Fue así como pasó...

¡Ay mamá!

Después de una muy muy muy larga y extraña despedida en la entrada de mi casa, Eduardo se fue de mi casa...  ¿En qué quedamos? Bueno...

-¿Estas hablando enserio? -Mi cerebro se hizo agua.

-¿Crees que bromearía con eso? -Tomó mi cintura y me dio un corto beso en los labios.

-Bueno qué esperas que piense, hace un día eras mi mejor amigo y hoy ya somos... ¿Qué somos?

-Yo... Señor White, qué gusto volverlo a ver -La figura paterna de mi vida pareció por la puerta muy enojado, ambos se dieron un apretón de manos. Mi papá apoyó su mano en mi hombro y Eduardo bajó una grada algo asustado.

-Buenas Noches joven Levi. Qué gusto verlo por acá, en otro país -Mi papá hizo una mueca.

-Sí señor, vine de visita a ver a Miley- Me guiñó un ojo,papá frunció un ceño, yo me sonrojé.

-Interesante... Creo que ya es hora de la despedida chicos, los veo adentro -Me dio un beso la cabeza y entró a la casa. Eduardo subió un escalón y me abrazó.

-Ya es hora de irme, sino tu papá va a matarme... ¿Estaremos en contacto sí? Lo que pasó hoy fue algo maravilloso, que no pensé que pasaría- Acarició mi mejilla.

-Yo tampoco lo pensé... -Le di un corto pero vigoroso beso en los labios.

-Miley, no sé qué será de nosotros mañana, pero por favor no te olvides de mí... ¿Ya hablaremos más adelante de todo? Algún día... -Suspiró.

Espera, espera ¿ALGÚN DÍA?¿PERDÓN?

-¿Qué fue l... -No pude decir más, sus labios atacaron los míos de una forma algo violenta y necesitada, sus manos dieron un recorrido por mi espalda... Nos separamos muy rápido para mi gusto.. Me oí protestar. El soltó una risita.

-Chau Miley.

-Chau...

Eduardo me dio un último abrazo antes de subirse a su carro y perderse por la carretera. El frío me obligó a entrar a la casa y encontrarme con mis padres serios y molestos mirándome fijamente.

-Miley, cuando les di permiso para salir, no esperaba que se fueran hasta no sé donde y regresen a las casi nueve de la noche. 

-Mamá son las ocho y media, no las nueve. Además solo fuimos al mall... 

-¿Qué cosa? -Esa era la voz de mi padre- Miley, yo no tengo inconvenientes con que salgas, pero por favor, ahora no. Acabamos de llegar a un nuevo país, hija, recién estamos conociendo todo. A ver dime, qué hubiera pasado si se perdían o algo parecido... Organiza tus salidas para más adelante.

-Está bien papá, ¿puedo subir a mi habitación ahora sí?

-¿No vas a cenar? -Dijo yendo a la cocina.

-No ya comí, buenas noches. 

-Buenas noches, hija.

-Miley, espera, vamos un ratito a tu cuarto quiero conversar contigo -Esa era mi madre.

Mi mamá y yo subimos a mi dormitorio para conversar de... ¿de qué? Entramos y ella cerró la puerta.

-Terroncito de azúcar, dime una cosa, pero sé sincera- Nos sentamos al borde de mi cama- ¿Qué pasó hoy con Eduardo?

-¿Miley?¿ Corazón? -Sacudió su mano en mi cara -¿No tienes algo que contarme?

-No mamá, y...yo..noa...no.

-Estas tartamudeando...Recuerdas cuando eras pequeña, siempre lo hacías cuando mentías, eso lo heredaste de tu padre- Rodó los ojos.

-Mamá yo... 

-¡Los vi de la ventana! -Dijo finalmente- Lo siento, pero cuando tu papá me dijo que estaban lo dos afuera, no pude aguantarme. Además, tus labios están más hinchados que de costumbre... 

Toqué mis labios al instante y sí, los sentí algo grandes.

-Está bien mamá, lo diré, nos besamos y se declaró.

Sus ojos se abrieron como platos -¡LO SABÍAAA! ¡Cuéntame los detalles!

Oh vaya, tenía que contarle a mi madre mi vida amorosa, genial.