El Secreto De Mis Ojos

Cap. 21 Un Nuevo Aliado

Sam se despertó, sobresaltada. Otra vez aquella maldita pesadilla.
Se estaba volviendo loca.
No sabía en que día vivía, solo se podía guiar para saber la hora por cuando les traían la comida, si a eso se le podía llamar comida.
Aquel día fue diferente.
Minutos, o tal vez horas, quien sabe, después de que se despertara unos hombres entraron y se la llevaron.
Estaba tan débil que la llevaban con los pies arrastrando por el suelo.
La llevaron a una gran sala, con una especie de obstáculos, y por fin le quitaron las esposas.
Le dolían las manos de tenerlas metidas en esas esposas.
De repente unos grandes focos se encendieron, cegándola y obligándola a poner su mano delante de sus ojos.
-Buenos días, Samantha.- sonó la voz de Jolene a través de unos altavoces.- Veamos de que eres capaz.
-Entrenamiento número uno, sujeto: Samantha Wells, elemento principal: fuego, hora 7:00 am. Comenzando prueba.- concluyó una voz mecánica.
Una sirena sonó y apareció un robot en frente de Sam.
Esta lo miró, confundida y antes de que pudiera hacer nada el pequeño robot sacó un cañón y le disparó un rayo que pasó a milímetros de su oreja gracias a que la movió mínimamente a un lado.
Levantó rápidamente su brazo y disparó, haciendo que el pequeño robot saltara en pedazos.
-Prueba uno superada. Comenzando prueba dos.- rezó la misma voz de antes.
Aparecieron cinco robots como el anterior y a Sam le costó un poco más acabar con ellos incluso uno de los rayos la alcanzó, haciéndole un arañazo que se cubrió de hielo, su punto débil.
Solo esperaba que eso no durara demasiado, no aguantaría mucho más.
Noah se desperezó en el sofá de la guarida que aunque parecía destartalado era realmente cómodo.
Miró la hora, las 7:00 am.
Su primer pensamiento fue dirigido a Sam. «Tranquila, hoy te sacaremos de ahí» pensó.
Se aseó como pudo y fue a buscar algo de desayunar.
Se encontró allí ya a Fetch y a Lewis.
-Buenos días, dormilón.
-¿Dormilón? ¡Si son las 7 de la mañana!
-Fetch y yo nos hemos levantado a las 5 para prepararlo todo, nos vamos ya. ¿Estás preparado?
-¿Bromeas? Nací preparado.
-Vamos pues.
Noah y Lewis se colocaron en su posición y oyeron a Fetch gritar.
-¡Jolene! ¡Aquí me tienes! ¡Ven a por mi!
Tras decir esto salió corriendo a la velocidad de la luz dejando una estela rosa y morada.
-¡Hora de entrar a la acción!- dijo Lewis.- Vigila bien, y ya sabes, si ves algo...- Noah alzó un walkie-talkie.- Exacto.
Lewis se introdujo por el estrecho conducto con una facilidad que sorprendió a Noah, este se sentó en el suelo, mirando a los lados.
Levantó el walkie-talkie hasta su boca.
-¿Fetch? ¿Todo bien?
-Noah...- se oía un fuerte viento se fondo.- No creo que sea el mejor momento para hablar... Pero si, todo bien.
-Perfecto.
Sam caía al suelo, derribada por un disparo que la había alcanzado el pecho, la escarcha se extendía por su piel, llegando hasta la parte superior de su ombligo, la barrera que protegía sus órganos vitales había caído hace rato y estaba rodeada por treinta robots, la prueba número siete, el número mágico.
Los robots estaban preparando un ataque conjunto que sin duda la mataría.
Cerró los ojos, por fin acabaría todo.
-¡Alto!- gritó Jolene por un altavoz.-¡Llevadla a la enfermería!
Los robots se retiraron. Un hombre entró y la cogió en volandas, haciendo que Sam soltara un quejido de dolor. Se desmayó.
Se despertó temblando, con los labios morados, abrió los ojos, estaba en una camilla, había una chica de espaldas a ella, mirando una carpeta.
Intentó levantarse en vano, el pecho le ardía, al mirarlo vio que estaba desnuda de cintura para arriba y tenía el pecho cubierto de una fina capa de hielo con un agujero redondo del diámetro de un pulgar justo en el esternón, a través del hielo se veía el hueso.
-Vaya, estás despierta por lo que veo.- dijo la chica dándose la vuelta hacia Sam. Puso una mueca de disgusto.- Uf, eso te tiene que estar quemando como un demonio. Tranquila, yo te echaré una mano. Mira.- cogió una bolsa que contenía un suero color naranja.- Esto debería ayudarte a que te recuperes más rápido Sam.
Pasaron unos quince minutos hasta que la capa de hielo se retiró por completo.
-¿Qué... Qué lleva el suero...?- preguntó Sam con dificultad.
-Un componente químico que con ayuda de tu organismo ha conseguido aumentar tu temperatura corporal a la normal para ti y gracias a eso el hielo se ha derretido, ahora debería encargarme de este boquete que tienes en mitad del pecho.
Sam asintió.
La mujer se puso manos a la obra. Limpió la zona, examinando los daños.
-Tienes suerte, solo hace falta coserlo. Por cierto, mi nombre es Juliet.
Oyeron un arma cargándose.
-Aléjate de ella. Ahora.- Sam reconoció la voz.
Juliet se quedó inmóvil.
-No deberías hacer esto.
Lewis rió.
-¿Por qué?
Juliet señaló un panel de la pared.
-Ahí hay una cámara de vigilancia, aunque no es capaz de captar el sonido los guardias te verán dentro de poco, pronto saltarán las alarmas del complejo y antes de que te quieras dar cuenta tendrás a diez hombres encima y tu intento por sacar a Samantha de aquí habrá sido en vano. Si me dejas yo sé como apagarla. No apartará mucho tiempo las miradas de aquí pero seguramente sea suficiente para que los dos salgáis de aquí con vida.
Lewis bajó la pistola.
-Hazlo, rápido.
Juliet tocó una secuencia de paneles contiguos al de la cámara.
-Listo, antes de que te la lleves déjame curarle la herida, por favor. No llegará muy lejos si no lo hago.
-De acuerdo, deprisa.- al ver el estado de Sam se dio la vuelta.- ¿Qué coño le ha hecho eso?
-Esos robots están programados para encontrar el punto débil de la persona a la que atacan. En este caso el hielo.
-¿Por qué nos ayudas?
-Porque no me parece bien lo que está haciendo Jolene. ¿Quien crees que ayudó a Fetch a escapar?
Se oyeron unas interferencias, Lewis se sacó el walkie-talkie del bolsillo del pantalón.
-Le... Han... Fetch... Salir... Ahora...- era la voz de Noah.
-¿Qué es eso?
-Es Noah, no logro entender lo que dice... ¿Noah? ¡Noah! ¿Qué ha pasado?
-Lewis. Han. Atrapado. A. Fetch. Sal. YA.- se oyó la voz entrecortada de Noah.
-Vete.- dijo Juliet.- Yo cuidaré de ella.
Lewis miró a Sam a los ojos. Se podía ver su miedo, Juliet había acabado de coserla y de vendarla y la había tapado con una sábana.
Le cogió la mano y se la apretó con fuerza, el gesto fue recíproco.
-Volveré a por ti. Te lo prometo.
Tras decir esto le dio un beso en el dorso de la mano que la tranquilizó un poco, la soltó y se marchó corriendo.
Minutos más tarde aparecieron los guardias en la enfermería.
-¡A donde a ido el intruso!
-¡Por ahí!- Juliet señaló un pasillo justo al contrario del que se había ido Lewis.
Se acercó a Sam.
-Lo siento, cielo. Pero no te preocupes, tus amigos son muy persistentes, conseguirán sacarte de aquí.
-No lo entiendo...- dijo Sam aun débilmente.- ¿Donde estaba Noah, por qué no estaba aquí?- una lágrima le rodó por la mejilla.
-Cariño, tranquila,- la consoló Juliet.- seguro que ha habido un motivo. Estoy segura de que ese chico...
-Noah.- dijo Sam.
-De que Noah no se habría quedado de brazos cruzados si no hubiese una razón justificada. Ahora descansa, lo necesitas.
-¿Como está Luke?
-Me he encargado personalmente de su cuidado médico y le han metido en otra celda más cómoda, como harán contigo.
-No lo entiendo, ¿por qué no lo matan? Quiero decir, no quiero que lo hagan, pero teniendo en cuenta la sangre fría de Jolene...
-Aun está con vida por si tus amigos logran salvarte.
-¿Qué?
-Si tus amigos te rescatan y por un casual no consiguen rescatarlo a él, Jolene tendrá un as emocional que sabe que te hará volver de nuevo, quizás esa vez con tus amigos de la mano y conseguir atraparos por fin.
-¿Qué tenemos de especiales?
-Bueno, es vuestro destino.
-¿Destino?
-Ya te lo contaré en otro momento, ahora descansa.
-De acuerdo...
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Está bien, sé que Noah no tiene mucha relevancia en este cap, pero bueno, me pareció bastante bien como se ha ido desarrollando igualmente jaja.
Escribo esto a día Sábado y por fin he escrito un capítulo un poco más extenso, supongo que ha sido por unas cosas personales que me han estado pasando últimamente que aunque creí que me iban a dificultar escribir este capítulo en realidad escribir ma ha ayudado a dejarlo un poco apartado a un lado y lo agradezco porque necesitaba un poco de descanso.
No es por chantajear emocionalmente pero probablemente los votos y comentarios de este capítulo me hagan especial ilusión y me suban un poquito la autoestima en general, porque debo agradecer muchas cosas a todos los que me leéis y me apoyáis, porque me hacéis sentir que valgo para esto y que de veras se me da bien escribir historias, os lo agradezco mucho en serio.
No me enrollo más ^^.
Ya sabéis comentad y votad toodo lo que queráis.
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