Capitulo 26

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¡¿No estaba dormido?!

Una fuerte opresión logro despertarme de mi ensoñación, abrí los ojos poco a poco y me sorprendí a mi misma estando sobre el pecho de Michael, el que, respiraba suavemente y destellaba un ligero olor a alcol, arrugue mi nariz y trate de levantarme, pero unos fuertes brazos me lo impidieron, Intente levantarme con mas fuerza, Michael giro hacia la izquierda y soltó un gruñido.  

- Dile a Max que se vaya de la manada o yo lo decapitare- gruño, haciéndome reír- No me importa si es tu amigo, le enseñare a respetarte como mi luna, por que eres mía- murmuro, sentí mi cara arder

-Michael, despierta- gruñí tratando de liberarme- ¡Joder, Michael! 

- No... No quiero- murmuro

Gire provocando que cayéramos al suelo, choque contra el duro pecho de Michael, que despertó sobresaltado, lo mire con una sonrisa burlona y el entrecerró los ojos, miro hacia otro lado y yo le di un beso en la mejilla en señal de disculpa, me miro enojado y yo reí. Me levante de su cuerpo, el tomo mi mano y tiro de ella provocando que cayera de nuevo sobre su torso, puse mis manos sobre sus hombros y arque una ceja divertida, toque su mejilla con mi mano derecha y el sonrió, me acerque a lo suficiente como para sentir el roce de sus labios me levante rapidamente y corrí hacia la puerta del baño riendo con fuerza, sentí sus manos posarse en mi cintura antes de que yo pudiera entrar al cuarto de baño, me tiro sobre la cama y se puso encima mio, me miro divertido y yo reí.

- Así que... ¿Decapitaras a Max?- dije burlona

- Suena tentador...- murmuro acercándose a mi rostro 

- Apestas ¿Lo sabias?- dije mordiendo mi labio inferior, tratando de contener la risa

- ¿Estas segura de eso?- pregunto haciendo círculos en mi vientre, no pude evitar reír con fuerza- No te escucho ¿Estas segura?

- Si.... digo no, hueles a flores- chille, me retorcí bajo su cuerpo- Para, no puedo respirar  

- Di que soy el mejor- susurro en mi oído-  

- Eres el peor- chille al sentir mas cosquillas en mi vientre- ¡Eres el mejor! ¡Michael! 

- Esta bien- dijo, se levanto de encima mio y corrí hacia mi maleta, busque mi ropa riendo un poco. Camine hacia la puerta del baño, me detuve un momento, lo mire mientras se quitaba la camiseta y enarque una ceja.

- ¿Michael?- dije y el se dio la vuelta- solo quería decirte que eres un idiota- dije riendo.

Me adentre en el cuarto al verlo caminar hacia mi, cerré la puerta con pestillo y me di una relajante ducha, salí con unos pantalones negros y una blusa color celeste, salí del baño y me senté en una de las esquinas de la cama, me puse mis vans negras, sentí unos brazos rodearme la cintura. Contuve la respiración unos segundos.

- ¿Escuche mal o me llamaste idiota?- dijo, puedo sentir sus labios cerca de mi oído, mi piel se erizo por completo 

- Escuchaste mal- dije rapidamente- Llévame a conocer parís- dije nerviosa  

- Esta bien, mandona- dijo demasiado cerca de mi cuello, beso suavemente mi mejilla y se levanto de la cama y camino hacia el baño

Mi corazón latía rapidamente y mis sentimientos se mezclaban entre si, una sonrisa apareció en mi rostro, toque mis labios al recordar el beso que le di hace algunas horas, la confesión de mis sentimientos y su manera de actuar... ¿Lo recordara? ¿Recordara el beso? o simplemente lo olvido, Sentí una punzada en el pecho, ¿Por que me importa? ¡Joder! ¡esto es lo quería evitar!  

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