Capítulo 8. Va a pensar lo peor

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- Chicos, teneis dos horas para empaquetar vuestras maletas. -dijo Greg, entrando en la cafetería del hotel, dónde estaban todos desayunando.

- Pero si el vuelo de vuelta a Atlanta es de aquí dos días. -dijo Aaron levantándose.

- Sí, pero por circunstancias meteorológicas hemos tenido que suspender la actividad que íbamos a hacer mañana.

- Entonces, ¿por qué nos vamos? ¿No entiendo nada? -dijo Lauren, una amiga de Tara, qué no se separaba de Aaron.

- De aquí dos horas un autocar nos llevará hasta Barcelona, donde hay un festival. -dijo Greg sacando un papel de su bolsillo trasero.

- ¿Qué tipo de festival? -pregunté.

- No sé, pero dicen que es divertido. Bueno, decidir si queréis ir al hotel antes de ir al festival o vamos directos.

- Directos

- Hotel

Los chicos empezaron a discutir sobre donde ir primero. La verdad es que yo pienso que es mejor ir al festival primero.

- ¡Silencio! -gritó Greg.- Por votaciones. ¿Quién vota a ir primero al festival?

Muchos levantaron la mano como yo pero otros no, como Tara que hizo bajar el brazo de Justin.

Manipuladora.

Greg empezó a contar y luego suspiró.

- 17 de 25. Ya está decidido, vamos al festival.

Los chicos que votaron como yo, gritaron por la "victoria".

Me reí de ellos. Qué infantiles pueden llegar a ser.

Ojalá y fuera así.

Marine cogió mi mano y me llevó al ascensor para llevarme a la habitación.

- Venga, vamos a recoger todo. -dijo cogiendo su ropa del suelo.

Cogí mis libros y los guardé en mi maleta. No creo que los necesite más hasta llegar a casa.

Reí en mi interior, al recordar lo que pasó cada vez que cogí mis libros. La primera vez, Aaron me hizo guardarlo y en la segunda vez, Justin me los tiró por ahí.

Me asomé por la ventana sintiendo este viento por última vez. Quién sabe, quizá nunca vuelva por aquí y sentir este viento puro.

- ¿Quién es el afortunado? -me giré para verla mi lado.

- ¿Afortunado? -dije extrañada.

- ¿Quién es el que ha abierto las puertas de tu corazón? -dijo apoyándose a la ventana.

- ¿De qué hablas? -dije haciéndome la tonta.

- Cuando una chica se asoma de la ventana o es de vida ligera o está enamorada.

- Ah, eso. Me asomé a la ventana para respirar este aire puro por última vez. Y ya está. No te hagas ilusiones.

- Seguro. -dijo sarcásticamente.- Haré ver que me lo he creído.

Agaché mi mirada esperando que se fuera. Cuando lo hizo, me volví a girar hacia la ventana.

- Tienes razón, Marine. Estoy enamorada. -murmuré para mi misma.

- Crystal. -me llamó sobresaltándome.- Tía, soy yo. ¿Por qué te asustas?

- Yo, no. Nada. -dije nerviosa.

- Lo que sea. ¿Me harías un favor?

- Claro, dime.

- Puedes llevarle esto a Aaron. -dijo dándome una sudadera y unas bambas.

- MMh, claro. -dije cogiéndolo con cara confusa.- ¿En que habitación están?

- En la última de este mismo pasillo. -dijo cogiendo ropa y guardándola en la maleta.

Asentí y salí de mi habitación. Empecé a andar hacia la última habitación. Toqué en la puerta y esperé.

La puerta se abrió dejándome ver a Justin. Me quedé mirándolo con los ojos abiertos. Iba sin camiseta con gotas en su torso y el pelo mojado. Por suerte, llevaba el pantalón puesto.

Me fijé en todos sus tatuajes. Los brazos llenos de ellos y unos cuantos en el torso.

- ¿Quieres que te deje mi móvil? -me preguntó.

- ¿Ah? -pregunté aún estando en mi mundo.

- Para hacerme una foto, te durará más. -dijo burlándose.

Creo que se dió cuenta que lo estaba admirando.

- He venido a...

- Primero entra, nena. -dijo cogiéndome de la cintura y pegándome a su cuerpo.

Se giró sobre sus pies, haciéndome girar junto a él. Estaba sonriendo con malicia.

- Suéltame. -dije empujándolo levemente lejos de mi. Aunque se sentía bien.

- Sé que en realidad estás disfrutando.

- Suéltame o verás. -dije amenazándolo.

- ¿Qué me harás? -dijo apretándome más a él.

Lo miré con cara seria y asentí levemente mirándolo alrededor. Él seguía mirándome esperando ver que es lo que haría. Me extrañé al no ver a Aaron, pero luego escuché el agua caer en la ducha. Así que concluí que se estaba duchando.

Levanté mi pierna y le pisé el pie fuertemente.

Justin apartó rápidamente su pie. Aproveché de que se sostenía de una sola pierna y lo empujé haciendo que caiga hacia atrás. Tuvo suerte de que estaba la cama detrás.

Rompí a reír con todas mis fuerzas al ver su cara. Me acerqué a la cama y empecé a señalarlo. Él me miraba serio, así que dejé de reírme aunque me costaba. Apreté los labios fuerte para que no se me escapara la risa, pero fracasé y volví a reír.

Justin estaba mirándome serio mientras estaba estirado y apoyado sobre codo izquierdo. De repente, se elevó un poco y me cogió la mano, haciendo que perdiera el equilibrio y cayera encima de él.

Soltó mi mano y pasó de nuevo sus brazos por mi cadera. Intenté levantarme pero él me lo impedía.

- Justin, Aaron saldrá y va a pensar lo peor. -dije siguiendo empujándolo.

Él empezó a reírse haciendo me enfadar.

- ¡Bieber! -grité. Pero me hice callar a mi misma cuando me di cuenta que el agua dejó se sonar en la ducha.

Justin miró hacia la puerta del baño y luego a mi. Le supliqué con la mirada que me dejara. Él me dejó lentamente y me levanté acomodando mi ropa.

Cogí la ropa de Aaron de la cama, que cayó cuando Justin me tiró encima suyo.

- Bueno, ¿para que viniste? -me preguntó Justin, poniéndose una camiseta.

- Yo...

Aaron salió del baño y nos miró con el ceño fruncido. Dios, él también iba sin camiseta.

- Oh, hola Crystal. -dijo sonriéndome. Le devolví el saludo mirando Justin.- ¿Qué haces aquí?

- Lo mismo le he estado preguntando, pero no me responde. -mintió Justin.

Lo fulminé con la mirada. Si fue él el que no me dejó hablar. Dejé de mirarlo y me acerqué a Aaron.

- Marine, me pidió que te diera esto. -dije dándole la ropa.

- Oops, se me olvidó cogerlo. -dijo riendo.

- Bueno, yo me voy. -dije mirando a los dos.

- Nos vemos. -dijo Aaron.

- Te acompaño. -me dijo Justin acercándose.

Crazy Youth (Justin Bieber)[TERMINADA]©Where stories live. Discover now