Crazy Youth (Justin Bieber)[TERMINADA]©

Capitulo 37. ¿Dónde me llevarás?

Al entrar en casa, dejé el bolso con la ropa sucia dentro. Me tiré en un sillón y apoyé mi cabeza en el respaldo.

Suspiré aguantando mis lágrimas y me levanté para ir a la cocina. Tenía mucha sed desde que me despedí de Aaron y Marine que habían decidido ir a casa del jefe de Justin para comprobar unas cosas sobre lo sucedido mientras él no estuvo en la ciudad.

Dejé de beber agua cuando escuché pasos en la planta de arriba. Tragué con dificultad y cerré los ojos intentando calmarme y pensar con claridad que debería hacer.

Piensa, Crystal, piensa... ¿Qué haría Justin en este momento?

En ese preciso momento vi la colección de los cuchillos de cocina. Me acerqué a ello y cogí el más afilado que había. Lo escondí detrás de la espalda y empecé a andar hacia la puerta principal.

Miraba por todas partes por si salía alguien de repente o algo parecido.

Justo cuando llegué a la puerta, la abrí lentamente y cuando vi que había suficiente espacio para que yo pudiera pasar, me asomé para ver.

Cerré la puerta de golpe después de ver al hombre de fuera y corrí hacia la cocina, que es dónde estaba la otra puerta.

Escuchaba como el hombre de la puerta principal intentaba derribar la puerta. Seguido escuché los pasos de la planta de arriba, bajar por las escaleras. Agudicé mi oído, intentado averiguar cuantas personas había.

No supe cuántas eran, pero tenía más claro que el agua que de seguro eran más de dos.

Al llegar a la cocina, me puse a un lado de la estantería y la empujé pero era demasiado pesada para mi.

Maldecí y rápidamente me puse a pensar que hacer mientras apretaba el manillar del cuchillo. ¿Y si hago mucho ruido para que los vecinos sepan que pasa algo aquí?

No tuve tiempo de pensar en los pros y contras de la idea porque vi a más hombres bajar a la misma planta que yo.

Alargué mi brazo y empecé a tirar todos los utensilios que había en la estantería. Eran de cristal y metal, así que hacían un ruido horroroso para los oídos.

Cuando tiré una caja que contenía harina, salió un objeto negro y metálico. Rápidamente me agaché y cogí la pistola. La sacudí para que no quedara harina y me la guardé en la cinturilla del pantalón.

Ahora que la estantería no tenía los objetos, pesaba menos. Así que la empujé y abrí la puerta para poder salir de la casa.

Empecé a correr mientras sentía sus pasos detrás de mi. Eran lejanos pero los sentía.

Paré de correr cuando vi que por delante venían más y esta vez, me apuesto lo que sea que eran más cantidad que los de casa.

Desvié mi camino hacia la derecha donde estaba la calle. Si voy por ahí la gente me verá y me ayudará.

Cuando me faltaba poco para llegar, vi un coche patrulla pasar por ahí. Llegué a ver a Aaron y a Marine, entonces ese coche era del jefe de Justin.

Iba a gritarles pero de repente un hombre se vino delante sin que me diera cuenta.

Me detuve y me lo quedé mirando mientras me entraba el miedo.

No, Crystal. No sientas miedo. Llevas dos armas, tienes que sobresalir de esta.

Empecé a correr hacia él y le corté la garganta con el cuchillo.

Me horroricé al ver lo que había hecho. Nunca en mi vida pensé que llegaría a hacer esto.