1. Primeras impresiones

255 12 3
                                    

9 de Marzo

Hace ya mucho que me he incorporado a esta peculiar familia.

"Esa persona", conocido en el mundo como Tougo Sakamaki, un importante político en Japón, o también llamado Karlheinz. Me prometió un alojamiento, comida, y asistencia a una academia nocturna. Todo ello, gratis. Por qué una academia nocturna, te preguntarás, pues, no tengo ni la más mínima idea. Pero eso no era lo más extraño, sino el que todo eso fuera total y absolutamente gratis. Pensé que tuve suerte, o que se compadeció de mí... pero me engañó.

El lugar dónde me alojaría, sería una gran mansión, habitada por los hijos de "Esa persona", quien me ofreció esta "beca". No es, para nada, una familia normal y corriente, sino todo lo contrario. A parte de ser una familia con muchos miembros, unos seis en total y todos ellos hombres, de entre 16 y 20 años.

Ahora te contaré, mi primera impresión de los Sakamaki:

Cuando llegué a la mansión, parecía una de esas casas encantadas. Era como si estuviera totalmente vacía, no tenía vida. Fui a tocar la puerta, pero se abrieron ellas solas. Entré. Un escalofrió recorrió mi cuerpo según avanzaba por el pasillo, miraba nerviosa a todos lados, pero no se veía a nadie. Aun así, me sentía observada. Llegué al salón, dejé mi maleta a un lado, donde no estorbara, y al pasar mi mirada por la sala, vi a un chico sentado en uno de los sillones, con una taza de té en sus manos.

Este sujeto, es Sakamaki Reiji, el segundo hijo mayor.

- B-buenas tardes. S-siento haber irrumpido así en la casa..., sin llamar..., pero... - decía yo, nerviosa.

- Al menos es usted educada - me miró de arriba abajo - Pero no deja de ser una mujer bastante corriente.

Su forma de hablar es demasiado formal para mi gusto, y tampoco le tiene mucho respeto a la gente, en general.

- Será todo lo educada que tú quieras... - dio un bostezo - pero, ¡deja de tartamudear! Es molesto.

Me di la vuelta para conocer al dueño de esa voz. Sakamaki Shu, el hijo mayor. Un tipo que lleva siempre unos auriculares puestos, y que hace el vago durante todo el día.

- Claro, discúlpame - le dije haciendo una reverencia.

Sabes que no suelo disculparme, y mucho menos hacer reverencias, pero he de decirte que me dan algo de miedo. Y aún no había conocido a todos los miembros de la familia.

Al incorporarme, sentí alguien detrás de mí. Cuando me giré, un chico lamió una de mis mejillas, espantándome. Por el otro lado se repitió lo mismo, pero con otro chico. Y de frente, otro más agarró mi barbilla bruscamente, obligándome a mirarle a los ojos. Estos son los trillizos Sakamaki: Raito, Kanato y Ayato. En ese orden, del más mayor al más pequeño. Estos tres hermanos son unos sádicos, y en ocasiones comparten la presa, es decir, a mí. Aunque Ayato, es quien tiene complejo de superioridad; es muy arrogante, tanto como para hacerse llamar "Ore-sama".

En total, de todos los que he hablado, son cinco, así que sólo me queda hablarte del más pequeño de ellos. Sakamaki Subaru.

Su entrada fue la que más me impresionó. De la nada, apareció, golpeó la pared, tan fuerte, que hizo un agujero en esta. Sé que parece violento, y lo es, y tiene mal temperamento, pero es el "bueno" de la familia.

***

(Sí. Seguro que te cuesta creerlo, o tal vez estés pensando que estar aquí me ha vuelto loca.... No andas mal encaminado. Pero si los conocieras en persona, entenderías porque digo estas cosas.)

Bite My Freedom (Fanfic Diabolik Lovers)Where stories live. Discover now