Romances color vino (Sin Corregir)

Decepción

   Fue una cena llena de indirectas, sonrisas nerviosas de mi parte, sonrisas seductoras de su parte y intrigas.

   Romances color vino... ¿Por que decir todo eso? ¿Que me iba a decir cuando llegó la chica?

   Gracias a ese comentario me siento confundida, con el remordimiento entrando en mi mente cada segundo. No se por que pero siento que esta mal estar con él.

   -¿Que sucede? -Pregunta con tono serio y atento.

   Sonrió y niego lentamente mientras subo al auto. El sólo asintió y me ayudo a subir.

   Los tacones a un final no fueron un problema, por que casi toda la cita, la pase sentada, así que mis pies están como en un principio. Durante todo el camino, hubo un silencio tenso, él callado pero tranquilo y yo nerviosa y con palpitaciones todavía aceleradas.

   Era tensión... Sexual. Pura tensión sexual y ya me quedaba claro.

   El auto se detuvo en frente del hotel y el chofer en un abrir y cerrar de ojos, ya estaba abriéndonos la puerta. Bajé con elegancia ya que no quería sufrir una caída ridícula al final de la noche, menos con la mirada que podía sentir de Mark a mis espaldas, esperé a que el saliera y juntos entramos al hotel, siendo recibidos por la mirada curiosa de la recepcionista.

De nuevo me sentí como una artista de cine o algún famoso al entrar al ascensor, ya que la mujer y los dos hombres, me miraban detenidamente. A decir verdad, tantas miradas me ponían nerviosa, era como si intentaran averiguar mi nombre, edad y mi historia con solo sus ojos.

   Mark decidió acompañarme hasta la habitación, como todo un caballero. Pero durante el transcurso, la tensión fue aumentando.

   Su mirada pasaba de mi rostro a mi cuello con lentitud. Podía ver como se hundía en mi por el rabillo del ojo, pero su actitud seguía igual de tranquila, aun que podía ver un poco de desesperación cuando dejaba un camino en mi con su mirada.

   Su manera de verme aceleraba mis palpitaciones, hacía que sintiera ese deseo de tenerlo más cerca de mi cuerpo y el maldito ascensor parecía que iba más lento que una tortuga. Necesitaba salir de ahí lo más rápido posible.

   El ascensor se detuvo y todos bajamos de él, Mark y yo fuimos los últimos en salir, así que logré captar como los dos hombres y la mujer, murmuraban mientras se iban alejando, además sus miradas rápidas a mi persona.

   Frunci el ceño y no pude evitar sentirme realmente molesta por su actitud de mujeres chismosas ¿Tan importante es Mark, que todos no pueden evitar vernos?

   -Esta es tu habitación ¿cierto? -La vos de Mark llamo mi atención de nuevo al mundo real.

   Lo miré directamente a los ojos y sentí esa electricidad extraña en todo mi cuerpo, esas palpitaciones aceleradas y el calor empezó a aparecer de nuevo.

   -Si -Logré responder simplemente.

   Supuse que él entendió que estaba nerviosa ya que soltó una sonrisa de lado un poco burlona.

   -Bien -Estuvo unos segundos en silencio -¿Quieres dormir ya?

   Su vos era grave y con cierto tono que erizo mi piel, de una forma no terrorífica sino... Tentadora.

   Sonreí y negué con lentitud, él sonrió de lado un poco más y asintió, tomo mi brazo izquierdo y lo entrelazó en su brazo derecho.

   Simplemente lo seguí hasta el ascensor y deje que me llevara hasta donde el quisiera. Estaba totalmente envuelta en el ambiente seductor que el provocaba.