- Crystal, dormilona. Despierta.
Abrí los ojos y me encontré con el rostro de Marine cerca del mío.
- ¿Qué quieres? -dije con mala gana.
- Sal del puto coche. -dijo empujándome hacia la puerta, que se abrió y yo caí al suelo.
Vi unos pies delante y al alzar la visita, me encontré con la mirada de Justin.
Se agachó y me ayudó a levantarme. Cuando ya estaba de pie, me soltó y entró en la casa.
- Por Dios, Crystal. Qué torpe eres. -dijo Marine detrás mío. La fulminé con la mirada y entré a casa detrás de Aaron.
Al entrar, vimos el salón que no era ni grande ni pequeño. Solo habían tres puertas y al fondo habían escaleras de caracol.
- ¿Cuántas habitaciones tiene la casa? -pregunté al ver que era pequeña, pero acogedora.
- Dos.
- ¿Dos? -preguntó ahora Marine.
- Hay dos, pero en una hay una cama matrimonial y en la otra dos camas de una persona.
Marine y yo nos miramos unos segundos.
- Nosotras cogemos la matrimonial.
Los chicos asintieron y se sentaron en el sofá, en el que solo cabían tres personas.
Entramos en una de las puertas y nos encontramos la cocina, que si que era grande.
Nos dirigimos a la que había al lado de la cocina y nos encontramos con un pequeño baño.
Fuimos a la que estaba al lado de las escaleras y nos sorprendimos al ver que llevaba hacia fuera, en el bosque.
Miramos a los chicos que habían encendido la televisión y estaban ocupados viendo un partido.
Las dos subimos las escaleras con cuidado y llegamos a un pasillo no muy largo. Al final de este había una ventana grande con un mueble enfrente.
Solo habían dos puertas, tal y como lo dijo Aaron. Entramos a la de la derecha y nos encontramos con una habitación grande con una cama matrimonial, un armario grande y un sillón. No habían muchas cosas.
Marine entró y se dejó caer en la cama mirando al techo. Por mi parte, entré al baño que había a la izquierda de la habitación.
Cuando salí me encontré a Marine con la misma posición y perdida en su mundo.
- ¿Qué piensas Marine?
- Hay algo que no entiendo. -dijo sin apartar la mirada del techo.
- ¿El qué?
- ¿Por qué me buscan a mi también?
- Creo que olvidas que todo esto es cosa de Richard. ¿Te acuerdas del día que vino y inspeccionó la casa? Tú estabas ahí conmigo. Él sabe que te puede sacar información sobre mi.
- Sí. -dijo sentándose y mirándome.- Ese día es cuando le dije que tenías novio, y era Justin.
- Quizá no tendríamos que haber dicho eso. -dije haciendo una mueca.
ESTÁS LEYENDO
Crazy Youth (Justin Bieber)[TERMINADA]©
Fanfiction- ¿Por qué, Bieber? -le pregunté acercándome a pasos lentos. - No te puedo responder. No lo podrás entender. - Por favor. -le rogué sollozando. - ¿Tú qué pensaste? ¿Qué era un chico malo cualquiera como el de las típicas novelas? -preguntó mirándo...