué? Porque Luke desapareció de la faz de la Tierra: no responde mensajes, llamadas, ni siquiera las señales de humo. Y, ¿qué pudo haber pasado?

—No empieces —ordené.

Sin embargo Calum hizo caso omiso.

—Seguro Michael se mandó una de las suyas, como siempre. Parece que eres fanático de lastimar a Luke, como él...

—¡Cállate!—grité, ahora sí levantándome de la cama y mirando a Calum con molestia—¡¿No te has puesto a pensar en que tal vez a mí también me lastima, o que no sé cómo hacer que pare, o que tal vez estoy tan malditamente enamorado de él que no podría perdonarme hacerle más daño del que ya le he hecho?! ¡Cierra la boca si no sabes, Calum!

—Michael...

—Te entiendo—lo interrumpí, respirando entrecortadamente—. Luke puede verse como el más frágil, pero te aseguro de que es mucho más fuerte de lo que parece. Créeme, estará bien sin mí, mejor incluso.

Nos miramos en silencio por un rato. Se veía como si Calum quisiera hacer algo, arrepentido, yo estaba molesto. No con él o con Luke, simplemente molesto. Cansado de que todo siempre tuviera que ser tan complicado. De haberme enamorado de mi mejor amigo, de ser la causa -o la posible causa- de la destrucción de nuestra amistad, de no poder respirar normalmente si él estaba a mi lado, pero tener aún más dificultad para hacerlo si él no lo estaba.

Me mordí el labio para no ponerme a llorar y volví a sentarme en la cama. Calum seguía parado allí, como un ciervo bajo la luz de un cazador.

—Lo siento—murmuró.

—Está bien.

Pensé que él tal vez iba a decir algo pero sonó el timbre de mi casa y él salió disparado fuera de mi habitación, como si yo fuera capaz de hacerle algo. Escuché la puerta, voces y luego pasos. Mi mirada aún estaba en el piso, jugaba inconscientemente con el dobladillo de mi remera de My chemical romance.

Entraron personas a mi cuarto, en silencio, no sabía quiénes eran porque aún no me atrevía a separar la vista del suelo.

—Mike...

Miré hacia arriba hasta encontrarme con los ojos de Ashton. A esa altura podía considerarlo mi psicólogo personal, siempre hacía lo que yo necesitaba.