capitulo 5

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El miercoles despues del colegio, fuimos a casa para cambiarme como era costumbre.

Habiamos acordado ir al lago, estuvimos nadando por más de una hora Ian y jasper hacían carreras nadando de orilla a orilla,

Yo me senté bajo la sombra de un árbol frondoso, el movimiento del mismo hacía que los rayos del sol me iluminaran por momentos.

Me divertía observando a los chicos haciendo bobadas.

Alex soltó un grito, Jaide lo había lanzado al lago sin que éste se percatara Y el estupido de Jaide se soltó riendo como idiota.

Me levanté y tomé mi patineta, se me ocurrió lanzarme de la rampa que ya anteriormente habíamos puesto, miré de reojo a los chicos, a un costado estaba Jesse, no lo había visto llegar.

Jesse es el mejor amigo de Jaide,  no sé qué ocurre con él, sé que no soy santo de su devoción pero sus miradas que él me lanzaba no sé describirlas, eran frías e intimidantes, aunque no sé el motivo.

Nunca hemos cruzado palabra y no recuerdo haberle dado ningún motivo para que me odie.

Realmente no me importa pero me siento incómoda cuando estás cerca de mí,

Es como si estuviera observando cada movimiento mío, y cada vez que hablo me acosa con su mirada, Tal vez sólo estoy exagerando, no lo sé. Creo que a veces soy muy dramática.

Decidí que no me importaba, tomé mi patineta y me lancé por él aire ayudada por la rampa.

Todo lo demás sucedió muy rápido, Miré a lo lejos y estaba Jesse pero no me miraba a mí, su mirada estaba en otro lado.

No me di cuenta que por voltear a mirarlo mi patineta se atoró en la orilla de la rampa, a su vez dio un giro y fue a dar a mi nuca.

No sé cómo pasó pero me dio tan fuerte que me sacó un grito de dolor al tiempo que caí al agua, Pero para ese momento ya no sabia nada porque mi vista se fue nublando poco a poco.

No supe si miré bien antes de que mi vista se nublara por completo dentro del agua, pero estoy casi segura que un rubio con uno largos y blancos brazos jalaron De mí,

— ¿Alex estás bien? ¿Me escuchas? — escuché decir a Álex, su voz se escuchaba lejos, como si estuviera dentro de una botella.

No sé Después de cuánto tiempo desperté, creí que me estaba ahogando, no lo sé decir con seguridad, pero ahí estaba.

Desperté con 5 pares de ojos mirándome, no sabía cuál de ellos me miraba más asustado.

Yo los miraba igual de blancos a todos, Aunque Jesse me seguía mirando fríamente, aún así su piel estaba más que Blanca.

Estaba escupiendo agua por la boca, Así que si, al parecer sí me estaba ahogando,

Quise preguntar qué era lo que había ocurrido pero no salió nada de mis labios, Sólo un poco mas de agua.

Tal vez Alex me había dado respiración de boca a boca. Así que cuando por fin pude hablar le di las gracias pero recibí de él sólo una media sonrisa, lo miré angustiada por su manera de sonreírme pero el amplió su sonrisa, demostrándome que no estaba molesto.

Tan pronto como me pude recuperar me puse de pie, me sentía incómoda con tantos tipos a mi alrededor.

Lo primero que se me ocurrió fue preguntar por mi patineta, eso les resultó gracioso Porque todos soltaron una carcajada al unísono.

Los malditos mocosos se estaban burlando de mí y a mí me preocupaba mi patineta.

pues sin ella yo no podría rampear, lo que me recordó. Jalé a Alex de su camiseta y le supliqué que no le contara nada sobre el incidente a mamá.

Estaba casi segura que si se enteraba mi madre, ya no me dejaría Volver al lago,

Al principio Alex me miró preocupado y se mostraba renuente pero le insistí que por favor no lo hiciera.

No me molestaba rogarle a Alex, él era como mi hermano y conociendole sabía que iba a caer ante mis súplicas, era muy predecible.

Casi de inmediato nos fuimos a casa ya que los chicos después del susto no quisieron seguir en el lago, habían decidido que era mejor ir a descansar,

lo sé, les acababa de arruinar la tarde.

— ¿segura que estas bien? — me preguntó Jasper todavia señudo y preocupado

— si — le aseguré.

Aunque todos me inspeccionaban cuando respondí

Por primera vez me sentí avergonzada. Alex siempre se preocupaba por mí, pero era extraño ver tantos amigos preocuparse,

Miré sin ningun motivo a todos y todos sonreían menos Jaide y Jesse, tal vez porque acababa de arruinar la tarde. Eso me hizo sentir mal.

Alex y yo fuimos directamente a casa, le había prometido la cena si no abria la boca para contar lo sucedido.

cuando llegamos a casa, papá estaba ahí y nos dio la bienvenida.

Hace 3 días que no lo miraba, me daba gusto cuando lo miraba pues le agradaba contar chistes y nos hace la cena muy agradable.

Nos contó cómo le había ido en su último viaje, lo nuevo que le había parecido el pueblo al que hace mucho no iba.

Papá siempre nos contaba cosas nuevas de cada viaje, tenía una agencia de viajes y a veces tenía que trasladarse algunos lugares para adquirir nuevas promociones con hoteles y lugares de turismo.

Cuando terminamos de cenar Alex se despidió de papá y de mi madre que no dejaba de insistir que nos acompañará al viaje que ellos acaban de planear.

Alex le dijo que lo pensaría y pediría permiso, lo acompañe hasta la puerta,

Traté de preguntarle que había hablado con Sofi en el centro comercial el sábado pasado, pero preferí guardar silencio, no iba a cuestionar nada si no salía de ellos contarme.

Volví a darle las gracias por lo que había pasado en el lago ; pero volvió a ampliar una sonrisa socarrona y se alejó sin decirme nada. ¿estaba incomodo y no quería hablar sobre el asunto?

Subí a mi habitación, aún tenía mucha tarea por terminar, odiaba los resúmenes y a los maestros les encanta torturar con sus resúmenes.

2 horas más tarde, entre escuchar música, responder los mensajes de Sofi sobre mi accidente y escribir, por fin había terminado mi tarea.

Entre al baño por última vez, lavé mis dientes y me fui a dormir, mañana me esperaba una entrevista con mi mejor amiga, gracias a la enorme boca de mi amigo Alex.


Alexander en multimedia. .

DESPUÉS DEL VERANOWhere stories live. Discover now