Desayuno con celos- Parte 2

1.2K 48 2
                                    

Nuestros labios se unieron por unos segundos. Segundos en los que yo no reaccioné ni me moví, solo sentí a las mariposas que Eduardo había matado, renacer.

-¿Qué rayos te pasaaaa?- Grité horrorizada mientras lo  separaba empujando sus brazos.

-Lo lamento, yo... -Spencer evitaba hacer contacto visual conmigo.

-¿Tú qué Spencer? Sabes que tengo algo con Eduardo, aún no estoy segura de qué, pero no puedo andar besando a quién quiera- Todos los del restaurante, el viejito y una camarera, voltearon a vernos.

-Lo lamento... Quería un beso tuyo- Recién sus ojos chocaron con los míos. Su mirada notaba tristeza y arrepentimiento. Ahora yo me sentía mal.

Suspiré- Yo también lo siento, no debí gritarte. Solo quiero que entiendas, que en este momento, no me siento lista para iniciar algo con alguien más. No termino de entender qué está pasando con Eduardo... No quisiera hacerte daño.

-Te entiendo Miley, no volverá a pasar. Creo que ya es hora de irnos... ¡La cuenta!- Lucía confundido y algo triste. ¿Cometí un error al rechazar el beso?... ¿Por qué estoy dudando? -Vamonos que se hace tarde para que regreses a tu casa. 

-No.

-¿No?

-No- ¿Qué rayos me pasa? MILEY PIENSA CON EL CEREBRO, NO CON LAS HORMONAS.

-¿A qué te refieres?- Levantó una ceja.

-¿Por qué me besaste?- Pequeño detalle.

Vi como sus ojos dudaban para responder, como si estuviera trabajando las ideas que iban a salir de su boca- ¿Por qué?.. Porque quería ver si lo que los médicos dicen es cierto...

-¿De qué hablas?- Este chico ya quemó.

-Los médicos dicen, y dicen con razón, que un beso en la boca va directo al corazón. Y cuando mis labios tocaron los tuyos, por tres segundos, sentí como todos los dolores de mi cuerpo se iban y como, cada uno de mis pensamientos se perdían. ¡Y solo fue un beso de tres segundos! ¿Te imaginas lo que pasaría con uno más largo? -Sus palabras hicieron que me sonrojara. Quise hablar, pero él continuo deleitándome- ¿Qué es un beso? ¿Y tú me lo preguntas? Es tan difícil la pregunta que no puedo contestar... pon tus labios en los míos y sabrás lo que es besar. Yo sé que no soy el chico más guapo del mundo, tampoco soy el más el inteligente, pero  si no quieres que sea el  príncipe de tu cuentos, por lo menos déjame ser el sapo de tus besos- Ahora sí caigo rendida a tus pies... ¡Hazme tuya, mi amor! NO MILEY NO- ¿Qué te pareció mi soliloquio?

Palabras como esas hacen que todo mi sistema se altera de una manera impresionante. Antes que de que respondiera llegó un mensaje de Eduardo. Lo leí antes de todo, decía:

-Te amo, bebé. Lamento todo lo que dije, pero me vuelvo loco al pensar de que estarás con otro que no sea yo. 

*

*

*

-Spencer, quiero un mañana para nosotros. 








Fue así como pasó...Where stories live. Discover now