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Estaba nerviosa, saldría a luz, por así decirlo con Shawn, y sin él va, también los paparazzis, y entonces, eso sería un caos total. Me miré en el espejo una vez más, mi cabello tomado en una cola, unos pantalones sueltos, de género, de esos que te lo pones y quedas calentita, realmente estaba haciendo mucho frío. Arriba una remera suelta y encima de esa un suéter y encima de ese suéter delgado una chaqueta de Shawn de esas sueltas, sin cierres, cerradas y anchas. No tenía chaqueta que me cubriera que me quedara bien, entonces él me prestó algo.
Olía a él, joder, era tan exquisito, su olor, su perfume, era embriagante, sonreí una vez más ante el espejo, tomé mi bolso, donde llevaba algo de dinero y salí, al bajar las escaleras, estaban Kenny y Shawn esperando.
— Lista —les dije. Ellos asintieron.
— Toma ______ —dijo Shawn pasándome unos lentes, lo miré con el seño fruncido.
— Bueno, digamos que hay sol...sólo bromeo, es por los flashes, no estás acostumbrada —me dijo, asentí.
— Okay —suspire y salimos.
Shawn me dijo en el camino que con Scoot la cosa de salir los dos juntos no había resultado tan mal, lo miré sorprendida, dijo que se molestó un poco, pero después entendió, me dijo que él estaba un poco nervioso con todo esto y le creía perfectamente, yo también lo estaba.
Miré hacía mi bolso, me pregunté si tenía demasiado dinero para los regalos de navidad, bueno, compraría para todos, hasta para Scoot, mi familia no estaba conmigo, ni modo, cuando me vaya, les llevaré algo.
Si es que me voy... el pensamiento llegó tan fugaz como se fue ¿qué me retenía aquí?, ¿Shawn?, bueno, si, pero, no lo sé, siento que si él no me corresponde, ¿para qué? Tú hija claro, él quería la nena, pero, no a mí, el pensamiento era muy deprimente, lo miré, estaba concentrado en el celular, no sé que cosa.
Miré hacía la ventana para distraerme un poco, esos pensamientos siempre me mataban, así que tenía que distraerme.
Apenas llegamos al mall, estaban ahí, los paparazzis, joder, ¿cómo lo hacían?, bufé, Shawn rodo los ojos, sonreí, él obviamente estaba acostumbrado, pero yo no, Shawn salió primero, sentí el sonido de los flashes y esos entrar en el auto, de seguro se vieron mis piernas, cuando los paparazzis siguieron a Shawn, Kenny me sacó a mí, por lo tanto yo iba más atrás que Shawn.
Los paparazzis no estaban tan cercas como pensé que lo estarían, ellos estaban a metros de distancia, pero fotografiando, aun así los flashes se sentían y tenías que cerrar los ojos, pura suerte la mía andar con lentes, sentí como me llegaban los flashes, y la caras sorprendidos de los paparazzis por mi estado de embarazada, su imaginación estaba viajando muy lejos, y tenían razón...
Por primera vez.
Shawn nos esperó y me puse a su lado, empezamos a caminar hacía adentro.
— Joder, eso es frustrante —le dije mirando hacía atrás. Se encogió de hombros con indiferencia.
— Lo sé, pero estoy acostumbrado, después cuando lleguemos a casa, ya las fotos estarán y comenzaran los rumores —dijo, con un desdén de aburrimiento.
— Eso es muy jodido —le dije gruñendo.
— La fama —dijo él, entonces nos encaminamos hacía las tiendas de ropa para bebés, estaba totalmente encantada.
Todo era rosa o morado, celeste, verde agua, amarillo, pero más rosa y morado, Shawn se veía totalmente maravillado y contento, sonreí viéndolo como preguntaba a la señorita que atendía sobre cuantas variedades tenían, él estaba entusiasmado, sin tan sólo me creyera y tuviera fe en que está bebé es suya, estoy segura que sus ojos brillarían con más intensidad.
Kenny no se quedaba atrás, joder, él también buscaba ropa por montones, reí, pero entonces sentí el ahora familia pateo, volví a reír mientras tocaba mi vientre, levanté la vista y vi a Shawn mirándome, fijamente, con sus ojos mieles, pero ahora oscuros.
Se me erizó la piel...recuerdo esa mirada.
Le regresé la mirada, pero entonces él sonrió travieso, joder, no, no, de nuevo, miré hacía otro lado incomoda, no por él, por mí, me sentía incomoda con su mirada, recordándola una y otra vez, y sobre todo en esos sueños.
Regresé en mi búsqueda de vestuario, en total terminamos con más de treinta bolsas, quince llevaba el pobre Kenny, yo tres y son las más livianas, y Shawn las demás.
— Mmmh —dije viendo un enorme helado de chocolate.
— ¿Qué? —preguntó curioso Shawn, me sonrojé.
— Quiero un helado —le dije, Shawn levantó una ceja divertido, luego entendió.
— Oh —dijo gracioso, nos paramos en una especie de heladería en el mall, me quité los lentes, joder, me los puse de nuevo, si que afectaban los flashes, Kenny fue por nuestros helados, de inmediato le dije que quería una de chocolate y grande, entonces Shawn río.
Nos sentamos en unos de esos asientos que estaban ahí, dejamos todas las bolsas a un lado.
— Lindo paseo —dijo él gracioso, reí.
— Pobre Kenny, con todas las bolsas que le dejamos —le dije, él río.
— Oh si, fueron muchas cosas —río. Lo miré, ¿por qué era tan perfecto?, de perfil, de frente, de arriba, de abajo, mmm, de abajo, me sonrojé en el pensamiento incoherente.
— ¿Por qué te sonrojas? —me preguntó, y otra vez el sonrojo, oh no, no le diría.
— Por nada —le dije, él me levantó otra vez la maldita ceja, ¿por qué él puede hacerlo y yo no?
— Piensa en que te creo —dijo, reí, Dios, me encanta.
Kenny estuvo devuelta con nuestros helados, le sonreí, él a mí, al parecer el único que no me quería era Scoot, bueno, yo ahora no estoy sola, él si.
Pero de que estén un poco amigables conmigo no significa que me quieran, o crean, joder, eso era verdad, el bebé volvió a patear, pero no lo tomé en cuenta, miré a Shawn, vi que su miraba estaba en mi vientre, lo sabía, él quería tocarlo, pero como estaban los paparazzis ahí se lo impedía.
Joder, ¿qué pasará en twitter?, bueno, sigo a muchas personas, sin pensarlo me metí, ¡ya estaban las fotos publicadas en twitter y en todas partes de nosotros en el estacionamiento!, maldita sea, son rápido.
— ¿Qué te pasa ______? —dijo Shawn con el seño fruncido terminando su helado, de pronto el apetito se esfumó, le mostré el twitter, el hizo un silencioso 'oh'. — Es lo mismo de siempre ______. —Dijo tranquilamente.
Pero ellos ya decían que Shawn sería padre, o cosas como esas, miré mi helado, ahora sin ganas, estaba un poco más de la mitad comido.
— Ya no tengo hambre —suspire.
— A ti se te va el apetito muy pronto, con cualquier cosa, se esfuma —dijo Shawn un poco molesto, pero en realidad no me importaba.
— Shawn, siempre cómo, es que, esto me dejó nerviosa, entiéndeme. —el suspiro, luego miró mi helado.
— ¿Me lo das? —me dijo, sonreí tontamente, ¡oh vamos! Esto era una fantasía que tenía, que él comiera de mi helado, pero era una fantasía inocente.
— Claro —se lo pasé y él empezó a lamerlo, joder, se veía tan sexy así. Bien la fantasía de inocente pasó a hacer erótica, como arruinas los momentos tiernos ______ ¡bien hecho!
Reí negando porque mi conciencia me regañaba, joder, ella estaba más cuerda que yo, sonreí, él se lo comía, parecía un pequeño niño con un dulce nuevo, me preguntaba como sería la nena, sonreí hasta pensamiento, ¿tendría el cabello rubio de su padre?, ¿mis ojos?, sería una buena combinación, pero muy usada, chica rubia con ojos azules, prefiero al revés. Oh eso está mejor, chica morena con ojos miel.
— ¿En qué piensas? —me preguntó.
— Shawn, ¿qué nombre le quieres poner a la bebé? —le pregunté, el abrió los ojos como platos.
— ¿Hablas en serio? —dijo... ¿emocionado?, oh Shawn, claro que si.
— Sip —le dije, él sonrió contento.
— Cuando se me ocurra uno, bien hermoso, original, pero sobre todo, con mucho, mucho estilo, te digo —dijo, y yo reí.

 



Era solo un Capricho (Shawn Mendes y Tu) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora