Hola, ¿conoces a Niall?

EPÍLOGO.

(Narra Blanca)

Una de las películas favoritas de Hazel siempre había sido Big deal. Niall y yo le habíamos comprado e DVD por su quinto cumpleaños, y siempre que tenía tiempo la veía, normalmente en casa de su mejor amiga Alison. Las protagonistas eran cuatro chicas que se peleaban mucho hasta que descubrieron el poder de la amistad y esas cosas. En realidad la película no era de la época de nuestra hija. Recuerdo que yo la vi por primera vez cuando tenía apenas 25 años, unos meses antes de que el irlandés me pidiese matrimonio. Pero al estar protagonizada por una de mis mejores amigas, Perrie, me pareció muy buena y por eso se la enseñé a mi hija, Hazel Horan. Aunque Niall la llamaba Doble H.

Después de que Little Mix firmasen el contrato con Disney, empezaron a grabar un Reality Show llamado Detrás de las cámaras, y al público infantil le gustaron tanto Jesy, Jade, Perrie y Leigh que se hicieron famosas mundialmente, y hasta grabaron la película. Así que, aunque las directioners seguían echando de menos a sus cinco chicos de las escaleras, Little Mix ocupaba ahora el título de todos los periódicos.

Demi, nuestra hija de dieciséis años, quería ser bailarina de mayor. Y justo ese día tenía entrenamiento de baile, así que no pudo asistir. Al principio iba a ser una cena familiar, pero al ver que Hazel prefería ver su película favorita y que su hermana mayor tenía otros planes, el hijo de Harry y Sarah no quería ir, por no quedarse solo. Se llamaba Michael, y era adorable. Vale, vale, tenía trece años. Pero en serio, era el chico más tierno que había conocido. Había salido pelirrojo, como su madre, con la cara repleta de pecas y unas gafas sobre el puente de la nariz. Se pasaba los días leyendo, sobretodo los clásicos de la literatura: Oliver Twist, Orgullo y prejuicio...

Una que sí asistiría a la merienda era Edith, que había heredado unos ojos color caramelo impresionantes, igualitos a los de su padre. El pelo era una mezcla entre el de Zayn y el de Perrie, un marrón claro; y su piel era oscura, haciendo que la niña pareciese india o algo parecido. Acababa de nacer hacía apenas dos meses, lo que hacía imposible que se pudiese quedar en casa sola.

Así que al final íbamos a ser once, contando a Eleanor y Louis, y a sus dos hijos gemelos, claro: Jared y Ed.

Aquellos enanos me recordaban a los niño perdidos de Peter Pan. No paraban de correr de un lado a otro, gritando, riendo, como si nunca se cansasen, totalmente libres.

-"Llegan tarde, llegan tarde..." Oí una voz detrás de mí.

-"Niall, relájate, estarán al llegar. Sarah nunca se perdería algo así. Le encantan las celebraciones de este tipo." Terminé de preparar los mini-sándwiches y los puse uno a uno en la bandeja, para luego llevarlos al jardín. Danielle estaría hambrienta; teniendo en cuenta que me había pedido la comida hacía diez minutos, estaría aquí en tres, dos...

-"¿Necesitas ayuda en la cocina? Oh, bonita pajarita, Niall." Comentó la chica viniendo hacia mí.

-"No especialmente, gracias. ¿Por qué?"

-"Como veo que estás tardando tanto..." Se sentó en la encimera a mi lado, dejando colgar sus pies, y cogió un sándwich. "Por cierto, ¿y los Styles?" Dijo masticando. Un resoplido con acento irlandés se oyó desde el pasillo.

-"Llevo preguntándomelo toda la tarde." Cogí la bandeja por los extremos y fui hacia la salida, pasando ante Niall antes de salir.

-"¿Por qué no vas a ver qué tal los niños?" Propuse. Mi marido hizo rodar sus ojos.

-"Solo quieres deshacerte de mí." Se quejó.

-"TE QUIERO." Grité. Danielle me siguió hasta la mesa de madera del gran jardín que tenía mi casa con Niall, cogiendo un mini-sándwich cada cinco segundos.

-"Están buenísimos." Dijo. "Tienes que darme la receta."

-"...pan y atún."

-"Me intentaré acordar." Y se alejó murmurando 'pan y atún, pan y atún...' para poder recordarlo. Reí y caminé hacia Louis, que, vestido de traje, se apoyaba en una valla con un vaso de cerveza en la mano.

-"Hey." Dije cuando estuve lo suficientementa cerca como para que me pudiese oír. "¿Qué pasa?"

-"Nada en especial. ¿Y tú?" Me apoyé a su lado y le cogí el vaso.

-"Tengo calor." Respondí tras darle un sorbo.

-"Pensé que no te gustaba la cerveza."

-"Y no me gusta." Dije eructando. "Perdón." Me ruboricé. "Pero tiene hielos, así que."

Jared apareció de repente, como salido de la nada.

-"Mamá dice que no puedes beber." Dijo con una voz aguda. Louis miró a Eleanor, que hablaba con Perrie en una mesa cercana. Las dos rieron y el chico gruñió.

-"Dile a mamá que Blanca también ha bebido y que no le ha dicho nada, y que eso es favoritismo." Solté una carcajada acompañada por Louis y el niño desapareció tan rápido como había llegado.

-"¿Tienes alguna idea de dónde puede estar Harry?" Probé.

-"Nop." Se masajeó la barbilla con los dedos, rodeada por una barba de dos días, y de repente fijó la vista al horizonte. "Espera, sí." Miré donde señalaban sus ojos.

Desde lejos, Sarah parecía ser más pequeña que su pelo, que salía sobre el paisaje como una melena al rededor su cabeza. Harry iba a su lado, parecido a un gigante en comparación con su esposa. Sonreí cuando los dos levantaron las manos para saludar.

Cuando se acercaron, los demás se unieron y al final acabamos separados en dos corros: chicas y chicos.

Perrie llevaba en brazos a Edith, que nos miraba a todas con unos ojos gigantescos, pero prácticamente no la hacíamos caso.

Buenas madres.

¿¡CONCIENCIA?! OMG, ¿ERES TÚ? HACÍA MUCHO QUE NO TE VEÍA POR AQUÍ.

Últimamente no me has dado mucho trabajo, ¿sabes?

Eso es bueno, supongo.

-"¿Blanca?"

-"¿Sí?"

-"Esta está sorda." Rió Sarah. "Eleanor te acaba de preguntar como quince veces que qué tal Hazel y Demi."

-"Oh." Sonreí. "Muy bien. Hazel está en casa de Alison y Demi en baile."

-"Ojalá hubiesen venido. Me habría gustado ver a mi ahijada." Suspiró Perrie.

-"Sigo guardándote rencor por eso, por cierto." Dijo Eleanor, seria.

-"¿Por qué?"

-"Blanca dijo claramente que yo sería la madrina de su segunda hija." Reí al recordarlo.

-"ES VERDAD." Dije entre carcajadas aparentemente contagiosas. "Oye, no te quejes, que te has quedado con Michael, y es un amor." Sarah pareció orgullosa ante mi comentario.

-"Eso, eso, por lo menos no te ha tocado uno de los hermanos demonio." Esbozó una mueca Danielle. Eleanor le dio un golpe.

-"OYE, EDDIE ES GENIAL." Se quejó, riendo.

-"¿Eddie? El mejor es Jared, obviamente." Presumió de su ahijado Sarah. "Siempre ha sido el más bueno de los dos."

-"Si estamos compitiendo de buenos, la aquí presente Edith." Dije yo, señalando a la hija de Perrie. Era su madrina.

-"Eso es porque aún no sabe hablar." Rió Danielle.

-"¡AHÍ LE HAS DADO!" Bromeó Sarah, chocando los cinco con ella. Puse los ojos en blanco con una carcajada.

Treinta años y seguíamos como cabras.

***

(Narra Niall)

Harry pasó su brazo por mi hombro y me dio un beso en la mejilla, que me limpié con cara de asco.

-"HARRY QUÉ HACES" Reí a la vez que los demás chicos.

-"Es que tus mejillas son tan blanquitas y blanditas." Explicó como si fuese lo más normal del mundo. Solté una carcajada y le di una patada en la espinilla.

-"Vuestra amistad me abruma." Bromeó Louis, aplaudiendo irónicamente.

-"Los tres sois idiotas." Soltó Liam de repente, con una sonrisa. "Yo y Zayn somos los que miramos, y vosotros los que hacéis gilipolleces." El nombrado le señaló riendo.

-"En eso tienes razón."

Eddie se asomó desde la espalda de su padre, ((quién sabe de dónde había salido)) para gritar 'NO SE DICEN PALABRAS FEAS' con una voz aguda e irritante, y luego irse de nuevo.

-"A veces tus hijos dan miedo." Dije a Louis.

-"A mí me lo dan siempre." Se encogió de hombros él.

Harry sacó su móvil del bolsillo y empezó a tocar la pantalla hasta que enfocó la cámara a mi cara.

-"NIALLSTAGRAM." Gritó, haciendo una foto. Reí y agarré su aparato. Acababa de subir una foto mía a Instagram.

-"DAME MI MÓVIL." Corrí con él en la mano, perseguido por Harry.

-"HARRYSTAGRAM." Reí, dándome la vuelta rápidamente para sacar una instantánea de mi amigo en movimiento. La publiqué con una carcajada.

-"ESO ES DEMASIADO, TODO EL MUNDO ESTÁ VIENDO ESA FOTO."

-"LA VENGANZA SE SIRVE FRÍA, STYLES." Seguí burlándome de él y corriendo, aunque estuviese cansado.

-"QUE NO ME LLAMES STYLES." De repente lo vi caer sobre mí y en unos segundos estábamos los dos tirados en la hierba, casi sin aire en los pulmones de reír. Agarró su iPhone y vio la foto que había hecho. "MUÉRETE." Hice una mueca y le enseñé el dedo del centro.

-"Vete a la mierda." Bromeé.

NO SE DICEN PALABRAS FEAS

Conciencia, puedes retirarte.



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Bueno, supongo que esto ya se ha acabado.

Muchas gracias a todos los que habéis leído mi fanfic, os quiero mucho mucho mucho.


Así que nada, gracias otra vez, y si necesitáis a alguien para hablar no dudéis en hablar conmigo, si queréis desahogaros o lo que sea, yo estoy ahí; os lo debo, lol.