Never Underestimate A Blonde «Muke»

Capítulo 6: Ideas

Luke continuó juntándose con Calum  y, por consiguiente, conmigo. Me molestaba mucho algunas veces, pero supongo que ambos lo llevábamos bien. Él podía tener actitudes de niña y luego se convertía en una persona muy madura, era enfermizamente desconcertante.

En ocasiones me salía decirle algo hiriente, al principio solo generaba incomodidad, pero luego el rubio se lo tomaba a la ligera, negaba con la cabeza, sonreía y le quitaba importancia. Eso ayudó bastante en nuestra relación, si él fuera una persona con poca paciencia me hubiera quitado los dientes de un puñetazo. Lo acepto, soy un pedazo de idiota, pero supongo que algo bueno debía de tener, sino todos me hubieran mandado a freír papas en los suburbios del barrio negro en china (seguramente Calum sabía sobre ello).

Pasaron meses y con ellos nosotros crecimos hasta el punto de que ya podíamos estar solos en algún lugar sin que fuera una situación incómoda. Hablábamos con soltura y hasta íbamos juntos a las clases en que ambos estábamos.

Luke llegaba a ser algo pegajoso algunas veces y podía a hartarme, pero me había acostumbrado a Calum y él también era así muchas veces.

Llegando al final del año ya eramos muy cercanos. Nos juntábamos incluso cuando Calum no estaba con nosotros. Por alguna razón mi mejor amigo encontraba esto de lo más emocionante.

Seguía sin entender la incoherencia de odiarlo, pero por momentos lo hacía de nuevo. Eran como oleadas de enojo que me llegaban en banda y tenía que soltarlas.

Ese día nos habíamos juntado Calum, Luke y yo a mirar una película en mi casa. Los tres estábamos en mi cama, ya que era el lugar más cómodo y espacioso para estar.

Yo estaba en un lado, luego estaba Luke y luego Calum. Este último no estaba prestando mucha atención a nada de lo que pasaba a su alrededor, estaba mandándose mensajes con alguien. No salía más con Tory, ya saben "tetas grandes, poco cerebro". Luke estaba en uno de sus días de mimoso y estaba acostado boca arriba con una pierna sobre las mías y otra sobre las de Calum. Sentía su mano acariciar el cabello del costado de mi cabeza (lo hacía muy seguido y cuando yo le decía que parara me respondía que no, que mi cabello era muy suavecito).

La película que estábamos viendo era Soy Leyenda. Los tres compartíamos el gusto por Will Smith.

—Mierda, Calum, para con eso—ordené.

Calum molestaba con la luz de su celular ya que habíamos apagado la luz de mi habitación para poder ver bien la televisión.

—No jodas—respondió.

Sentí la mano de Luke salir de mi cabello y noté como su cuerpo se acercó al otro chico, su cara fue hasta el hombro de Calum para leer los mensajes que se mandaban.

—Vamos—comentó el rubio— ¿sexo por mensaje?

Calum rió y apartó un poco el celular. Luke se recostó más sobre él para seguir leyendo, pero Calum alejó más su celular.

—Hey—dijo Luke— ¿por qué hueles tan bien, Calum?

—¿Lo hago?

—Si.

—Gracias, hermano.

—¿Por qué hueles a mierda, Luke?—pregunté.

Nunca entendía cuando yo mismo hacía este tipo de cosas, eran momento en lo que la mente de me descolocaba. No es que me quejara al respecto, tampoco. Cuando mi mente se descolocaba podía llegar a ser muy ingeniosa.

Calum se rió y se apartó aún más de Luke. Este último se dio la vuelta y acercó su rostro al mío. Estuvo así unos segundos mientras yo miraba la película.

—¿Mikey quiere llorar?—preguntó con una voz extraña.

—No.

Calum soltó un gruñido y se levantó de la cama hasta ir al baño. Si realmente estaba teniendo sexo por mensajes con alguna chica yo no quería ni pensar que era lo que iba a hacer allí.

—Si, Mikey quiere llorar.

—No quiero  llorar, Luke, no jodas.

De acuerdo, sí quería llorar, pero era porque en esa parte de la película sucedía algo muy malo con la perra, Sam, y realmente me hacía poner triste.

—A veces eres como una nena histérica—soltó Luke, volviéndose a acostar boca arriba.

—A veces eres como un grano en el culo—repuse.

Continuamos mirando la película en silencio, Calum seguía dentro del baño. Pensé que tal vez se escucharía algo, pero desde allí solo provenía silencio.

En la película [alerta de spoiler si no viste Soy Leyenda] se murió la perra, es más se vio ante la necesidad de matarla él mismo. Aparté la mirada de la televisión porque no quería ponerme a llorar ahí mismo junto a Luke. Sin embargo éste pareció notar que yo estaba lidiando con mi sentimentalidad y estiró una mano para acariciar mi cabello, justo como lo hacía siempre.

Su gesto me hizo sentir un poco mejor, sin embargo me molestó que eso sucediera.

—¿Quieres un abrazo?—preguntó mirando hacia mí.

—No—respondí tajante y sin mirarlo.

—Sabes que si—agregó Luke levantándose animadamente. Siempre estaba animado, era bastante molesto.

Su cara estaba más arriba de mí, arrugando la nariz en un gesto que encontré sumamente tierno.
Entonces me vino una idea. Podía llegar a ser la razón por la cual yo lo odiaba tanto. Era en momentos determinados en que saltaba mi odio hacia él, pero recién en ese momento me di cuenta por qué. ¿Saben qué pasó? Exacto, tiré mi odio hacia él. 

—Cierra la boca, Luke. 

El chico acarició otra vez mi cabello y la sensación volvió a generar que tirara mi mierda hacia todos lados. 

—¡No me toques, carajo!—empujé al rubio desde el pecho, haciendo que el cayera a mi lado, rebotando en el colchón—. No me toques.

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Resulta que vino la inspiración, me dio una cachetada y se fue... Creando un capítulo del trasero :)

Anyways... Gracias por leer :)
-Abby