Two worlds collide

2°T- Epilogo

Narra Leah:

*años después*

Estaba demasiado cansada. La luz de la portátil ya provocaba que mis ojos tuvieran una leve molestia pero estaba en el final. Faltaba pocos minutos para que pudiera hacer clic en imprimir y la historia estuviera en físico. Lista para la editorial.

-¿Mucho trabajo, cariño?- levante mi cabeza encontrandome a mi marido. Me miraba lleno de dulzura mientras me pasaba una taza de café.

-Lo he terminado.- comente mientras lo veía sentarse frente a mi.

-¿En serio?

-Si, estoy esperando que Ann...- el móvil en mi mano sonó y solo pude sonreír.- Ahí esta.- atendi el teléfono y lo lleve a mi oreja.- Gemela, ¿donde estas?

-Esperando que me abras la puerta de tu casa.- la escuche decir, divertida de la situación.

-Debe estar sin seguro así que pasa, ¿haz venido con Ethan y el pequeño John?- la puerta de mi despacho se abrió y la vi entrar con su pequeño bebé en brazos. A su lado estaba Ethan, con el bolso del bebé colgado en su hombro.

-Hola, gemela.- saludo mi hermana con una sonrisa mientras colgaba el teléfono.

No tarde en colocarme de pie y tomar a mi sobrino en mis brazos.

-Hola.- sonreí mientras el pequeño se acomodaba contra mi pecho. - Ethan, ¿hace cuanto regresaste?

-Los partidos terminaron hoy así que no demore en tomar el primer vuelo a casa.- dijo con una sonrisa mientras se sentaba en el sofá. Por su lado mi gemela fue directo a la portátil.

-Ya haz hecho tu parte. Es un récord de las gemelas Evans.- dijo con una pequeña sonrisa.- ¿Haz mandado la copia a la editorial?

-Esperaba ver si quieres agregar algo mas.- la vi escribir un par de párrafos con rapidez. Era muy fluida en eso.

Minutos después sonrió mientras salia la copia de la impresora.

-Ya lo he mandado y...- un correo llego a la cuenta de las gemelas Evans.- Oh, dicen que tendrán las primeras copias dentro de 3 días.

-Eso suena bien.- respondí.- ¿Mañana tenemos algún evento?

-Si, firma de libros.- la vi revolver en su bolso y sacar un folleto.- ¿Llevaras a Tay?

Tay era mi pequeña niña de tan solo 3 años. Hasta consideraba un milagro que estuviera durmiendo.

-Yo puedo cuidarlos mientras firman los libros.- se ofreció Ethan.- Me mantendré cerca por si acaso.

-Estoy orgullosa de esto.- dije con una sonrisa.- Estoy agotada pero es nuestro segundo libro y hemos resumido de la mejor forma nuestra vida.

-Oh vamos, cielo, Two Worlds Collide cuenta solo una cuarta parte de todo esto.- escuche decir a Cameron- Ustedes tienen mucho que contar aun.

-El tiene razón pero me he puesto a leer el primer libro durante el viaje.- Agrego mi cuñado.- Y no me canso de ver todo lo que hemos pasado. En serio, ¿por que nadie me pago por idiota? A esta altura ya seria millonario.

Mi hermana sonrió mientras se sentaba a su lado y dejaba que Ethan la abrazara.

-Todos seríamos millonarios.

-Escucha, Nate me dio esto hoy.- busque en mi escritorio y cuando di la tarjeta no demore en dársela- Se casa en 2 meses.

-Ya era hora.- la vi leer la tarjeta y minutos después guardarla en su bolso.

Sentí un olor extraño así que no demore en revisar el pañal de el pequeño John, vi que estaba cargado así que reí y señale a Ethan .

-Te toca cambiar a tu hijo.- hizo una mueca pero de todas formas se coloco de pie y tomo al niño.

-¿Cameron?

-Agh, vamos. No puede ser tan malo.- ambos salieron del despacho. Se necesitaban dos Collins para cambiar un pañal.

-Ellos son geniales.- me deje caer al lado de Ann una vez que tome el libro.

-Lo son. ¿Crees que mas adelante escribamos mas de Two Worlds Collide?

-Jamas se sabe con nosotras, Leah. El dúo Evans puede regresar al ataque cualquier día y la humanidad no estaría lista de todas formas.- me reí levemente mientras iba hasta lo ultimo que había escrito Ann.

"Este libro, al igual que el primer tomo, lo hemos escrito mi dulce gemela. En este libro hemos dejado lo mas importante de nuestra vida. Hemos dejado que te colocaras en nuestro lugar y sintieras lo que nosotras sentimos. Muchas veces en esta vida te tocara pasar por cosas duras. Nosotras lo sabemos. Cada vez que miro a mi pasado, me siento orgullosa de haberme mantenido de pie por que sin eso no sería quien soy hoy. A lo largo del libro me han visto, nos han visto mejor dicho, dudar de quienes eramos.

Hoy te diré que somos dos mujeres que han encontrado su lugar en el mundo y ese lugar siempre sera junto a nuestra familia.

Llora, grita, lucha y ama como nunca. No te prives de ninguna emoción por que en esta vida, querido lector, todo merece ser sentido.

Tu perra favorita, alias: Ann Evans."

Sonreí mientras cerraba el libro.

Tal vez estaba cerrando ese libro pero eso no significaba que no iría por el siguiente.

Las gemelas Evans siempre podían ir por mas.

Esto es lo que sucede cuando dos mundos chocan.